Gonzales desafía a Mesa a postularse a la Presidencia; el expresidente reta a respetar el 21F
El presidente del Senado considera que Carlos Mesa salió a la palestra para ofertarse como postulante a la silla presidencial, tal como una doncella o una vedette.
La Razón Digital / Rubén Ariñez / La Paz
El presidente del Senado, José Gonzales, desafió este viernes a Carlos Mesa a asumir su candidatura para las elecciones generales de 2019, una posibilidad que el expresidente ha descartado bajo el argumento de que la prioridad es garantizar el respeto al voto del referéndum del 21 de febrero de 2016 (21F), que rechazó la reforma constitucional para habilitar una nueva repostulación del presidente Evo Morales.
En el marco de un foro en la Universidad Católica Boliviana (UCB) realizado en Cochabamba, la noche del jueves, Mesa planteó la creación de una “coordinadora nacional” para la defensa de los resultados del 21F, aunque descartó que ese mecanismo sea liderado por él en la misma línea de su negativa a asumir una posible candidatura presidencial.
Aseguró además que el Gobierno ejecuta una “estrategia de demolición política” en su contra con el caso Quiborax para inhabilitarlo “sobre una hipotética e inexistente candidatura”, que consideró que al Gobierno le interesa promover para intentar legitimar la eventual repostulación de Morales.
La Asamblea Legislativa no tratará en esta legislatura el juicio a Carlos Mesa
Para Gonzales, “Mesa ya está preparando el escenario para desembarcar en la campaña política” para las justas electorales. En referencia al planteamiento de una coordinadora, esbozó que “seguramente ellos quieren hacer ver que no es un partido político”.
“El señor Mesa quiere ser candidato, seguramente quiere ser nuevamente presidente de Bolivia. Bienvenido, que participe en las elecciones y que deje de darle tantas vueltas”, insistió.
“Yo no veo por qué el señor Mesa debería escaparse de una candidatura, él sabe lo que es gobernar este país, él sabe muy bien (cómo es) no tener una Asamblea (…) si él considera que en el redesquite (prueba para reprobados) puede tener mejor suerte que cuando le tocó ser presidente, bueno pues, que lo haga. Que intente y ojalá le vaya bien”, sostuvo Gonzales.
El vicepresidente Álvaro García anunció ayer, en una conferencia de prensa, que la solicitud de juicio de responsabilidades contra Mesa por el caso Quiborax no será tratada en esta legislatura debido a que existen otras que se encuentran en lista de espera.
Bajo esa premisa, insistió en que Mesa tiene la libertad de trabajar en su candidatura, pero sin usar para ello el tema del juicio.
Varios legisladores y autoridades del oficialismo han apuntalado esa postura pese a las negativas del exmandatario, quien, en réplica a García, remarcó ayer en Twitter que “como ciudadano tengo el derecho de hacer política como y cuando quiera, en el marco de la ley, sobre todo para combatir el autoritarismo de su régimen defendiendo el 21F”.
A juicio de Gonzales, Mesa salió a la palestra para ofertarse como postulante a la silla presidencial en medio de la disputa de los frentes opositores por su nombre.
“Se está exponiendo a los partidos de la oposición que ya tuvieron su oportunidad en la historia boliviana. No quiero decir una vedete porque puede generar susceptibilidad, digamos más bien una suerte de (Lionel) Messi o la doncella que quieren disputarse todos los príncipes”, matizó.
El presidente del Senado, José Gonzales, desafió este viernes a Carlos Mesa a asumir su candidatura para las elecciones generales de 2019, una posibilidad que el expresidente ha descartado bajo el argumento de que la prioridad es garantizar el respeto al voto del referéndum del 21 de febrero de 2016 (21F), que rechazó la reforma constitucional para habilitar una nueva repostulación del presidente Evo Morales.
En el marco de un foro en la Universidad Católica Boliviana (UCB) realizado en Cochabamba, la noche del jueves, Mesa planteó la creación de una “coordinadora nacional” para la defensa de los resultados del 21F, aunque descartó que ese mecanismo sea liderado por él en la misma línea de su negativa a asumir una posible candidatura presidencial.
Aseguró además que el Gobierno ejecuta una “estrategia de demolición política” en su contra con el caso Quiborax para inhabilitarlo “sobre una hipotética e inexistente candidatura”, que consideró que al Gobierno le interesa promover para intentar legitimar la eventual repostulación de Morales.
La Asamblea Legislativa no tratará en esta legislatura el juicio a Carlos Mesa
Para Gonzales, “Mesa ya está preparando el escenario para desembarcar en la campaña política” para las justas electorales. En referencia al planteamiento de una coordinadora, esbozó que “seguramente ellos quieren hacer ver que no es un partido político”.
“El señor Mesa quiere ser candidato, seguramente quiere ser nuevamente presidente de Bolivia. Bienvenido, que participe en las elecciones y que deje de darle tantas vueltas”, insistió.
“Yo no veo por qué el señor Mesa debería escaparse de una candidatura, él sabe lo que es gobernar este país, él sabe muy bien (cómo es) no tener una Asamblea (…) si él considera que en el redesquite (prueba para reprobados) puede tener mejor suerte que cuando le tocó ser presidente, bueno pues, que lo haga. Que intente y ojalá le vaya bien”, sostuvo Gonzales.
El vicepresidente Álvaro García anunció ayer, en una conferencia de prensa, que la solicitud de juicio de responsabilidades contra Mesa por el caso Quiborax no será tratada en esta legislatura debido a que existen otras que se encuentran en lista de espera.
Bajo esa premisa, insistió en que Mesa tiene la libertad de trabajar en su candidatura, pero sin usar para ello el tema del juicio.
Varios legisladores y autoridades del oficialismo han apuntalado esa postura pese a las negativas del exmandatario, quien, en réplica a García, remarcó ayer en Twitter que “como ciudadano tengo el derecho de hacer política como y cuando quiera, en el marco de la ley, sobre todo para combatir el autoritarismo de su régimen defendiendo el 21F”.
A juicio de Gonzales, Mesa salió a la palestra para ofertarse como postulante a la silla presidencial en medio de la disputa de los frentes opositores por su nombre.
“Se está exponiendo a los partidos de la oposición que ya tuvieron su oportunidad en la historia boliviana. No quiero decir una vedete porque puede generar susceptibilidad, digamos más bien una suerte de (Lionel) Messi o la doncella que quieren disputarse todos los príncipes”, matizó.
