La Policía retoma el control de San Matías, activa operativos y suma 14 detenidos
El 18 de junio una enardecida turba quemó la comisaría de Umopar de esa región en medio de disturbios por el presunto asesinato de Frank Álvarez, un joven oriundo del lugar. Unos 200 policías llegaron al lugar para hacer operativos.
La Razón Digital / Rubén Ariñez / La Paz
Tras cuatro meses de ausencia y con el fin de anular la actividad delictiva, la Policía Boliviana ha retomado el control de San Matías, un poblado de Santa Cruz fronterizo con Brasil, para activar intensos operativos que han dado como resultado la detención de 14 personas.
El 18 de junio pasado una enardecida turba quemó la comisaría de la Unidad Móvil de Patrullaje Rural (Umopar) emplazada en esa región en medio de disturbios por el presunto asesinato de Frank Álvarez, un joven oriundo del lugar.
La presencia policial había cesado hasta el domingo, cuando unos dos centenares de efectivos, varios motorizados y la Policía área ingresaron al lugar con la advertencia a sus pobladores de que no pueden vivir al margen de la ley. Así lo hizo conocer el director nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn), Marco Antonio Ibáñez, quien comandó el operativo.
Ocho víctimas mortales, entre ellas el exalcalde Hubert Velarde Rivero, son parte del historial violento del poblado que es afectado por la acción de pistoleros, conocidos como sicarios, que disparan a mansalva para ajustar cuentas del narcotráfico, según datos de la fuerza del orden.
No por nada, el Gobierno denominó a San Matías como “zona roja” y ha buscado coordinación con las autoridades de Brasil para hacerle frente a los grupos criminales. Las Policías de ambos países coordinan para ese fin.
En los primeros días de incursión, las fuerzas de élite policiales allanaron más de una decena de casas y centros nocturnos, sobrevolaron la zona con helicópteros y lograron detener a unas 14 personas, entre ellas brasileños, informó el lunes el comandante departamental de la Policía cruceña, Alfonso Siles.
La Fiscalía también participa de la labor que tiene el fin de devolverle al conflictivo poblado un poco de paz.
La Razón Digital / Rubén Ariñez / La Paz
Tras cuatro meses de ausencia y con el fin de anular la actividad delictiva, la Policía Boliviana ha retomado el control de San Matías, un poblado de Santa Cruz fronterizo con Brasil, para activar intensos operativos que han dado como resultado la detención de 14 personas.
El 18 de junio pasado una enardecida turba quemó la comisaría de la Unidad Móvil de Patrullaje Rural (Umopar) emplazada en esa región en medio de disturbios por el presunto asesinato de Frank Álvarez, un joven oriundo del lugar.
La presencia policial había cesado hasta el domingo, cuando unos dos centenares de efectivos, varios motorizados y la Policía área ingresaron al lugar con la advertencia a sus pobladores de que no pueden vivir al margen de la ley. Así lo hizo conocer el director nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn), Marco Antonio Ibáñez, quien comandó el operativo.
Ocho víctimas mortales, entre ellas el exalcalde Hubert Velarde Rivero, son parte del historial violento del poblado que es afectado por la acción de pistoleros, conocidos como sicarios, que disparan a mansalva para ajustar cuentas del narcotráfico, según datos de la fuerza del orden.
No por nada, el Gobierno denominó a San Matías como “zona roja” y ha buscado coordinación con las autoridades de Brasil para hacerle frente a los grupos criminales. Las Policías de ambos países coordinan para ese fin.
En los primeros días de incursión, las fuerzas de élite policiales allanaron más de una decena de casas y centros nocturnos, sobrevolaron la zona con helicópteros y lograron detener a unas 14 personas, entre ellas brasileños, informó el lunes el comandante departamental de la Policía cruceña, Alfonso Siles.
La Fiscalía también participa de la labor que tiene el fin de devolverle al conflictivo poblado un poco de paz.