Diego Costa y la revancha del '19'
Iñaki Dufour
Krasnodar, EFE
"Necesitaba marcar con la selección", asumía Diego Costa después su titularidad y sus dos goles contra Portugal, los primeros en un Mundial para el '19' de la 'Roja, con una revancha pendiente desde Brasil 2014 y reafirmado con ocho tantos en sus últimos once duelos internacionales con España.
Lo pasó "mal" hace cuatro años el atacante en su primer gran torneo con España, recién recuperado de una lesión muscular que primero le apartó de la 'final' por la Liga que ganó el Atlético de Madrid al Barcelona en el Camp Nou y después del duelo decisivo de la Liga de Campeones con el Real Madrid en Lisboa.
Ni llegó entonces en su mejor momento ni estaba tan adaptado al estilo del equipo como ahora. En Brasil, se presentó con apenas dos partidos disputados con la selección, entonces dirigida por Vicente del Bosque, y ningún gol. Fue titular en dos de los tres duelos del torneo, los dos con derrota: 1-5 contra Holanda y 2-0 contra Chile.
Son dos de las grandes diferencias que separan para él aquella cita y la actual, a tope ahora tras una temporada en la que sufrió un verano convulso, enfrentado a Antonio Conte en el Chelsea y con la incertidumbre de si se haría o no su anhelado traspaso al Atlético, y en la que no entró en juego hasta el mes de enero.
Cuando lo hizo no hubo duda ni en el equipo rojiblanco, con el que marcó siete goles y dio cinco asistencias en 23 encuentros, 20 como titular, además de la liberación que supuso para desatar al mejor Antoine Griezmann, ni en la selección, reclutado de nuevo de inmediato por Julen Lopetegui para los amistosos del mes de marzo.
"Si estoy aquí hoy es mérito de mi trabajo, de que he luchado y de la confianza que depositó en mí desde el principio Lopetegui, que me dijo cuando se sumó a la selección que contaba conmigo. Es una pena todo lo que pasó (con la destitución el pasado miércoles del técnico). Ahora, Hierro me sigue dando la misma confianza", afirma.
Diego Costa desató su mejor versión con la selección española a las órdenes de Lopetegui. Hasta la llegada del técnico, el ariete disputó diez partidos, todos como titular y marcó un solo gol, el primero de su carrera con la selección, el 12 de octubre de 2014 en el triunfo por 0-4 contra Luxemburgo en el estadio Josy Barthel, e incluso se quedó fuera de la convocatoria que configuró el seleccionador Vicente del Bosque para la Eurocopa de Francia 2016.
Después, el atacante, con el que contó Lopetegui desde su debut el 1 de septiembre de 2016 ante Bélgica, ha disputado once choques más y ha marcado ocho goles (una media de 0,72 por encuentro); desde los dos tantos que marcó en un 8-0 a Liechtenstein el 5 de septiembre de 2016 en León hasta los dos, los últimos hasta ahora, que logró este viernes ante Portugal, ya a las órdenes de Hierro.
Entre medias, también batió la portería de Albania (0-2), Israel (4-1), Macedonia (1-2) y Argentina (6-1) para una racha de seis goles en los últimos ocho encuentros como internacional, agrandada cuando se limita a sus partidos como titular, con seis tantos en sus últimos seis duelos de inicio, de los que sólo se quedó sin marcar en uno, el 1-1 ante Suiza en la preparación para el Mundial 2018.
"Ojalá pueda seguir", expone el atacante, que insiste en la prioridad colectiva sobre la individual en Rusia 2018: "Lo importante es ganar los partidos. Si puedo marcar, pues perfecto, pero la selección está por encima de mis goles. Si podemos ganar el Mundial sin marcar más goles, lo firmaría hoy mismo".
Krasnodar, EFE
"Necesitaba marcar con la selección", asumía Diego Costa después su titularidad y sus dos goles contra Portugal, los primeros en un Mundial para el '19' de la 'Roja, con una revancha pendiente desde Brasil 2014 y reafirmado con ocho tantos en sus últimos once duelos internacionales con España.
Lo pasó "mal" hace cuatro años el atacante en su primer gran torneo con España, recién recuperado de una lesión muscular que primero le apartó de la 'final' por la Liga que ganó el Atlético de Madrid al Barcelona en el Camp Nou y después del duelo decisivo de la Liga de Campeones con el Real Madrid en Lisboa.
Ni llegó entonces en su mejor momento ni estaba tan adaptado al estilo del equipo como ahora. En Brasil, se presentó con apenas dos partidos disputados con la selección, entonces dirigida por Vicente del Bosque, y ningún gol. Fue titular en dos de los tres duelos del torneo, los dos con derrota: 1-5 contra Holanda y 2-0 contra Chile.
Son dos de las grandes diferencias que separan para él aquella cita y la actual, a tope ahora tras una temporada en la que sufrió un verano convulso, enfrentado a Antonio Conte en el Chelsea y con la incertidumbre de si se haría o no su anhelado traspaso al Atlético, y en la que no entró en juego hasta el mes de enero.
Cuando lo hizo no hubo duda ni en el equipo rojiblanco, con el que marcó siete goles y dio cinco asistencias en 23 encuentros, 20 como titular, además de la liberación que supuso para desatar al mejor Antoine Griezmann, ni en la selección, reclutado de nuevo de inmediato por Julen Lopetegui para los amistosos del mes de marzo.
"Si estoy aquí hoy es mérito de mi trabajo, de que he luchado y de la confianza que depositó en mí desde el principio Lopetegui, que me dijo cuando se sumó a la selección que contaba conmigo. Es una pena todo lo que pasó (con la destitución el pasado miércoles del técnico). Ahora, Hierro me sigue dando la misma confianza", afirma.
Diego Costa desató su mejor versión con la selección española a las órdenes de Lopetegui. Hasta la llegada del técnico, el ariete disputó diez partidos, todos como titular y marcó un solo gol, el primero de su carrera con la selección, el 12 de octubre de 2014 en el triunfo por 0-4 contra Luxemburgo en el estadio Josy Barthel, e incluso se quedó fuera de la convocatoria que configuró el seleccionador Vicente del Bosque para la Eurocopa de Francia 2016.
Después, el atacante, con el que contó Lopetegui desde su debut el 1 de septiembre de 2016 ante Bélgica, ha disputado once choques más y ha marcado ocho goles (una media de 0,72 por encuentro); desde los dos tantos que marcó en un 8-0 a Liechtenstein el 5 de septiembre de 2016 en León hasta los dos, los últimos hasta ahora, que logró este viernes ante Portugal, ya a las órdenes de Hierro.
Entre medias, también batió la portería de Albania (0-2), Israel (4-1), Macedonia (1-2) y Argentina (6-1) para una racha de seis goles en los últimos ocho encuentros como internacional, agrandada cuando se limita a sus partidos como titular, con seis tantos en sus últimos seis duelos de inicio, de los que sólo se quedó sin marcar en uno, el 1-1 ante Suiza en la preparación para el Mundial 2018.
"Ojalá pueda seguir", expone el atacante, que insiste en la prioridad colectiva sobre la individual en Rusia 2018: "Lo importante es ganar los partidos. Si puedo marcar, pues perfecto, pero la selección está por encima de mis goles. Si podemos ganar el Mundial sin marcar más goles, lo firmaría hoy mismo".