Caos en las obras del estadio del Tottenham: "Alcohol, peleas..."
Un informe publicado en el Reino Unido, sobre los retrasos y el sobrecoste de la construcción de la nueva casa de los 'hotspurs', revela el clima desastroso que hay detrás.
As.com
Un estudio del portal especializado Construction News y del que se hace eco, entre otros medios ingleses, el Daily Mail revela que las obras del nuevo estadio del Tottenham se convirtieron en "un caos". El club londinense no se ha podido aún mudar a su nueva casa 'Tottenham Hotspur Stadium', debido a los continuos retrasos, y la nueva fecha de inauguración se ha fijado en 2019. El club que dirige Pochettino sigue jugando en Wembley en sus partidos.
"En las obras había una atmósfera de mala comunicación e incluso de peleas entre los más de 4.000 trabajadores que aglutinó el proyecto", relata el informe. No salen muy bien parados los obreros a los que se le acusa de "beber alcohol y consumir drogas" durante las horas de trabajo, según ha relatado, en exclusiva, Construction News.
"Lo que normalmente podía tardar una semana, se alargaba un mes. Hubo problemas con el aire acondicionado y con la instalación eléctrica. Faltaba el material adecuado y se daba continuamente fallos cómicos...", son algunos de los galimatías que recoge el informe de fuentes cercanas a la construcción, que coinciden en que nunca habían trabajado en un sitio así.
El nuevo estadio del Tottenham tendrá capacidad para 62.000 personas y ha visto disparado su coste hasta los 850 millones de libras.
Un estudio del portal especializado Construction News y del que se hace eco, entre otros medios ingleses, el Daily Mail revela que las obras del nuevo estadio del Tottenham se convirtieron en "un caos". El club londinense no se ha podido aún mudar a su nueva casa 'Tottenham Hotspur Stadium', debido a los continuos retrasos, y la nueva fecha de inauguración se ha fijado en 2019. El club que dirige Pochettino sigue jugando en Wembley en sus partidos.
"En las obras había una atmósfera de mala comunicación e incluso de peleas entre los más de 4.000 trabajadores que aglutinó el proyecto", relata el informe. No salen muy bien parados los obreros a los que se le acusa de "beber alcohol y consumir drogas" durante las horas de trabajo, según ha relatado, en exclusiva, Construction News.
"Lo que normalmente podía tardar una semana, se alargaba un mes. Hubo problemas con el aire acondicionado y con la instalación eléctrica. Faltaba el material adecuado y se daba continuamente fallos cómicos...", son algunos de los galimatías que recoge el informe de fuentes cercanas a la construcción, que coinciden en que nunca habían trabajado en un sitio así.
El nuevo estadio del Tottenham tendrá capacidad para 62.000 personas y ha visto disparado su coste hasta los 850 millones de libras.
