US OPEN / La rodilla deja a Nadal KO en semifinales ante Del Potro
El balear tuvo que abandonar cuando perdía 2-0 contra el argentino. La lesión proviene de una tendinitis crónica en la rótula derecha que padece desde hace años. Peligra la Davis.
Nacho Albarrán
As
La rodilla derecha frenó definitivamente la trayectoria en el US Open de Rafa Nadal, que se marcha sin poder defender el título que conquistó en 2017. El balear, con unas molestias que probablemente tuvo desde el principio del torneo y que se acentuaron en su duelo de tercera ronda contra Karen Khachanov cuando pidió que le pusieran un vendaje estabilizador por debajo de la rótula, hizo todo lo que pudo para competir contra Juan Martín del Potro en semifinales, pero tuvo que abandonar cuando el argentino ganaba por 7-6 (3) y 6-2.
Los primeros problemas de Nadal se hicieron visibles cuando en el descanso entre el séptimo y el octavo juego pidió asistencia médica y le colocaron un vendaje que en la siguiente parada se quitó. El español, que después explicó que había notado ya un pinchazo en el 2-2, continúo jugando y salvó dos bolas de set con 5-4 y saque para Delpo, aunque después perdió el primer set en el desempate. Comenzado el segundo, Rafa volvió a pedir tiempo muerto médico y volvieron a vendarle y a masajearle la zona. Saltó a la pista, pero ya se notó que no podía correr para devolver los golpes cruzados de su rival, que le rompió el servicio de inmediato. Con 4-2 para este, saque de Nadal y 30-40, el balear se acercó al juez de silla y le dijo: “Me voy a retirar, pero no has estado bien en esta (bola)”. Todas las alarmas, que ya estaban encendidas, saltaron al escuchar las palabras del campeón, que dijo basta tras encajar un segundo break y perder después el parcial.
Es la segunda vez este año que se retira, después de haberlo hecho en cuartos de Australia ante Cilic. Entonces fue en el psoas iliaco donde tuvo problemas que arrastraba desde el final de la temporada pasada cuando renunció a jugar en Basilea y París.
Su tendinitis crónica le hace ser duda para la Davis
Nadal no quiso hablar de sus problemas en la rodilla derecha después del partido contra Khachanov, pero sabía que algo no iba a bien, y aunque se le vio entrenarse sin dificultades e hizo un partidazo para remontar un 0-6 contra Dominic Thiem, la dolencia crónica que padece en el tendón rotuliano y la carga de horas de juego y de kilómetros recorridos han acabado pasándole factura. No había vuelto a ponerse protección en los partidos después del que jugó contra el ruso, y esas molestias parecían ya olvidadas ante la evidencia de que estaba en condiciones de competir al máximo nivel como demostró contra el austriaco, pero evidentemente no estaba bien. Y llevaba un maratón.
Ahora tendrá que decidir si acude a la eliminatoria de semifinales de la Davis contra Francia, en Lille, la próxima semana, pero parece difícil que pueda estar en condiciones de jugar con una lesión que podría tenerle al menos tres semanas en el dique seco para recuperarse bien. Además, el Masters de Londres, uno de los principales objetivos de su carrera porque todavía no lo ha ganado, asoma a final de año y al de Manacor, que podría llegar como número uno pese a este contratiempo, no le gustaría perdérselo.
Nacho Albarrán
As
La rodilla derecha frenó definitivamente la trayectoria en el US Open de Rafa Nadal, que se marcha sin poder defender el título que conquistó en 2017. El balear, con unas molestias que probablemente tuvo desde el principio del torneo y que se acentuaron en su duelo de tercera ronda contra Karen Khachanov cuando pidió que le pusieran un vendaje estabilizador por debajo de la rótula, hizo todo lo que pudo para competir contra Juan Martín del Potro en semifinales, pero tuvo que abandonar cuando el argentino ganaba por 7-6 (3) y 6-2.
Los primeros problemas de Nadal se hicieron visibles cuando en el descanso entre el séptimo y el octavo juego pidió asistencia médica y le colocaron un vendaje que en la siguiente parada se quitó. El español, que después explicó que había notado ya un pinchazo en el 2-2, continúo jugando y salvó dos bolas de set con 5-4 y saque para Delpo, aunque después perdió el primer set en el desempate. Comenzado el segundo, Rafa volvió a pedir tiempo muerto médico y volvieron a vendarle y a masajearle la zona. Saltó a la pista, pero ya se notó que no podía correr para devolver los golpes cruzados de su rival, que le rompió el servicio de inmediato. Con 4-2 para este, saque de Nadal y 30-40, el balear se acercó al juez de silla y le dijo: “Me voy a retirar, pero no has estado bien en esta (bola)”. Todas las alarmas, que ya estaban encendidas, saltaron al escuchar las palabras del campeón, que dijo basta tras encajar un segundo break y perder después el parcial.
Es la segunda vez este año que se retira, después de haberlo hecho en cuartos de Australia ante Cilic. Entonces fue en el psoas iliaco donde tuvo problemas que arrastraba desde el final de la temporada pasada cuando renunció a jugar en Basilea y París.
Su tendinitis crónica le hace ser duda para la Davis
Nadal no quiso hablar de sus problemas en la rodilla derecha después del partido contra Khachanov, pero sabía que algo no iba a bien, y aunque se le vio entrenarse sin dificultades e hizo un partidazo para remontar un 0-6 contra Dominic Thiem, la dolencia crónica que padece en el tendón rotuliano y la carga de horas de juego y de kilómetros recorridos han acabado pasándole factura. No había vuelto a ponerse protección en los partidos después del que jugó contra el ruso, y esas molestias parecían ya olvidadas ante la evidencia de que estaba en condiciones de competir al máximo nivel como demostró contra el austriaco, pero evidentemente no estaba bien. Y llevaba un maratón.
Ahora tendrá que decidir si acude a la eliminatoria de semifinales de la Davis contra Francia, en Lille, la próxima semana, pero parece difícil que pueda estar en condiciones de jugar con una lesión que podría tenerle al menos tres semanas en el dique seco para recuperarse bien. Además, el Masters de Londres, uno de los principales objetivos de su carrera porque todavía no lo ha ganado, asoma a final de año y al de Manacor, que podría llegar como número uno pese a este contratiempo, no le gustaría perdérselo.