La Policía incauta bienes al presidente de la Sampdoria
Los investigadores sospechan que algunos fondos del club fueron desviados a otras empresas controladas por el presidente del club, que es productor y distribuidor cinematográfico.
DPA
La Policía italiana incautó bienes y activos por valor de 2,6 millones de euros (2,93 millones de dólares) al club italiano Sampdoria, a su presidente, Massimo Ferrero, y a otras cinco personas por sospechas de irregularidades financieras y fraude, anunció hoy la fuerza especial Guardia di Finanza.
La Policía confiscó a la Sampdoria, de la primera división del fútbol italiano, 200.000 euros y además incautó una casa de lujo en Florencia. Los investigadores sospechan que algunos fondos del club fueron desviados a otras empresas controladas por Ferrero, que es productor y distribuidor cinematográfico.
En el centro de la investigación está la venta del futbolista de Guinea Ecuatorial Pedro Obiang, que dejó la Sampdoria en 2015 para jugar en el West Ham de la Liga inglesa. El precio del traspaso fue de seis millones de euros, pero se cree que se desviaron cerca de 1,2 millones.
Ferrero, de 67 años, adquirió la Sampdoria en junio de 2014. El club de Génova estaba en una pésima situación financiera y el empresario se hizo cargo de las deudas, entonces estimadas en 15 millones de euros. En ese mismo mes llegó a un acuerdo en un juicio sobre la bancarrota de la aerolínea Livingston, que operó entre 2003 y 2010. En los años siguientes se vio envuelto en casos de evasión de impuestos.
La Policía italiana incautó bienes y activos por valor de 2,6 millones de euros (2,93 millones de dólares) al club italiano Sampdoria, a su presidente, Massimo Ferrero, y a otras cinco personas por sospechas de irregularidades financieras y fraude, anunció hoy la fuerza especial Guardia di Finanza.
La Policía confiscó a la Sampdoria, de la primera división del fútbol italiano, 200.000 euros y además incautó una casa de lujo en Florencia. Los investigadores sospechan que algunos fondos del club fueron desviados a otras empresas controladas por Ferrero, que es productor y distribuidor cinematográfico.
En el centro de la investigación está la venta del futbolista de Guinea Ecuatorial Pedro Obiang, que dejó la Sampdoria en 2015 para jugar en el West Ham de la Liga inglesa. El precio del traspaso fue de seis millones de euros, pero se cree que se desviaron cerca de 1,2 millones.
Ferrero, de 67 años, adquirió la Sampdoria en junio de 2014. El club de Génova estaba en una pésima situación financiera y el empresario se hizo cargo de las deudas, entonces estimadas en 15 millones de euros. En ese mismo mes llegó a un acuerdo en un juicio sobre la bancarrota de la aerolínea Livingston, que operó entre 2003 y 2010. En los años siguientes se vio envuelto en casos de evasión de impuestos.
