Un portero argentino, asesinado tras una pelea con otro jugador
Argentina, AS
Facundo Espíndola fue portero en las categorías inferiores de River Plate y llegó a jugar en Almagro. Tal y como informan varios medios argentinos, en la madrugada del domingo, a los 25 años, perdía la vida tras recibir una puñalada en el tórax durante una pelea callejera a la salida de un bar en Hutlingham. La pelea se produjo alrededor de las 6:30 horas y ya hay dos detenidos, uno de los cuales es otro futbolista. Se trata del delantero de San Telmo, Nahuel Oviedo.
Después de liarse a golpes, uno de ellos sacó un cuchillo y se lo clavó a Espíndola, hecho por el que murió prácticamente al instante. Oviedo fue arrestado con un amigo de nacionalidad paraguaya mientras viajaban en su coche, un Peugeot 308 blanco. Al parecer, el vehículo tenía manchas de sangre. Horas más tarde se encontró el presunto arma homicida a quince manzanas del lugar de los hechos.
Los motivos de la pelea, de la que hay imágenes de las cámaras de seguridad de las calles, no han trascendido y se sospecha que los futbolistas ni si quiera se conocían. El pasado sábado, Oviedo, de 28 años, volvió a jugar tras una rotura de ligamentos. Ya había tenido problemas con la justicia en 2011, cuando fue condenado durante tres años por un robo del cual admitió su culpabilidad.
Facundo Espíndola fue portero en las categorías inferiores de River Plate y llegó a jugar en Almagro. Tal y como informan varios medios argentinos, en la madrugada del domingo, a los 25 años, perdía la vida tras recibir una puñalada en el tórax durante una pelea callejera a la salida de un bar en Hutlingham. La pelea se produjo alrededor de las 6:30 horas y ya hay dos detenidos, uno de los cuales es otro futbolista. Se trata del delantero de San Telmo, Nahuel Oviedo.
Después de liarse a golpes, uno de ellos sacó un cuchillo y se lo clavó a Espíndola, hecho por el que murió prácticamente al instante. Oviedo fue arrestado con un amigo de nacionalidad paraguaya mientras viajaban en su coche, un Peugeot 308 blanco. Al parecer, el vehículo tenía manchas de sangre. Horas más tarde se encontró el presunto arma homicida a quince manzanas del lugar de los hechos.
Los motivos de la pelea, de la que hay imágenes de las cámaras de seguridad de las calles, no han trascendido y se sospecha que los futbolistas ni si quiera se conocían. El pasado sábado, Oviedo, de 28 años, volvió a jugar tras una rotura de ligamentos. Ya había tenido problemas con la justicia en 2011, cuando fue condenado durante tres años por un robo del cual admitió su culpabilidad.