Francia desarticuló un centro terrorista con fachada religiosa
George Chaya
Infobae
El 2 de octubre pasado la policía francesa allanó el centro pro-Hezbollah Zahra. En apariencia religioso, era sostenido financieramente por Irán en el norte de Francia.
Ubicado en un barrio de los suburbios de la ciudad portuaria de Dunkerque, Zahra fue considerado por las agencias francesas de seguridad como un sitio de planificación y organización para ataques terroristas en suelo francés y en toda Europa.
Los activos y bienes del centro fueron congelados por el gobierno francés; también fueron congelados los activos de la Dirección de Seguridad Interna del Ministerio de Inteligencia iraní y del viceministro de Inteligencia de Irán a cargo de operaciones especiales, Hashemi Moghadam, y las de un diplomático iraní en Viena; Assadollah Asadi. El mismo día se realizaron búsquedas dentro de las viviendas de 12 miembros del centro y se encontraron armas, explosivos y documentación ideológica relacionada con la Revolución Iraní.
Los eventos fueron la culminación de un trabajo de investigación de las fuerzas de seguridad francesas luego que se produjera un ataque frustrado a una manifestación que se realizó bajo la consigna "Liberen a Irán", organizada y efectuada en las afueras de París por el Consejo Nacional de la Resistencia de Irán el pasado 30 de junio de este año.
El mismo 2 de octubre, el gobierno francés emitió un comunicado anunciando el congelamiento de los activos de funcionarios iraníes en suelo francés. El comunicado firmado por tres ministros franceses refirió a la necesidad de anular los canales de financiación del terrorismo en Francia y de prevenir todas las formas de terrorismo, independientemente de su fuente.
El comunicado del Ministerio del Interior indicó que "un intento de ataque fue frustrado en Villepinte (cercano a París) el 30 de junio". Fue un acto de extrema gravedad planeado en suelo francés y no podía quedar sin respuesta. En consecuencia, por una orden del Ministerio del Estado, del Ministro del Interior y del Ministro de Economía y Finanzas, Francia tomó medidas preventivas congelando los activos de los ciudadanos iraníes Assadollah Asadi y el viceministro iraní de inteligencia a cargo de operaciones especiales, Saeid Hashemi Moghadam, así como también de la Dirección de Seguridad Interna del Ministerio de Inteligencia iraní. Al tomar esta decisión, Francia reitera su determinación de combatir el terrorismo islamista, especialmente como los que ha sufrido en su propio territorio, indico el Ministerio del Estado.
Para el canciller francés, Jean-Yves Le Drian, el frustrado ataque en Villepinte confirma la necesidad de exigir un nuevo enfoque en las relaciones de Francia con Irán. El Ministro del Interior Gerard Collomb, reafirmó su "determinación de hacer todo lo posible para prevenir cualquier forma de terrorismo". El Ministro de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire, enfatizó que "debemos anular los canales de financiamiento de los terroristas islamistas para poner fin a sus intolerables actos. Estamos actuando firmemente a nivel nacional y continuaremos fortaleciendo acuerdos en las plataformas internacionales".
Según informes de agencias de seguridad francesas, el viceministro de Inteligencia iraní, Saeid Hashemi Moghadam, fue quien organizó el ataque frustrado del 30 de junio en la movilización del Consejo Nacional de la Resistencia de Irán (NCRI por sus siglas en ingles) en el norte de París. El ex-alcalde de Nueva York, Rudy Giuliani, habló en esa movilización y se sospecha que era uno de los blancos principales del planificado ataque. El día antes de la movilización, un iraní y su esposa fueron arrestados en la estación de trenes de Woluwé en Bruselas con boletos de viaje a Paris y se les halló en posesión de un dispositivo de medio kilogramo de Trotil. Los oficiales franceses continúan trabajando en conjunto con agentes de seguridad austriacos y belgas, la investigación revelo que un diplomático iraní en Viena, Assadolah Assadi, les había proporcionado los explosivos en Luxemburgo unos días antes.
El 2 de octubre, el día en que fueron congelados los activos, se llevó a cabo otra extensa redada en Grande-Synthe, un suburbio de la ciudad de Dunkerque, al norte de Francia, en casas de 11 ciudadanos franceses y un ciudadano sirio vinculados al Centro Zahra, una asociación de caridad musulmana chiíta pro-iraní cercana a Hezbollah y establecida en Francia en 2005. La búsqueda reveló también la captura de explosivos y armas.
Según el diario francés Le Monde, "el Centro Zahra fue fundado por Yahia Gouasmi. La operación de búsqueda del martes 2 de octubre desbarató una rama de una organización clandestina importante de la República Islámica de Irán en Francia". Le Monde publicó también que #la organización tiene como fachada una agenda religiosa amplia, pero con importante actividad política".
El Centro Zahra ha estado durante más de 10 años ligado a la defensa de los intereses chiítas de Hezbollah e Irán en Francia. Al mismo tiempo, al decir de líderes de la comunidad judía francesa en los medios de prensa, cuenta con estrechas relaciones con varias redes de la extrema derecha local reunidas bajo el estandarte de un virulento anti-sionismo que, en realidad, encubre un profundo sentimiento judeofobo.
Un referente de la alianza entre el Centro Zahra y la extrema derecha local, el comediante y antisemita francés Dieudonné, condenado en 2010, alabó abiertamente al Centro Zahra declarando ante un tribunal en Paris que los movimientos políticos como el partido anti-sionista se están desarrollando a través de toda Europa, y el impulso al partido fue establecido en Francia por Yahia Gouasmi y el mismo a través del Centro pro-iraní. Ese espacio político racista también se asentó y actualmente desarrolla actividades en Bélgica y Suiza, y sus persecuciones y acciones violentas han sido determinantes en la migración de cientos de judíos franceses que, por seguridad, optaron por radicarse en Israel.
"Nuestros combatientes han despertado", declaró en ese momento Dieudonné. "Nos hemos convertido en leones y estamos enfocados en expulsar a los judíos sionistas de nuestra patria francesa".
Irán no ha efectuado declaraciones respecto del incidente y la desarticulación del Centro Zahra ni de las investigaciones que continúan por estas horas en la Fiscalía General de Paris.
Infobae
El 2 de octubre pasado la policía francesa allanó el centro pro-Hezbollah Zahra. En apariencia religioso, era sostenido financieramente por Irán en el norte de Francia.
Ubicado en un barrio de los suburbios de la ciudad portuaria de Dunkerque, Zahra fue considerado por las agencias francesas de seguridad como un sitio de planificación y organización para ataques terroristas en suelo francés y en toda Europa.
Los activos y bienes del centro fueron congelados por el gobierno francés; también fueron congelados los activos de la Dirección de Seguridad Interna del Ministerio de Inteligencia iraní y del viceministro de Inteligencia de Irán a cargo de operaciones especiales, Hashemi Moghadam, y las de un diplomático iraní en Viena; Assadollah Asadi. El mismo día se realizaron búsquedas dentro de las viviendas de 12 miembros del centro y se encontraron armas, explosivos y documentación ideológica relacionada con la Revolución Iraní.
Los eventos fueron la culminación de un trabajo de investigación de las fuerzas de seguridad francesas luego que se produjera un ataque frustrado a una manifestación que se realizó bajo la consigna "Liberen a Irán", organizada y efectuada en las afueras de París por el Consejo Nacional de la Resistencia de Irán el pasado 30 de junio de este año.
El mismo 2 de octubre, el gobierno francés emitió un comunicado anunciando el congelamiento de los activos de funcionarios iraníes en suelo francés. El comunicado firmado por tres ministros franceses refirió a la necesidad de anular los canales de financiación del terrorismo en Francia y de prevenir todas las formas de terrorismo, independientemente de su fuente.
El comunicado del Ministerio del Interior indicó que "un intento de ataque fue frustrado en Villepinte (cercano a París) el 30 de junio". Fue un acto de extrema gravedad planeado en suelo francés y no podía quedar sin respuesta. En consecuencia, por una orden del Ministerio del Estado, del Ministro del Interior y del Ministro de Economía y Finanzas, Francia tomó medidas preventivas congelando los activos de los ciudadanos iraníes Assadollah Asadi y el viceministro iraní de inteligencia a cargo de operaciones especiales, Saeid Hashemi Moghadam, así como también de la Dirección de Seguridad Interna del Ministerio de Inteligencia iraní. Al tomar esta decisión, Francia reitera su determinación de combatir el terrorismo islamista, especialmente como los que ha sufrido en su propio territorio, indico el Ministerio del Estado.
Para el canciller francés, Jean-Yves Le Drian, el frustrado ataque en Villepinte confirma la necesidad de exigir un nuevo enfoque en las relaciones de Francia con Irán. El Ministro del Interior Gerard Collomb, reafirmó su "determinación de hacer todo lo posible para prevenir cualquier forma de terrorismo". El Ministro de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire, enfatizó que "debemos anular los canales de financiamiento de los terroristas islamistas para poner fin a sus intolerables actos. Estamos actuando firmemente a nivel nacional y continuaremos fortaleciendo acuerdos en las plataformas internacionales".
Según informes de agencias de seguridad francesas, el viceministro de Inteligencia iraní, Saeid Hashemi Moghadam, fue quien organizó el ataque frustrado del 30 de junio en la movilización del Consejo Nacional de la Resistencia de Irán (NCRI por sus siglas en ingles) en el norte de París. El ex-alcalde de Nueva York, Rudy Giuliani, habló en esa movilización y se sospecha que era uno de los blancos principales del planificado ataque. El día antes de la movilización, un iraní y su esposa fueron arrestados en la estación de trenes de Woluwé en Bruselas con boletos de viaje a Paris y se les halló en posesión de un dispositivo de medio kilogramo de Trotil. Los oficiales franceses continúan trabajando en conjunto con agentes de seguridad austriacos y belgas, la investigación revelo que un diplomático iraní en Viena, Assadolah Assadi, les había proporcionado los explosivos en Luxemburgo unos días antes.
El 2 de octubre, el día en que fueron congelados los activos, se llevó a cabo otra extensa redada en Grande-Synthe, un suburbio de la ciudad de Dunkerque, al norte de Francia, en casas de 11 ciudadanos franceses y un ciudadano sirio vinculados al Centro Zahra, una asociación de caridad musulmana chiíta pro-iraní cercana a Hezbollah y establecida en Francia en 2005. La búsqueda reveló también la captura de explosivos y armas.
Según el diario francés Le Monde, "el Centro Zahra fue fundado por Yahia Gouasmi. La operación de búsqueda del martes 2 de octubre desbarató una rama de una organización clandestina importante de la República Islámica de Irán en Francia". Le Monde publicó también que #la organización tiene como fachada una agenda religiosa amplia, pero con importante actividad política".
El Centro Zahra ha estado durante más de 10 años ligado a la defensa de los intereses chiítas de Hezbollah e Irán en Francia. Al mismo tiempo, al decir de líderes de la comunidad judía francesa en los medios de prensa, cuenta con estrechas relaciones con varias redes de la extrema derecha local reunidas bajo el estandarte de un virulento anti-sionismo que, en realidad, encubre un profundo sentimiento judeofobo.
Un referente de la alianza entre el Centro Zahra y la extrema derecha local, el comediante y antisemita francés Dieudonné, condenado en 2010, alabó abiertamente al Centro Zahra declarando ante un tribunal en Paris que los movimientos políticos como el partido anti-sionista se están desarrollando a través de toda Europa, y el impulso al partido fue establecido en Francia por Yahia Gouasmi y el mismo a través del Centro pro-iraní. Ese espacio político racista también se asentó y actualmente desarrolla actividades en Bélgica y Suiza, y sus persecuciones y acciones violentas han sido determinantes en la migración de cientos de judíos franceses que, por seguridad, optaron por radicarse en Israel.
"Nuestros combatientes han despertado", declaró en ese momento Dieudonné. "Nos hemos convertido en leones y estamos enfocados en expulsar a los judíos sionistas de nuestra patria francesa".
Irán no ha efectuado declaraciones respecto del incidente y la desarticulación del Centro Zahra ni de las investigaciones que continúan por estas horas en la Fiscalía General de Paris.