Los 4 problemas de Florentino desde que acabó la temporada
Todo comenzó con la dimisión de Zidane y se ha cerrado el círculo con la marcha de Cristiano a la Juventus. Su siguiente reto será fichar un crack.
Madrid, AS
La temporada 2017-18 concluyó con un gran éxito para el Real Madrid: la consecución de la Décimotercera Champions en Kiev ante el Liverpool. Era la tercera consecutiva y la cuarta en cinco años, por lo que nada hacía presagiar la convulsa situación que ha vivido Florentino Pérez desde que acabó la temporada. Cuatro han sido los problemas a los que se ha tenido que enfrentar el presidente madridista en este tiempo.
Madrid, AS
La temporada 2017-18 concluyó con un gran éxito para el Real Madrid: la consecución de la Décimotercera Champions en Kiev ante el Liverpool. Era la tercera consecutiva y la cuarta en cinco años, por lo que nada hacía presagiar la convulsa situación que ha vivido Florentino Pérez desde que acabó la temporada. Cuatro han sido los problemas a los que se ha tenido que enfrentar el presidente madridista en este tiempo.
La dimisión de Zidane
El primer golpe para Florentino llegó el 31 de mayo con la dimisión por sorpresa del entrenador que le había dado sus tres últimas Champions, Zinedine Zidane. El francés decidió que lo mejor para todos era abandonar el Real Madrid para facilitar una renovación del equipo que se antojaba necesaria pese a la época dorada que ha vivido el club blanco desde su llegada. Esto supuso un imprevisto para el presidente, que contaba con él para seguir comandando la nave madridista. Aunque no se saben a ciencia cierta las razones, se ha especulado con múltiples motivos, como desavenencias con la Junta Directiva o con la plantilla. Esto obligó a Florentino a buscar un nuevo inquilino para el banquillo y surgieron multitud de nombres, como Allegri, Conte o Pochettino, pero ninguno de ellos aceptó el cargo.
El revuelo por el fichaje de Lopetegui
El siguiente episodio llegó con el recambio de Zidane. Tras más de 10 días de incertidumbre sobre la identidad del nuevo entrenador, el 12 de junio el Real Madrid anunció en un comunicado en su web que el elegido era el seleccionador español, Julen Lopetegui. Esto provocó un debate en nuestro país sobre el momento escogido para anunciarlo y la conveniencia o no de que el técnico vasco siguiera entrenando a España. Finalmente el presidente de la RFEF, Luis Rubiales, optó por destituirle en una rueda de prensa y nombrar como su sustituto a Fernando Hierro, hasta entonces director deportivo de la Selección. La decisión de Florentino causó un gran pesar, lo que pudo contribuir a que se acrecentara la animadversión que hay en algunas zonas de nuestro país hacia el Real Madrid.
La marcha de Guti
El técnico del Juvenil A manifestó en abril que dejaría el club madridista: “Necesito nuevas motivaciones”. La continuidad de Solari en el banquillo del Castilla pese a no conseguir ascender al filial a Segunda División hizo que el de Torrejón se planteara continuar su carrera fuera del club de su vida. Sin embargo, cuando se produjo la salida de Zidane, fue uno de los nombres que entraron en las quinielas para sustituirle. Eso hizo que el madrileño reconsiderara su decisión y descartara temporalmente marcharse, pese al interés de clubes como el Leganés, el Saint-Mirren escocés o el Besiktas turco. Pero el nombramiento de Lopetegui como técnico del primer equipo hizo que Guti optara por escuchar las ofertas que le llegaban, descantándose por la del Besiktas, que desde el primer momento había tratado de ficharle como segundo entrenador. El día 4 de julio anunciaba su marcha a Estambul y se despedía del Real Madrid con un mensaje en sus redes sociales dando las gracias al club. El entrenador que había llevado al primer juvenil blanco a cosechar grandes éxitos (triplete histórico en 2017) se iba ante la falta de oportunidades.
El adiós de Cristiano
El último problema que le surgió a Florentino fue la marcha de la gran estrella del Real Madrid, Cristiano Ronaldo. El portugués ya avisó en la misma noche de la conquista de la Décimotercera Champions que esta sería su última temporada en el club. Una advertencia que no resultaba nueva para la afición madridista ni, por supuesto, para el presidente, que ha tenido que escuchar prácticamente todos los años las quejas del portugués, ya fuera por su sueldo o por sus sensaciones dentro de la entidad. La relación entre Florentino y Cristiano siempre ha sido tirante(recordemos que el portugués fue un fichaje cerrado por Ramón Calderón, aunque ejecutado por Florentino) y han tenido varios desencuentros. Eso ha hecho que el de Madeira haya reclamado en repetidas ocasiones mejoras de contrato ymuestras de cariño por parte de los dirigentes blancos, dado su espectacular rendimiento en los nueve años que ha pertenecido al Real Madrid (es el máximo goleador de la historia del club con 450 goles en 438 partidos). Finalmente el pasado 10 de julio se hizo oficial la salida de Cristiano en dirección a la Juventus por 105 millones. Ahora el club de Concha Espina tendrá que buscar un sustituto que pueda ser capaz de llenar el hueco dejado por el luso, algo que será difícil de conseguir. Neymar, Mbappé o Hazard han sido algunos de los nombres que han sonado para reforzar la plantilla madridista.