Cissé: la dramática historia del técnico más joven del Mundial
El seleccionador de Senegal perdió a 12 familiares en 2002, en el hundimiento del transbordador Le Joola, en el que perdieron la vida 1.893 personas.
Miguel Ángel Vasco
As
Aliou Cissé (Ziguinchor, Senegal, 24-3-1976) es el seleccionador más joven del Mundial, el único de raza negra, uno de los que menos cobra (apenas 200.000 euros anuales) y en la ruta de poder repetir como entrenador el éxito que consiguió como jugador en 2002. Entonces, en Corea y Japón, Senegal participaba por primera vez en su historia en un Mundial y sorprendió, entre elogios merecidos, al llegar hasta cuartos de final, donde cayó ante Turquía. Cissé, que no lucía las rastas de ahora, era el capitán (con el 6 a la espalda) de aquel equipo que lideraba junto a futbolistas como Diao, Pape Diop, Diouf, Camara... y que fue recibido en loor de multitudes a su llegada a Dakar.
Futbolista prolijo desde que empezó en Francia, en el Lille, en 1994 (después, Sedan, en dos etapas; PSG, Montpellier, Birmingham, Crystal Palace, Portsmouth) hasta que se retiró en el Nimes en 2009, se hizo cargo de la selección senegalesa en 2015, sustituyendo al exinternacional francés Giresse. Y, tras 16 años, Los Leones del Teranga han vuelto a estar, bajo sus órdenes, en un Mundial.
Pero Cissé tiene una historia personal dramática. Dos meses después de triunfar en el Mundial de 2002, y tras fichar por el Birmingham, recibió una de las peores noticias de su vida. El transbordador Le Joola, que cubría el trayecto Ziguinchor-Dakar, se hundió como consecuencia de una fortísima tormenta. En el momento de del accidente, la embarcación transportaba el triple de su capacidad máxima (580 pasajeros). En el considerado segundo mayor desastre marítimo civil de la historia, perdieron la vida 1.893 personas, sólo se salvaron 64 personas. Entre los fallecidos había 12 miembros de la familia Aliou Cissé, entre tíos, tías, sobrinos y primos.
Miguel Ángel Vasco
As
Aliou Cissé (Ziguinchor, Senegal, 24-3-1976) es el seleccionador más joven del Mundial, el único de raza negra, uno de los que menos cobra (apenas 200.000 euros anuales) y en la ruta de poder repetir como entrenador el éxito que consiguió como jugador en 2002. Entonces, en Corea y Japón, Senegal participaba por primera vez en su historia en un Mundial y sorprendió, entre elogios merecidos, al llegar hasta cuartos de final, donde cayó ante Turquía. Cissé, que no lucía las rastas de ahora, era el capitán (con el 6 a la espalda) de aquel equipo que lideraba junto a futbolistas como Diao, Pape Diop, Diouf, Camara... y que fue recibido en loor de multitudes a su llegada a Dakar.
Futbolista prolijo desde que empezó en Francia, en el Lille, en 1994 (después, Sedan, en dos etapas; PSG, Montpellier, Birmingham, Crystal Palace, Portsmouth) hasta que se retiró en el Nimes en 2009, se hizo cargo de la selección senegalesa en 2015, sustituyendo al exinternacional francés Giresse. Y, tras 16 años, Los Leones del Teranga han vuelto a estar, bajo sus órdenes, en un Mundial.
Pero Cissé tiene una historia personal dramática. Dos meses después de triunfar en el Mundial de 2002, y tras fichar por el Birmingham, recibió una de las peores noticias de su vida. El transbordador Le Joola, que cubría el trayecto Ziguinchor-Dakar, se hundió como consecuencia de una fortísima tormenta. En el momento de del accidente, la embarcación transportaba el triple de su capacidad máxima (580 pasajeros). En el considerado segundo mayor desastre marítimo civil de la historia, perdieron la vida 1.893 personas, sólo se salvaron 64 personas. Entre los fallecidos había 12 miembros de la familia Aliou Cissé, entre tíos, tías, sobrinos y primos.