El PJ busca despegarse de la corrupción K y marginar a Cristina del armado 2019
Sergio Massa y Juan Manuel Urtubey creen que es clave recrear un frente que incluya al progresismo. Dicen que la alianza Hugo Moyano-CFK los aleja de cualquier intento de unidad.
Clarín
El escándalo por los cuadernos de la corrupción K y la foto de Cristina Kirchner con Hugo Moyano dispararon la estrategia del Peronismo Federal que, junto al massismo, pretenden construir una alternativa de gobierno a Cambiemos y Unidad Ciudadana.
Desde el oficialismo leyeron de inmediato el nuevo escenario. Por eso, una de sus espadas en la pelea retórica, el diputado Fernando Iglesias, metió en la misma bolsa a todo el peronismo: “Un chofer tenía toda esta información. ¿Se imaginan a los jefes de Gabinete (de Cristina) como Sergio Massa, Alberto Fernández, Jorge Capitanich o (Juan Manuel) Abal Medina contando todo lo que saben? Yo empecé una campaña para que cada uno muestre su cuaderno y todo lo que vieron”, desafió. Nadie sabe si algún dirigente del PJ saldrá herido.
En efecto, cuando parecía que la caída en la imagen del presidente Macri beneficiaba a Cristina, las renovadas denuncias por corrupción contra la ex mandataria y sus funcionarios cercenaron, por ahora, la intención de los K de unir al peronismo.
En el PJ no K preparan para fin de agosto la instalación del espacio. Este jueves, por lo pronto, el “coordinador del Peronismo Federal” -así se presenta- el senador Miguel Angel Pichetto, se presentará en La Plata en un acto en el teatro Metro con la idea de instalar que hay algo alternativo a Macri y a Cristina. Lo apoyan todos los dirigentes del PJ, en particular el cordobés Carlos Caserio, hombre del gobernador Juan Schiaretti.
“El objetivo es crear expectativas con Urtubey, Schiaretti, Uñac, Massa y Pichetto, en todo el país. Después vemos cómo se resuelven las candidaturas”, explican.
Bajo ese esquema no es casual que Sergio Uñac, quien hasta hace poco sólo tenía ojos para la reelección como gobernador de San Juan, diera señales en el sentido de una eventual candidatura presidencial: “En lo inmediato lo mío está en la provincia de San Juan, pero obviamente que no cierro las puertas de nada, menos en un país tan dinámico como en la Argentina”, dijo este fin de semana.
Desde el Peronismo Federal dejaron en claro que un posible frente electoral entre Cristina Kirchner y Moyano los aleja aún más. “Moyano jugó para Macri en el 2015. Ni él ni Cristina trabajaron para que ganara Daniel Scioli. Y eso es difícil de digerir. Se juntaron para no ir presos”, lanzó.
Mas aún, no ven factible un escenario de unidad como el que venían pregonando los K. Esgrimen que si hubiera una alianza con los kirchneristas, sería difícil explicarle a la sociedad que son algo nuevo, si en una hipotética lista encabezada por Urtubey o Massa como candidato presidencial, figuraran postulantes a diputados como, por ejemplo, Máximo Kirchner o Luis D’Elía.
Dos de los candidateables a presidente, Urtubey y Massa, coinciden en la estrategia. Los dos están convencidos que sólo conformando un frente con otras fuerzas como el socialismo santafesino, los sectores radicales críticos, Libres del Sur, el GEN y otras fuerzas provinciales, pueden prescindir de la candidatura de Cristina Kirchner para enfrentar al Gobierno. Pero no todos piensan igual.
En los números que manejaba el PJ antes de la explosión de lo que denominan, el “chofergate”, el núcleo duro de la ex presidenta que le manifiesta una fidelidad del cien por ciento, era de 21%; con Macri con un 19% y Massa con 11%.
El escándalo por los cuadernos de la corrupción K y la foto de Cristina Kirchner con Hugo Moyano dispararon la estrategia del Peronismo Federal que, junto al massismo, pretenden construir una alternativa de gobierno a Cambiemos y Unidad Ciudadana.
Desde el oficialismo leyeron de inmediato el nuevo escenario. Por eso, una de sus espadas en la pelea retórica, el diputado Fernando Iglesias, metió en la misma bolsa a todo el peronismo: “Un chofer tenía toda esta información. ¿Se imaginan a los jefes de Gabinete (de Cristina) como Sergio Massa, Alberto Fernández, Jorge Capitanich o (Juan Manuel) Abal Medina contando todo lo que saben? Yo empecé una campaña para que cada uno muestre su cuaderno y todo lo que vieron”, desafió. Nadie sabe si algún dirigente del PJ saldrá herido.
En efecto, cuando parecía que la caída en la imagen del presidente Macri beneficiaba a Cristina, las renovadas denuncias por corrupción contra la ex mandataria y sus funcionarios cercenaron, por ahora, la intención de los K de unir al peronismo.
En el PJ no K preparan para fin de agosto la instalación del espacio. Este jueves, por lo pronto, el “coordinador del Peronismo Federal” -así se presenta- el senador Miguel Angel Pichetto, se presentará en La Plata en un acto en el teatro Metro con la idea de instalar que hay algo alternativo a Macri y a Cristina. Lo apoyan todos los dirigentes del PJ, en particular el cordobés Carlos Caserio, hombre del gobernador Juan Schiaretti.
“El objetivo es crear expectativas con Urtubey, Schiaretti, Uñac, Massa y Pichetto, en todo el país. Después vemos cómo se resuelven las candidaturas”, explican.
Bajo ese esquema no es casual que Sergio Uñac, quien hasta hace poco sólo tenía ojos para la reelección como gobernador de San Juan, diera señales en el sentido de una eventual candidatura presidencial: “En lo inmediato lo mío está en la provincia de San Juan, pero obviamente que no cierro las puertas de nada, menos en un país tan dinámico como en la Argentina”, dijo este fin de semana.
Desde el Peronismo Federal dejaron en claro que un posible frente electoral entre Cristina Kirchner y Moyano los aleja aún más. “Moyano jugó para Macri en el 2015. Ni él ni Cristina trabajaron para que ganara Daniel Scioli. Y eso es difícil de digerir. Se juntaron para no ir presos”, lanzó.
Mas aún, no ven factible un escenario de unidad como el que venían pregonando los K. Esgrimen que si hubiera una alianza con los kirchneristas, sería difícil explicarle a la sociedad que son algo nuevo, si en una hipotética lista encabezada por Urtubey o Massa como candidato presidencial, figuraran postulantes a diputados como, por ejemplo, Máximo Kirchner o Luis D’Elía.
Dos de los candidateables a presidente, Urtubey y Massa, coinciden en la estrategia. Los dos están convencidos que sólo conformando un frente con otras fuerzas como el socialismo santafesino, los sectores radicales críticos, Libres del Sur, el GEN y otras fuerzas provinciales, pueden prescindir de la candidatura de Cristina Kirchner para enfrentar al Gobierno. Pero no todos piensan igual.
En los números que manejaba el PJ antes de la explosión de lo que denominan, el “chofergate”, el núcleo duro de la ex presidenta que le manifiesta una fidelidad del cien por ciento, era de 21%; con Macri con un 19% y Massa con 11%.
