Gobierno: Bolivia tiene gas por valor de $us 90.000 MM y condiciones para negociar más exportación
El ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez, aseguró que las reservas de gas no solo garantizan el mercado interno y el cumplimento de los actuales contratos con Brasil y Argentina, sino la negociación de nuevos acuerdos.
La Razón Digital / Carlos Corz / La Paz
Bolivia tiene 12,5 trillones de pies cúbicos (TCF) de gas probadas y probables, lo que implica un ingreso proyectado de $us 90 mil millones en los precios actuales y condiciones no solo para cumplir los actuales contratos de exportación con Argentina y Brasil sino para ampliarlos y firmar otros nuevos, aseguró este jueves el ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez.
Para el cálculo solo se toma en cuenta las reservas probadas y probables, dejando de lado las posibles con las que se llega a 14,7 TCF, porque son las que “sirven para la firma de nuevos contratos, inversiones y negocios”, explicó y calculó sobre esa base que con un poco más de 6 TCF se terminará de concluir los actuales contratos con Argentina y Brasil.
“A la Argentina, en los próximos años y hasta terminar el contrato, le debemos 3,3 TCF, a Brasil le debemos 1,7 TCF. El mercado interno, hasta el 2035 y sabiendo que tenemos que entregar gas a cementeras, litio, mutún y otras industrias, es de 3,89 TCF. Me sobran 3,21 TCF, es la garantía para ampliar los contratos y tener nuevos contratos”, insistió.
No obstante, dijo que las reservas se irán incrementado tomando en cuenta la fuerte apuesta a la exploración y explotación de recursos hidrocarburíferos. Calculó que hasta el 2025 estarán por los 12 TCF y más, por lo que cuestionó las dudas que puso la oposición al cumplimento de los contratos y ahora a los datos de la certificación.
De hecho, el senador de la opositora Unidad Demócrata Óscar Ortiz informó ayer que pedirá un informe detallado al ministro Sánchez respecto al aspecto técnico que sustenta el informe presentado ayer por la canadiense Sproule International Limited, firma que se adjudicó en febrero este trabajo.
En 2009 la empresa Ryder Scott certificó 9,94 trillones de pies cúbicos (TCF), mientras que en 2013 se hizo la certificación con la empresa GLJ, que cuantificó en 10,45 TCF las reservas probadas.
“No ha habido reservas más importantes que ahora, pero además siempre hemos ido creciendo, de 9,94 a 12,5, lo que indica que el factor de reposición es mayor a uno y eso significa gran gestión y gran trabajo en exploración y explotación”, destacó en una entrevista con la estatal Patria Nueva, donde dijo que la certificación muestra reposición e incremento de gas.
Bolivia actualmente negocia la posibilidad de vender gas a Paraguay y ampliar contratos de provisión en Argentina y Brasil.
Sánchez explicó que las actuales reservas representan una proyección de ingreso de $us 90 mil millones.
“Certificamos las reservas y si las monetizamos esos 12,5 TCF, al precio actual que está el millón de BTU, son cerca de 90 mil millones de dólares que ha generado YPFB y que tiene en el subsuelo. Esos 90 mil millones vamos a poderlos monetizar en los próximos meses y años, y, seguramente el 50% irán de redistribución a las regiones”, destacó.
Pero además perfila que ahora viene un período de “cosecha de reservas”, justamente por las inversiones hechas.
La Razón Digital / Carlos Corz / La Paz
Bolivia tiene 12,5 trillones de pies cúbicos (TCF) de gas probadas y probables, lo que implica un ingreso proyectado de $us 90 mil millones en los precios actuales y condiciones no solo para cumplir los actuales contratos de exportación con Argentina y Brasil sino para ampliarlos y firmar otros nuevos, aseguró este jueves el ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez.
Para el cálculo solo se toma en cuenta las reservas probadas y probables, dejando de lado las posibles con las que se llega a 14,7 TCF, porque son las que “sirven para la firma de nuevos contratos, inversiones y negocios”, explicó y calculó sobre esa base que con un poco más de 6 TCF se terminará de concluir los actuales contratos con Argentina y Brasil.
“A la Argentina, en los próximos años y hasta terminar el contrato, le debemos 3,3 TCF, a Brasil le debemos 1,7 TCF. El mercado interno, hasta el 2035 y sabiendo que tenemos que entregar gas a cementeras, litio, mutún y otras industrias, es de 3,89 TCF. Me sobran 3,21 TCF, es la garantía para ampliar los contratos y tener nuevos contratos”, insistió.
No obstante, dijo que las reservas se irán incrementado tomando en cuenta la fuerte apuesta a la exploración y explotación de recursos hidrocarburíferos. Calculó que hasta el 2025 estarán por los 12 TCF y más, por lo que cuestionó las dudas que puso la oposición al cumplimento de los contratos y ahora a los datos de la certificación.
De hecho, el senador de la opositora Unidad Demócrata Óscar Ortiz informó ayer que pedirá un informe detallado al ministro Sánchez respecto al aspecto técnico que sustenta el informe presentado ayer por la canadiense Sproule International Limited, firma que se adjudicó en febrero este trabajo.
En 2009 la empresa Ryder Scott certificó 9,94 trillones de pies cúbicos (TCF), mientras que en 2013 se hizo la certificación con la empresa GLJ, que cuantificó en 10,45 TCF las reservas probadas.
“No ha habido reservas más importantes que ahora, pero además siempre hemos ido creciendo, de 9,94 a 12,5, lo que indica que el factor de reposición es mayor a uno y eso significa gran gestión y gran trabajo en exploración y explotación”, destacó en una entrevista con la estatal Patria Nueva, donde dijo que la certificación muestra reposición e incremento de gas.
Bolivia actualmente negocia la posibilidad de vender gas a Paraguay y ampliar contratos de provisión en Argentina y Brasil.
Sánchez explicó que las actuales reservas representan una proyección de ingreso de $us 90 mil millones.
“Certificamos las reservas y si las monetizamos esos 12,5 TCF, al precio actual que está el millón de BTU, son cerca de 90 mil millones de dólares que ha generado YPFB y que tiene en el subsuelo. Esos 90 mil millones vamos a poderlos monetizar en los próximos meses y años, y, seguramente el 50% irán de redistribución a las regiones”, destacó.
Pero además perfila que ahora viene un período de “cosecha de reservas”, justamente por las inversiones hechas.