Descartan posible envenenamiento del testigo de Odebrecht en Colombia
Colombia, EFE
El tarro con cianuro hallado en casa de Jorge Enrique Pizano, testigo clave en el escándalo de sobornos de Odebrecht en Colombia, tenía su ADN tanto en las dos bolsas que lo envolvían como en el recipiente del tóxico que causó la muerte por envenenamiento de su hijo, informó hoy Medicina Legal.
Pizano murió el pasado 8 de noviembre y tres días después falleció envenenado su hijo Alejandro Pizano Ponce de León, quien había viajado de España a Colombia para asistir al sepelio de su padre.
“La conclusión a la cual ha llegado el Instituto de Medicina Legal es que las muestras de ADN recuperadas tanto de la bolsa externa como en la bolsa interna y del contenedor, en su tapa y en el cuerpo del contenedor del cianuro, es del señor Jorge Pizano. Con una alta seguridad científica“, aseguró en una rueda de prensa el director de esa entidad, Carlos Valdés.
En este sentido, Valdés comentó que ese dato muestra que Pizano “tocó la bolsa externa, la bolsa interna y el contenedor en cuerpo y tapa”.
Jorge Enrique Pizano, que sufría un cáncer y falleció el pasado 8 de noviembre de un infarto, estaba considerado como testigo clave en el caso Odebrecht, ya que era interventor de la carretera Ruta del Sol II, cuyo socio mayoritario era la empresa brasileña.
Su hijo Alejandro, de 31 años, falleció el 11 de noviembre después de beber de una botella de agua saborizada que encontró en el escritorio de su padre y que estaba contaminada con cianuro.
Por eso, Medicina Legal ordenó un análisis a los tejidos extraídos al cuerpo de Pizano padre que descartaron que fuera envenenado.
El tarro con un kilo de cianuro fue hallado el pasado fin de semana por investigadores de la Fiscalía debajo del lavamanos de un baño auxiliar de la casa de campo de los Pizano Ponce de León, ubicada en la localidad de Subachoque, cercana a Bogotá, y a la que se había mudado meses atrás la familia.
Valdés aclaró que todo el ADN que han recuperado “corresponde a la misma persona” que “se puede identificar como perteneciente a Jorge Pizano”.
El director de Medicina Legal también explicó que “el cianuro causa daño cuando se convierte en ácido cianhídrico”, compuesto químico en que se transforma cuando se disuelve en agua.
Por su parte, el delegado para la Seguridad Ciudadana de la Fiscalía, Luis González, explicó que “lo importante en este momento” es que “se encontró en el contenedor de cianuro (…) ha dado que sí había rastros genéticos” y que se corresponden con los de Jorge Enrique Pizano.
En agosto pasado, Pizano dio una entrevista a Canal Uno que fue emitida tras su muerte y en ella reveló que el fiscal general de Colombia, Néstor Humberto Martínez, conocía desde 2015, antes de asumir el cargo, las irregularidades en la licitación para la construcción de Ruta del Sol II.
Las acusaciones han ido creciendo contra el fiscal Martínez desde que se hizo público el caso, puesto que en 2015 era abogado del conglomerado bancario Grupo Aval, que a su vez es accionista mayoritario de la Corporación Financiera Colombiana S.A. (Corficolombiana), socia de Odebrecht en esa carretera.
Pizano era en 2015 responsable del control financiero de la Ruta del Sol II, que comunica el centro con el norte del país, por parte de Corficolombiana, involucrada en la obra a través de Episol S.A.S.
El Grupo Aval y Corficolombiana integran el conglomerado del industrial Luis Carlos Sarmiento Angulo, una de las personas más ricas de Colombia.
El tarro con cianuro hallado en casa de Jorge Enrique Pizano, testigo clave en el escándalo de sobornos de Odebrecht en Colombia, tenía su ADN tanto en las dos bolsas que lo envolvían como en el recipiente del tóxico que causó la muerte por envenenamiento de su hijo, informó hoy Medicina Legal.
Pizano murió el pasado 8 de noviembre y tres días después falleció envenenado su hijo Alejandro Pizano Ponce de León, quien había viajado de España a Colombia para asistir al sepelio de su padre.
“La conclusión a la cual ha llegado el Instituto de Medicina Legal es que las muestras de ADN recuperadas tanto de la bolsa externa como en la bolsa interna y del contenedor, en su tapa y en el cuerpo del contenedor del cianuro, es del señor Jorge Pizano. Con una alta seguridad científica“, aseguró en una rueda de prensa el director de esa entidad, Carlos Valdés.
En este sentido, Valdés comentó que ese dato muestra que Pizano “tocó la bolsa externa, la bolsa interna y el contenedor en cuerpo y tapa”.
Jorge Enrique Pizano, que sufría un cáncer y falleció el pasado 8 de noviembre de un infarto, estaba considerado como testigo clave en el caso Odebrecht, ya que era interventor de la carretera Ruta del Sol II, cuyo socio mayoritario era la empresa brasileña.
Su hijo Alejandro, de 31 años, falleció el 11 de noviembre después de beber de una botella de agua saborizada que encontró en el escritorio de su padre y que estaba contaminada con cianuro.
Por eso, Medicina Legal ordenó un análisis a los tejidos extraídos al cuerpo de Pizano padre que descartaron que fuera envenenado.
El tarro con un kilo de cianuro fue hallado el pasado fin de semana por investigadores de la Fiscalía debajo del lavamanos de un baño auxiliar de la casa de campo de los Pizano Ponce de León, ubicada en la localidad de Subachoque, cercana a Bogotá, y a la que se había mudado meses atrás la familia.
Valdés aclaró que todo el ADN que han recuperado “corresponde a la misma persona” que “se puede identificar como perteneciente a Jorge Pizano”.
El director de Medicina Legal también explicó que “el cianuro causa daño cuando se convierte en ácido cianhídrico”, compuesto químico en que se transforma cuando se disuelve en agua.
Por su parte, el delegado para la Seguridad Ciudadana de la Fiscalía, Luis González, explicó que “lo importante en este momento” es que “se encontró en el contenedor de cianuro (…) ha dado que sí había rastros genéticos” y que se corresponden con los de Jorge Enrique Pizano.
En agosto pasado, Pizano dio una entrevista a Canal Uno que fue emitida tras su muerte y en ella reveló que el fiscal general de Colombia, Néstor Humberto Martínez, conocía desde 2015, antes de asumir el cargo, las irregularidades en la licitación para la construcción de Ruta del Sol II.
Las acusaciones han ido creciendo contra el fiscal Martínez desde que se hizo público el caso, puesto que en 2015 era abogado del conglomerado bancario Grupo Aval, que a su vez es accionista mayoritario de la Corporación Financiera Colombiana S.A. (Corficolombiana), socia de Odebrecht en esa carretera.
Pizano era en 2015 responsable del control financiero de la Ruta del Sol II, que comunica el centro con el norte del país, por parte de Corficolombiana, involucrada en la obra a través de Episol S.A.S.
El Grupo Aval y Corficolombiana integran el conglomerado del industrial Luis Carlos Sarmiento Angulo, una de las personas más ricas de Colombia.