Manotazo de Fellaini al Valencia
El jugador belga marcó en el 91', tras ayudarse con el envés de la mano. Los ‘Diablos Rojos’ fueron superiores a su rival, con más de 20 oportunidades.
Alberto Muñoz
As
Aun sin el gol de Fellaini en el 91 (que según las imágenes se ayudó con el envés de la mano), las opciones del Valencia habrían sido mínimas, sí, pero el hecho de que el belga lo marcase en el último minuto fue mucho más doloroso para los ches, que se marchan eliminados de la Champions League tras su derrota en Turín (0-1). Los ‘Diablos Rojos’ fueron superiores a sus rivales durante todo el partido, llegaron a tener más de una veintena de oportunidades, y fue la lluvia de balones colgados al área final la que terminó dándoles un partido que les garantiza su presencia en los octavos de la competición. Vuelve el Manchester a jugar con fuego, pero vuelve, en definitiva, a ganar.
Cambiaron las caras, volvieron jugadores apartados del equipo, y el resultado fue… exactamente el mismo. El Manchester United volvió a quedarse una primera parte más sin ver portería. Ni siquiera la debilidad del rival animó a unos jugadores que parecen tener un bloqueo mental con los primeros 45 minutos. Rashford tuvo dos ocasiones muy claras en los primeros compases, pero según fueron pasando los segundos los red devils fueron creyendo cada vez menos en sus posibilidades hasta que poco antes del descanso fue el Young Boys el que tuvo su ocasión.
Mourinho, que había cargado contra Martial, Rashford y Lingard tras el empate contra el Crystal Palace, dejó en el banquillo a Paul Pogba, del que se esperaba que liderase el equipo, y mandó directamente a la grada a Alexis Sánchez. El equipo, resquebrajado y con demasiados frentes abiertos con el entrenador, lo va a tener muy difícil para volverse a unir bajo el mandato del portugués.
Aun así, con la tripleta atacante a la que había acusado de inmadurez tan solo un par de días antes, el United siguió intentándolo por medio de Rashford, que protagonizaba prácticamente todos los disparos de los locales aunque sin fortuna. Mourinho tuvo que dar marcha atrás sobre la hora de juego y dio entrada a Lukaku y Pogba, que dejó su sello nada más entrar con una buena combinación con el delantero inglés.
Pero, como casi siempre, el clavo ardiendo al que se suelen agarrar los equipos de Mourinho volvió a entrar en juego. Y lo hizo una vez más de la mano de uno de esos jugadores que tanto le gustan al portugués, Marouane Fellaini, que aprovechó la lluvia de balones colgados de los últimos minutos para certificar la victoria de los ingleses y la eliminación definitiva del Valencia de esta edición de la Champions League.
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Aun sin el gol de Fellaini en el 91 (que según las imágenes se ayudó con el envés de la mano), las opciones del Valencia habrían sido mínimas, sí, pero el hecho de que el belga lo marcase en el último minuto fue mucho más doloroso para los ches, que se marchan eliminados de la Champions League tras su derrota en Turín (0-1). Los ‘Diablos Rojos’ fueron superiores a sus rivales durante todo el partido, llegaron a tener más de una veintena de oportunidades, y fue la lluvia de balones colgados al área final la que terminó dándoles un partido que les garantiza su presencia en los octavos de la competición. Vuelve el Manchester a jugar con fuego, pero vuelve, en definitiva, a ganar.
Cambiaron las caras, volvieron jugadores apartados del equipo, y el resultado fue… exactamente el mismo. El Manchester United volvió a quedarse una primera parte más sin ver portería. Ni siquiera la debilidad del rival animó a unos jugadores que parecen tener un bloqueo mental con los primeros 45 minutos. Rashford tuvo dos ocasiones muy claras en los primeros compases, pero según fueron pasando los segundos los red devils fueron creyendo cada vez menos en sus posibilidades hasta que poco antes del descanso fue el Young Boys el que tuvo su ocasión.
Mourinho, que había cargado contra Martial, Rashford y Lingard tras el empate contra el Crystal Palace, dejó en el banquillo a Paul Pogba, del que se esperaba que liderase el equipo, y mandó directamente a la grada a Alexis Sánchez. El equipo, resquebrajado y con demasiados frentes abiertos con el entrenador, lo va a tener muy difícil para volverse a unir bajo el mandato del portugués.
Aun así, con la tripleta atacante a la que había acusado de inmadurez tan solo un par de días antes, el United siguió intentándolo por medio de Rashford, que protagonizaba prácticamente todos los disparos de los locales aunque sin fortuna. Mourinho tuvo que dar marcha atrás sobre la hora de juego y dio entrada a Lukaku y Pogba, que dejó su sello nada más entrar con una buena combinación con el delantero inglés.
Pero, como casi siempre, el clavo ardiendo al que se suelen agarrar los equipos de Mourinho volvió a entrar en juego. Y lo hizo una vez más de la mano de uno de esos jugadores que tanto le gustan al portugués, Marouane Fellaini, que aprovechó la lluvia de balones colgados de los últimos minutos para certificar la victoria de los ingleses y la eliminación definitiva del Valencia de esta edición de la Champions League.
