Asensio e Isco: los datos que revelan que han vuelto
No se les envenenó el caramelo de la Copa, un Melilla que pecó de valiente y tierno, y lideraron al Madrid en varias de las estadísticas de ataque.
Mario Cortegana
As
En festivo, a las 16:15 y ante un Segunda B al que el Madrid ya había sentenciado en octubre en Melilla, Isco y Asensio sortearon de maravilla la peligrosa tentación de amodorrarse: evitaron la siesta y dieron una fiesta. Con un set de fútbol risueño, le refrescaron a la afición los muchos motivos por los que tantas noches les coreó. Fue testigo directo Solari, que de momento no parece tener el carné de militante de sus clubes de fans.
Picha y Bro levantaron un temporal que dejó tiritando a un rival muy inferior, en una tarde en la que invitaron a su parque de atracciones a Vinicius para enseñarle cómo se divierten. En arrancada y definición de jugador diferente, abrió la lata Asensio, que cogió carrerilla y en seis minutos hizo también el 2-0 y asistió magistralmente a Javi Sánchez para el 3-0. Con buen tono desde el inicio, le hizo el relevo en el primer plano de la segunda parte Isco, que se lució en el 4-0, una pisadita y un derechazo digno de aplauso, y cerrando la cuenta con esa misma fórmula, fino control y ajustado disparo.
Autores de cuatro de los seis goles y presentes en cinco de ellos, lideraron además varias estadísticas en las misiones de ataque: Asensio fue el que más regateó (3), ocasiones creó (8) y centró al área (3, junto con Isco y Vinicius). Se empleó en la asociación (56 pases), rescató cuatro balones y forzó dos faltas. Isco fue quien más pases buenos dio (66) y balones tocó (98), faltas provocó (3, empatado con Vinicius y Carvajal). Además, fabricó seis oportunidades y dejó siete recuperaciones. Aun siendo en una cita menor, los datos anuncian el despertar de dos imprescindibles de este Madrid.
Mario Cortegana
As
En festivo, a las 16:15 y ante un Segunda B al que el Madrid ya había sentenciado en octubre en Melilla, Isco y Asensio sortearon de maravilla la peligrosa tentación de amodorrarse: evitaron la siesta y dieron una fiesta. Con un set de fútbol risueño, le refrescaron a la afición los muchos motivos por los que tantas noches les coreó. Fue testigo directo Solari, que de momento no parece tener el carné de militante de sus clubes de fans.
Picha y Bro levantaron un temporal que dejó tiritando a un rival muy inferior, en una tarde en la que invitaron a su parque de atracciones a Vinicius para enseñarle cómo se divierten. En arrancada y definición de jugador diferente, abrió la lata Asensio, que cogió carrerilla y en seis minutos hizo también el 2-0 y asistió magistralmente a Javi Sánchez para el 3-0. Con buen tono desde el inicio, le hizo el relevo en el primer plano de la segunda parte Isco, que se lució en el 4-0, una pisadita y un derechazo digno de aplauso, y cerrando la cuenta con esa misma fórmula, fino control y ajustado disparo.
Autores de cuatro de los seis goles y presentes en cinco de ellos, lideraron además varias estadísticas en las misiones de ataque: Asensio fue el que más regateó (3), ocasiones creó (8) y centró al área (3, junto con Isco y Vinicius). Se empleó en la asociación (56 pases), rescató cuatro balones y forzó dos faltas. Isco fue quien más pases buenos dio (66) y balones tocó (98), faltas provocó (3, empatado con Vinicius y Carvajal). Además, fabricó seis oportunidades y dejó siete recuperaciones. Aun siendo en una cita menor, los datos anuncian el despertar de dos imprescindibles de este Madrid.