Sectores de El Alto protagonizan bloqueos y Gobierno convoca al diálogo a la UPEA
La Paz, Erbol
Sectores de El Alto salieron desde tempranas horas a las calles de esa urbe para cumplir la primera jornada del paro de 48 horas convocado para exigir una solución a las demandas de la Universidad Pública del El Alto (UPEA) y la renuncia de los ministros de Gobierno y Economía, Carlos Romero y Mario Guillén, después de una semana marcada por la tensión que generó la muerte del universitario Jonathan Quispe, el 24 de mayo.
Se dispusieron 16 puntos de bloqueo con el objetivo de impedir el tráfico vehicular. Uno de los primeros puntos en obstruirse fue la carretera que conecta La Paz con Oruro, en las que ambas vías se encuentran cerradas.
Juntas vecinales instalaron piquetes en los sectores de Ventilla, puente Vela y Cruce Viacha. Estudiantes de la UPEA salieron a bloquear en inmediaciones de Río Seco, asimismo se cortó el paso en las avenidas Naciones Unidas y Juan Pablo II.
El paro está precedido por cinco piquetes de huelga en la Central Obrera Regional (COR), la Federación de Juntas Vecinales, la Asamblea de Derechos Humanos y la Alcaldía Quemada.
El ministro de la Presidencia, Alfredo Rada, informó hoy que se envió al rector de la UPEA, Ricardo Nogales, una nueva invitación al diálogo para las 12:30 de esta jornada, en instalaciones de la Vicepresidencia del Estado.
"Convocamos a la comunidad educativa de El Alto para una reunión en la que buscaremos soluciones a la demanda presupuestaria de El Alto que repito se puede atender, el Gobierno nacional garantiza que la UPEA seguirá desarrollando sus actividades académicas normales", dijo en conferencia de prensa en horas de la mañana.
El Ministro de la Presidencia reiteró que la solicitud de renuncia de autoridades de Gobierno "no corresponde" al pedido que la movilización de la UPEA incorporó entre sus demandas.
Asimismo, aseguró que la investigación sobre la muerte del universitario se encuentra en manos del Ministerio Público y reporta avances, por lo que el único tema pendiente es el referido al incremento del presupuesto.
Los movilizados apuntan como autores intelectuales de la muerte de Quispe a los ministros y jefes policiales.
Sectores de El Alto salieron desde tempranas horas a las calles de esa urbe para cumplir la primera jornada del paro de 48 horas convocado para exigir una solución a las demandas de la Universidad Pública del El Alto (UPEA) y la renuncia de los ministros de Gobierno y Economía, Carlos Romero y Mario Guillén, después de una semana marcada por la tensión que generó la muerte del universitario Jonathan Quispe, el 24 de mayo.
Se dispusieron 16 puntos de bloqueo con el objetivo de impedir el tráfico vehicular. Uno de los primeros puntos en obstruirse fue la carretera que conecta La Paz con Oruro, en las que ambas vías se encuentran cerradas.
Juntas vecinales instalaron piquetes en los sectores de Ventilla, puente Vela y Cruce Viacha. Estudiantes de la UPEA salieron a bloquear en inmediaciones de Río Seco, asimismo se cortó el paso en las avenidas Naciones Unidas y Juan Pablo II.
El paro está precedido por cinco piquetes de huelga en la Central Obrera Regional (COR), la Federación de Juntas Vecinales, la Asamblea de Derechos Humanos y la Alcaldía Quemada.
El ministro de la Presidencia, Alfredo Rada, informó hoy que se envió al rector de la UPEA, Ricardo Nogales, una nueva invitación al diálogo para las 12:30 de esta jornada, en instalaciones de la Vicepresidencia del Estado.
"Convocamos a la comunidad educativa de El Alto para una reunión en la que buscaremos soluciones a la demanda presupuestaria de El Alto que repito se puede atender, el Gobierno nacional garantiza que la UPEA seguirá desarrollando sus actividades académicas normales", dijo en conferencia de prensa en horas de la mañana.
El Ministro de la Presidencia reiteró que la solicitud de renuncia de autoridades de Gobierno "no corresponde" al pedido que la movilización de la UPEA incorporó entre sus demandas.
Asimismo, aseguró que la investigación sobre la muerte del universitario se encuentra en manos del Ministerio Público y reporta avances, por lo que el único tema pendiente es el referido al incremento del presupuesto.
Los movilizados apuntan como autores intelectuales de la muerte de Quispe a los ministros y jefes policiales.