Brasil quiere acabar con las celebraciones con coreografía
Tras tres sanciones con tarjeta amarilla en las últimas dos jornadas por "exceso de celebración", la CBF ha defendido los árbitros y afirma: "No estimulamos las coreografías".
Fernando Kallás
As
El Brasileirão vive una polémica insólita. La Primera División del país mundialmente conocido por su fútbol alegre e irreverente ha visto, en sus dos últimas jornadas, tres celebraciones de goles acabaren con sanciones de parte del arbitraje, tarjetas amarillas avalada por la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), que quiere acabar con “el exceso de celebración” en los campos verde e amarelos.
“No estimulamos las coreografías porque pueden generar una pérdida de tiempo excesiva”, afirmó Marcos Marinho, presidente de la Comisión de Arbitraje de la CBF, en entrevista a UOL. “Está en la regla y si el árbitro entiende que una celebración puede perjudicar su control del partido, defendemos el castigo”, explicó el dirigente.
La primera "víctima" ha sido Lucas Lima, en el empate entre Palmeiras y Santos (1-1) sancionado por presunta "celebración inflamadora" tras su gol.
“Esto es represión. El gol es un momento marcante, ¡¿y ahora ya no se puede ni celebrarlo?! ¡Es una verguenza!”, criticó Moisés, del Palmeiras, sancionado el pasado domingo por “celebración excesiva” tras su gol, el primero de la victora del Porco ante el Atlético Mineiro (3-2). Su rival en el partido, Luan, que también vio amarilla por el mismo motivo tras marcar el primero de los goles del Galo, también no escondió su frustración: “Son unos pesados”.
Fernando Kallás
As
El Brasileirão vive una polémica insólita. La Primera División del país mundialmente conocido por su fútbol alegre e irreverente ha visto, en sus dos últimas jornadas, tres celebraciones de goles acabaren con sanciones de parte del arbitraje, tarjetas amarillas avalada por la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), que quiere acabar con “el exceso de celebración” en los campos verde e amarelos.
“No estimulamos las coreografías porque pueden generar una pérdida de tiempo excesiva”, afirmó Marcos Marinho, presidente de la Comisión de Arbitraje de la CBF, en entrevista a UOL. “Está en la regla y si el árbitro entiende que una celebración puede perjudicar su control del partido, defendemos el castigo”, explicó el dirigente.
La primera "víctima" ha sido Lucas Lima, en el empate entre Palmeiras y Santos (1-1) sancionado por presunta "celebración inflamadora" tras su gol.
“Esto es represión. El gol es un momento marcante, ¡¿y ahora ya no se puede ni celebrarlo?! ¡Es una verguenza!”, criticó Moisés, del Palmeiras, sancionado el pasado domingo por “celebración excesiva” tras su gol, el primero de la victora del Porco ante el Atlético Mineiro (3-2). Su rival en el partido, Luan, que también vio amarilla por el mismo motivo tras marcar el primero de los goles del Galo, también no escondió su frustración: “Son unos pesados”.