Simeone minimiza al Barça como nadie, pero le cuesta amenazarle
Nadie en la Liga le había dejado en solo dos remates a puerta a los de Valverde, pero igualmente todos sus anteriores rivales le dispararon más.
Jorge García
As
Era un partido para no equivocarse, el que lo hiciera perdía", Simeone resumió en la entrevista inmediata tras el partido la idea que le había transmitido a sus hombres antes de enfrentarse al Barcelona, la que se apreció de principio a final. Los jugadores del Barcelona, por su parte, Busquets por ejemplo, volvieron a criticar de soslayo el estilo del técnico del Atlético refiriéndose a falta de atracción que genera un partido así, con tres remates entre los tres palos. Dos del Barcelona y uno del Atlético. Pero el técnico abandonó el estadio con aire de satisfacción. "De mi equipo me gustó todo", aseveró el argentino, por lo que nadie se puede llamar a engaño. El Atlético controló sin balón al Barcelona y lo minimizó en Liga como nadie esta temporada. Solamente remató dos veces entre los tres palos. Valencia, Valladolid, Rayo, Betis y Leganés consiguieron dejarle en cinco, su peor marca hasta ayer. Pero Simeone consigue que el Barcelona juega con precauciones y un punto menos de profundidad para cuidarse de las contras rojiblancas tras pérdida. Como la que Griezmann inició tras esa presión trabajada sobre el pivote por la espalda y que Costa no llegó a rematar por muy poco. Frente al Atlético, el 4-4-2 para Valverde es más que obligado para arropar a Busquets ante blindada medular colchonera. Solamente esta temporada el Barcelona se había quedado una vez en dos remates a portería. Fue en el partido plagado de suplentes contra la Cultural.
Pero si Simeone es capaz de maniatar y de preocupar hasta el límite a Valverde, tampoco es capaz de amenazarle como otros. Un único remate a portería, eso sí, con el 100% de acierto. Esta temporada, en diecisiete partidos, solamente el PSV se había quedado en esa cifra cuando se enfrentó al Barcelona. En España, el récord negativo contra los de Valverde era el Athletic, que se quedó en 2. Y es que el primer córner colchonero a favor fue precisamente el del gol. Dos botó en todo el partido. Posesiones de poco riesgo, llevando la pelota hasta posiciones donde perderla no generaba peligro de vuelta y con muy poco acompañamiento. En el 55' una jugada definió lo que venía siendo la ofensiva colchonera. Sin hablar de la posesión, claro. Costa gana una pelota al espacio y conduce durante 25 metros, intenta estirar al equipo pero pasan varios segundos y los primeros rojiblancos aparecen por detrás a más de 15 metros de él. El dato de Opta es revelador en ese sentido. La posición media del Atlético durante el partido fue muy baja, en 46 metros, es decir prácticamente en campo propio. Pero tampoco se puede decir que la del Barcelona metiera al Atlético en su portería, fue centrada, se posicionó en 53 metros. Precauciones y equilibrio, de ambos y un resultado evidente, el empate.
Jorge García
As
Era un partido para no equivocarse, el que lo hiciera perdía", Simeone resumió en la entrevista inmediata tras el partido la idea que le había transmitido a sus hombres antes de enfrentarse al Barcelona, la que se apreció de principio a final. Los jugadores del Barcelona, por su parte, Busquets por ejemplo, volvieron a criticar de soslayo el estilo del técnico del Atlético refiriéndose a falta de atracción que genera un partido así, con tres remates entre los tres palos. Dos del Barcelona y uno del Atlético. Pero el técnico abandonó el estadio con aire de satisfacción. "De mi equipo me gustó todo", aseveró el argentino, por lo que nadie se puede llamar a engaño. El Atlético controló sin balón al Barcelona y lo minimizó en Liga como nadie esta temporada. Solamente remató dos veces entre los tres palos. Valencia, Valladolid, Rayo, Betis y Leganés consiguieron dejarle en cinco, su peor marca hasta ayer. Pero Simeone consigue que el Barcelona juega con precauciones y un punto menos de profundidad para cuidarse de las contras rojiblancas tras pérdida. Como la que Griezmann inició tras esa presión trabajada sobre el pivote por la espalda y que Costa no llegó a rematar por muy poco. Frente al Atlético, el 4-4-2 para Valverde es más que obligado para arropar a Busquets ante blindada medular colchonera. Solamente esta temporada el Barcelona se había quedado una vez en dos remates a portería. Fue en el partido plagado de suplentes contra la Cultural.
Pero si Simeone es capaz de maniatar y de preocupar hasta el límite a Valverde, tampoco es capaz de amenazarle como otros. Un único remate a portería, eso sí, con el 100% de acierto. Esta temporada, en diecisiete partidos, solamente el PSV se había quedado en esa cifra cuando se enfrentó al Barcelona. En España, el récord negativo contra los de Valverde era el Athletic, que se quedó en 2. Y es que el primer córner colchonero a favor fue precisamente el del gol. Dos botó en todo el partido. Posesiones de poco riesgo, llevando la pelota hasta posiciones donde perderla no generaba peligro de vuelta y con muy poco acompañamiento. En el 55' una jugada definió lo que venía siendo la ofensiva colchonera. Sin hablar de la posesión, claro. Costa gana una pelota al espacio y conduce durante 25 metros, intenta estirar al equipo pero pasan varios segundos y los primeros rojiblancos aparecen por detrás a más de 15 metros de él. El dato de Opta es revelador en ese sentido. La posición media del Atlético durante el partido fue muy baja, en 46 metros, es decir prácticamente en campo propio. Pero tampoco se puede decir que la del Barcelona metiera al Atlético en su portería, fue centrada, se posicionó en 53 metros. Precauciones y equilibrio, de ambos y un resultado evidente, el empate.