La UEFA y LaLiga, los peores enemigos del Atlético para Lyon
Kuipers dirigirá la final de la Europea League y es el mismo de la final ante el Madrid en Lisboa. Tebas no concede que el Getafe-Atlético se juegue en viernes.
Manolete
As
Mientras en el campo, el Atlético sigue cosechando y creciendo por sus triunfos, la realidad es que en los despachos seguimos sin ser valorados. Lo de la UEFA y la LaLiga pensando en la final de la Europea League es para mosquearse. Los que mandan en Europa ya han designado el árbitro para la final de Lyon y todos los atléticos nos hemos quedado de piedra. Han elegido al holandés Kluipers que ya está con letras de oro en la historia negra colchonera. Es el mismo de la final de la Champions de Lisboa contra el Madrid. El de los cinco minutos de descuento que permitió el empate de Sergio Ramos y lo que es peor, no quiso ver el codazo de Bale a Juanfran en esta jugada y que era una falta clarísima que hubiera dado el título a los de Simeone. No habrá colegiados a nivel de UEFA para elegir a los que no estén marcados por ninguno de los equipos finalistas. Pero resulta que en casa tampoco contamos con muchas ayudas y por eso ya a la conclusión del partido de Simeone, el entrenador se quejaba amargamente que no puedan jugar contra el Geta en viernes, como en Francia ya se lo han concedido al Marsella para que tenga más horas de descanso. Los contactos que se han sucedido al parecer no han dado resultado positivo y están provocando que el Atlético puede tomar una decisión que puede mosquear a la patronal de clubes. Sacar ante los vecinos del Geta al filial de Segunda B o a la mayoría de los juveniles que este fin de semana de han proclamado campeones de la copa de su categoría. Lo que no es de recibo es que puedan tener alguna lesión en una cita en la que los rivales se siguen jugando su baza para estar en Europa. Es el momento de que Cerezo pegue un puñetazo encima de la mesa de los despachos del fútbol y que deje claro que no va a permitir que al Atlético le vayan a seguir tomando el pelo.
Ya hay más peticiones que entradas para esta final y por eso el Atlético lo tiene claro. Abrirá las puertas del Wanda Metropolitano para presenciar el encuentro desde sus pantallas y el lleno está más que garantizado y se pretende crear un gran ambiente. Igualmente si al final se consigue la victoria habrá la ofrenda a Neptuno al día siguiente. Tampoco se pretende dar prioridad a las citas ligueras que quedan ante Geta y Eibar. Diego Costa y Griezmann van a ser cuidado al máximo para evitar cualquier tipo de contratiempo que les dejara fuera de la final. Ante el Espanyol se demostró que sin su presencia, los rojiblancos no llegan a la portería rival. Y, tampoco es un triunfo quedar segundos o cuarto, o por encima o por debajo del Madrid. Motiva mucho más tener a los vecinos como rivales en la final de la Supercopa de Europa de mediados de agosto y podernos tomar la revancha. Igualmente Gil Marín espera anunciar en un plazo de dos a tres semanas que Griezmann y Oblak seguirán al menos una temporada más. También los compañeros se volcarán para que el guardameta vuelva a ser otro años el guardameta menos goleado de Primera y donde se volcará el trabajo es en el apoyo total al equipo femenino. Si ganan al Zaragoza – que ha descendido de categoría- el próximo fin de semana conseguirán la Liga y aparte del reconocimiento que se merecen también se las quiere potenciar para tener un conjunto que pueda luchar por Europa.
Manolete
As
Mientras en el campo, el Atlético sigue cosechando y creciendo por sus triunfos, la realidad es que en los despachos seguimos sin ser valorados. Lo de la UEFA y la LaLiga pensando en la final de la Europea League es para mosquearse. Los que mandan en Europa ya han designado el árbitro para la final de Lyon y todos los atléticos nos hemos quedado de piedra. Han elegido al holandés Kluipers que ya está con letras de oro en la historia negra colchonera. Es el mismo de la final de la Champions de Lisboa contra el Madrid. El de los cinco minutos de descuento que permitió el empate de Sergio Ramos y lo que es peor, no quiso ver el codazo de Bale a Juanfran en esta jugada y que era una falta clarísima que hubiera dado el título a los de Simeone. No habrá colegiados a nivel de UEFA para elegir a los que no estén marcados por ninguno de los equipos finalistas. Pero resulta que en casa tampoco contamos con muchas ayudas y por eso ya a la conclusión del partido de Simeone, el entrenador se quejaba amargamente que no puedan jugar contra el Geta en viernes, como en Francia ya se lo han concedido al Marsella para que tenga más horas de descanso. Los contactos que se han sucedido al parecer no han dado resultado positivo y están provocando que el Atlético puede tomar una decisión que puede mosquear a la patronal de clubes. Sacar ante los vecinos del Geta al filial de Segunda B o a la mayoría de los juveniles que este fin de semana de han proclamado campeones de la copa de su categoría. Lo que no es de recibo es que puedan tener alguna lesión en una cita en la que los rivales se siguen jugando su baza para estar en Europa. Es el momento de que Cerezo pegue un puñetazo encima de la mesa de los despachos del fútbol y que deje claro que no va a permitir que al Atlético le vayan a seguir tomando el pelo.
Ya hay más peticiones que entradas para esta final y por eso el Atlético lo tiene claro. Abrirá las puertas del Wanda Metropolitano para presenciar el encuentro desde sus pantallas y el lleno está más que garantizado y se pretende crear un gran ambiente. Igualmente si al final se consigue la victoria habrá la ofrenda a Neptuno al día siguiente. Tampoco se pretende dar prioridad a las citas ligueras que quedan ante Geta y Eibar. Diego Costa y Griezmann van a ser cuidado al máximo para evitar cualquier tipo de contratiempo que les dejara fuera de la final. Ante el Espanyol se demostró que sin su presencia, los rojiblancos no llegan a la portería rival. Y, tampoco es un triunfo quedar segundos o cuarto, o por encima o por debajo del Madrid. Motiva mucho más tener a los vecinos como rivales en la final de la Supercopa de Europa de mediados de agosto y podernos tomar la revancha. Igualmente Gil Marín espera anunciar en un plazo de dos a tres semanas que Griezmann y Oblak seguirán al menos una temporada más. También los compañeros se volcarán para que el guardameta vuelva a ser otro años el guardameta menos goleado de Primera y donde se volcará el trabajo es en el apoyo total al equipo femenino. Si ganan al Zaragoza – que ha descendido de categoría- el próximo fin de semana conseguirán la Liga y aparte del reconocimiento que se merecen también se las quiere potenciar para tener un conjunto que pueda luchar por Europa.