Bruce, el cachorro que preparan para salvar vidas
Es un ovejero alemán que será entrenado en el cuartel de bomberos de Monte Grande para rescatar personas. Nació hace 60 días y cuando esté listo lo pondrán a trabajar.
Camila Ruiz Celihueta
Clarín
Por estos días, buenas noticias son las que abundan en el cuartel de Bomberos Voluntarios de Monte Grande, en Esteban Echeverría. Especialmente son dos. La primera y de mayor utilidad para los vecinos es la llegada de un nuevo autobomba cero kilómetro que será usado para dar respuestas más rápidas y eficientes ante las urgencias en la zona. Pero la segunda llenó de ternura ese ámbito de mujeres y hombres valientes: es la aparición de un nuevo cachorrito que servirá -entrenamiento mediante- para futuros rescates de personas vivas.
La llegada de Bruce, el nuevo integrante a la familia de los bomberos, tiene sensaciones encontradas porque reemplazará al querido ovejero sable, Fox, que ya no compartirá los días con ellos.
“Tierno, cariñoso y juguetón”, así definen a Bruce los bomberos del cuartel central del Distrito. Es un ovejero alemán de 60 días, que ya se encuentra con sus nuevos compañeros. “Ahora está con nosotros en el cuartel, aunque por momentos lo aislamos para que no esté todo el tiempo en contacto con gente y se acostumbre”, comentó Claudio Pucheta, jefe de Cuerpo de los Bomberos de Echeverría. Además, aseguró que Bruce es muy sociable y que, por ser chiquito, rompe todo. “Ahora está en un período de socialización y próximamente lo vamos a empezar a entrenar”, comenta. Su entrenamiento se realiza en base a estímulos y juegos y el objetivo es que en poco tiempo sepa que tiene que ir a hacer su trabajo. “No parece que tuviera dos meses, es tierno y obediente. Nosotros usamos botas y ya las conoce, entonces viene corriendo a ver quién entra y quién sale”, agrega el bombero.
El pequeño Bruce deberá entrenar y formarse para cumplir con las tareas que realizaba Fox, el ex mimado del destacamento, que ya cumplió nueve años. “Lo jubilamos porque a esta altura se fatiga muy rápido y estos perros tienen un cierto período de utilidad. De todas formas lo dimos a resguardo del guía, que es quien entrena a los caninos del cuartel”, explica Pucheta. Bruce compartirá la marquesina de las estrellas del cuartel con Kiara y Mía, dos ovejeras que cumplen la función de buscar restos humanos en lugares siniestrados.
Podría decirse que Bruce es del interior del país porque fue donado por un criadero de Río Gallegos. Llegó a Buenos Aires el 22 de mayo de pasado junto con la dueña del criadero. Su nombre original era Shanik, aunque en el camino, fue renombrado Bruce.
María Elena Méndez, dueña del criadero Von Eichenlaub, de Río Gallegos, aseguró estar orgullosa de que Bruce forme parte de equipo de los bomberos: “Para mí es un placer que un ejemplar nuestro este prestando servicios allá para una tarea tan noble como la que hacen los bomberos, me enaltece. Además, Bruce tiene un temperamento muy lindo”, concluye la criadora.
Camila Ruiz Celihueta
Clarín
Por estos días, buenas noticias son las que abundan en el cuartel de Bomberos Voluntarios de Monte Grande, en Esteban Echeverría. Especialmente son dos. La primera y de mayor utilidad para los vecinos es la llegada de un nuevo autobomba cero kilómetro que será usado para dar respuestas más rápidas y eficientes ante las urgencias en la zona. Pero la segunda llenó de ternura ese ámbito de mujeres y hombres valientes: es la aparición de un nuevo cachorrito que servirá -entrenamiento mediante- para futuros rescates de personas vivas.
La llegada de Bruce, el nuevo integrante a la familia de los bomberos, tiene sensaciones encontradas porque reemplazará al querido ovejero sable, Fox, que ya no compartirá los días con ellos.
“Tierno, cariñoso y juguetón”, así definen a Bruce los bomberos del cuartel central del Distrito. Es un ovejero alemán de 60 días, que ya se encuentra con sus nuevos compañeros. “Ahora está con nosotros en el cuartel, aunque por momentos lo aislamos para que no esté todo el tiempo en contacto con gente y se acostumbre”, comentó Claudio Pucheta, jefe de Cuerpo de los Bomberos de Echeverría. Además, aseguró que Bruce es muy sociable y que, por ser chiquito, rompe todo. “Ahora está en un período de socialización y próximamente lo vamos a empezar a entrenar”, comenta. Su entrenamiento se realiza en base a estímulos y juegos y el objetivo es que en poco tiempo sepa que tiene que ir a hacer su trabajo. “No parece que tuviera dos meses, es tierno y obediente. Nosotros usamos botas y ya las conoce, entonces viene corriendo a ver quién entra y quién sale”, agrega el bombero.
El pequeño Bruce deberá entrenar y formarse para cumplir con las tareas que realizaba Fox, el ex mimado del destacamento, que ya cumplió nueve años. “Lo jubilamos porque a esta altura se fatiga muy rápido y estos perros tienen un cierto período de utilidad. De todas formas lo dimos a resguardo del guía, que es quien entrena a los caninos del cuartel”, explica Pucheta. Bruce compartirá la marquesina de las estrellas del cuartel con Kiara y Mía, dos ovejeras que cumplen la función de buscar restos humanos en lugares siniestrados.
Podría decirse que Bruce es del interior del país porque fue donado por un criadero de Río Gallegos. Llegó a Buenos Aires el 22 de mayo de pasado junto con la dueña del criadero. Su nombre original era Shanik, aunque en el camino, fue renombrado Bruce.
María Elena Méndez, dueña del criadero Von Eichenlaub, de Río Gallegos, aseguró estar orgullosa de que Bruce forme parte de equipo de los bomberos: “Para mí es un placer que un ejemplar nuestro este prestando servicios allá para una tarea tan noble como la que hacen los bomberos, me enaltece. Además, Bruce tiene un temperamento muy lindo”, concluye la criadora.