Sarabia saca el ticket europeo

Su gol, brillante definición después de un buen pase de André Silva, resuelve un partido incómodo para los de Machín, que sufrieron de lo lindo en Olomouc.

Juan Jiménez
As
El Sevilla hizo valer su rango y palmarés en las profundidades de la Europa Central y resolvió su visita a Olomouc como hacen los históricos. Supo sufrir, abrazarse a su nuevo portero, Vaclik, y aprovechar una transición de manual: brillante asistencia de André Silva y dulce definición de Sarabia. La fulgurante aparición del portugués y la ayuda de Navas cambiaron al Sevilla en los últimos 20 minutos y sí expresaron la diferencia real entre el equipo número nueve de Europa y uno que ni tiene ranking pero que tuvo preocupadísimo a Machín dos tercios de partido. Al entrenador de Soria, que expuso con una alineación de reservas, le faltaron hojas de su cuaderno para apuntar los desajustes de su equipo. Descoordinado, irregular y frágil, pero que sobrevivió y supo darle un mordisco a la eliminatoria. Salvo hecatombe, el Sevilla estará como cabeza de serie en la fase de grupos de la Europa League.


El Sigma hizo bueno el informe que le anunciaba como local duro. Marcó su territorio, metió intensidad y no fue sólo un equipo animado. Había estudiado al Sevilla y tenía un plan. Una línea de tres en defensa es un riesgo si no hay coordinación, cualidades y tablas y Machín, pensando en el Villarreal, había alineado un cocktail mareante. Un central que no es central, Amadou; otro que es del filial, Berrocal; y Gnagnon, que quedó expuesto y evitó males mayores en la primera parte con buenas ayudas. Sólo la atención de Vaclik (buenos primeros partidos del portero) y la falta de talento del Sigma evitó que el Sevilla se fuese al descanso con malas noticias. El Sigma fue mejor también en la pizarra. Jílek, que no sólo había estudiado la manera de jugar del Sevilla sino también su forma defender el balón parado, inventó en la pizarra un córner que sólo no fue gol por el mal golpeo de Plsek.

La primera parte fue suficiente advertencia como para que el Sevilla cambiase en la segunda pero el partido ya había cogido una dinámica peligrosa. Tanto que al Sevilla sólo le salvó el excelente grado de concentración de Vaclik y otro error inesperado de Plsek. El interior checo intuyó dónde iría un remate cruzado con veneno pero se quedó a medio palmo del premio.

Machín vio que le entraba agua por toda la casa y tomó medidas: Navas y André Silva. Del primero ya se conoce que es una garantía. Donde Aleix sólo aportó rutina, Navas puso experiencia, filo, lectura del juego y llegada. Del portugués, sobre quien en Vallecas ya se supo sobre su olfato de gol, ahora se sabe también de su visión de juego. Su asistencia a Sarabia, que añadirá unos euros más (tal vez más de los debidos) a su ya cara renovación, le sacó al Sevilla el billete europeo. No puede faltar el Sevilla a la competición que le ha dado (casi) todo.

Entradas populares