Samuel Umtiti, ¿condenado a pasar por el quirófano?
Sólo un milagro evitará que el central francés pase por la sala de operaciones. En el club le han preparado un tratamiento de choque con plasma.
Javier Miguel
As
Samuel Umtiti tiene una lesión en el cartílago de su rodilla izquierda que en el propio club se considera “grave”. Como todas las lesiones articulares se trata de una lesión degenerativa, es decir, que poco a poco se va deteriorando hasta llegar un momento que el dolor te impide jugar y has de parar en seco. El central francés acabó la temporada en el Barcelona quejándose de molestias en su rodilla y jugó el Mundial con Francia arrastrando estos dolores, que fueron a más.
En el club se esperaba que durante el mes de vacaciones y con un tratamiento especial, se pudiera mitigar esta situación. Pero no ha sido así, seis semanas después de haber empezado la competición, los servicios médicos han decidido poner freno y buscar una solución ‘in extremis’, aprovechando el parón de selecciones.
Como el jugador ha sido reacio desde el primer día a pasar ya por el quirófano -es el único método que garantiza la solución del deterioro del cartílago-, la solución que se ha buscado es la terapia del factor de crecimiento a través de plaquetas de la misma sangre del jugador. Es decir, se intenta que el propio cartílago se regenere a través de infiltraciones de plasma en la zona afectada. Un método contrastado y que da muy buenos resultados, pero que no garantiza la regeneración en el cien por cien de los casos.
En el caso de Umtiti, el estado del cartílago es muy deficiente. La membrana que recubre las articulaciones está casi al límite, por lo que se tendrá que hacer un tratamiento de choque durante las próximas semanas para intentar que la regeneración sea exitosa.
Sin embargo, en el club no las tienen todas consigo. De ahí que la solución final se contempla a medio plazo. Ahora mismo el reto prioritario es que el jugador pueda de regresar a los terrenos de juego para el partido del Sevilla del próximo 20 de octubre o ante el Inter de Milan unos días más tarde. Se confía que la terapia de plasma con factor de crecimiento y ayudado por células madre consiga regenerar en buena parte el cartílago dañado. A partir de aquí, el objetivo es que a través de una adecuada dosificación en el juego y una terapia de infiltraciones se consiga llegar al final de temporada. Y entonces será cuando le plantearán seriamente al jugador la opción de pasar por el quirófano aprovechando las vacaciones con la garantía de que en un plazo de dos meses como máximo ya estará totalmente recuperado.
En el peor de los casos, si la terapia de choque a base de factores de crecimiento no consigue regenerar mínimamente el cartílago en las próximas tres semanas, el jugador tendría que ser intervenido de manera urgente y entonces su regreso se alargaría hasta enero del 2019.
Javier Miguel
As
Samuel Umtiti tiene una lesión en el cartílago de su rodilla izquierda que en el propio club se considera “grave”. Como todas las lesiones articulares se trata de una lesión degenerativa, es decir, que poco a poco se va deteriorando hasta llegar un momento que el dolor te impide jugar y has de parar en seco. El central francés acabó la temporada en el Barcelona quejándose de molestias en su rodilla y jugó el Mundial con Francia arrastrando estos dolores, que fueron a más.
En el club se esperaba que durante el mes de vacaciones y con un tratamiento especial, se pudiera mitigar esta situación. Pero no ha sido así, seis semanas después de haber empezado la competición, los servicios médicos han decidido poner freno y buscar una solución ‘in extremis’, aprovechando el parón de selecciones.
Como el jugador ha sido reacio desde el primer día a pasar ya por el quirófano -es el único método que garantiza la solución del deterioro del cartílago-, la solución que se ha buscado es la terapia del factor de crecimiento a través de plaquetas de la misma sangre del jugador. Es decir, se intenta que el propio cartílago se regenere a través de infiltraciones de plasma en la zona afectada. Un método contrastado y que da muy buenos resultados, pero que no garantiza la regeneración en el cien por cien de los casos.
En el caso de Umtiti, el estado del cartílago es muy deficiente. La membrana que recubre las articulaciones está casi al límite, por lo que se tendrá que hacer un tratamiento de choque durante las próximas semanas para intentar que la regeneración sea exitosa.
Sin embargo, en el club no las tienen todas consigo. De ahí que la solución final se contempla a medio plazo. Ahora mismo el reto prioritario es que el jugador pueda de regresar a los terrenos de juego para el partido del Sevilla del próximo 20 de octubre o ante el Inter de Milan unos días más tarde. Se confía que la terapia de plasma con factor de crecimiento y ayudado por células madre consiga regenerar en buena parte el cartílago dañado. A partir de aquí, el objetivo es que a través de una adecuada dosificación en el juego y una terapia de infiltraciones se consiga llegar al final de temporada. Y entonces será cuando le plantearán seriamente al jugador la opción de pasar por el quirófano aprovechando las vacaciones con la garantía de que en un plazo de dos meses como máximo ya estará totalmente recuperado.
En el peor de los casos, si la terapia de choque a base de factores de crecimiento no consigue regenerar mínimamente el cartílago en las próximas tres semanas, el jugador tendría que ser intervenido de manera urgente y entonces su regreso se alargaría hasta enero del 2019.