Fabriles reclaman por la invasión de productos chinos
También se quejaron por la importación de productos peruanos y ropa usada que afectan a la industria nacional.
Erbol
Durante un acto de homenaje al Día del Trabajador Fabril en Palacio de Gobierno, los dirigentes nacionales del sector reclamaron al gobierno por la masiva importación de productos chinos, peruanos y ropa usada que afectan a la industria nacional, pero no escucharon medidas correctivas sino una reflexión del presidente Evo Morales sobre la necesidad de continuar en la lucha contra el imperialismo y al término del acto recibieron dos vagonetas de regalo y equipamiento técnico para las oficinas sindicales.
Los fabriles recuerdan desde el 18 de mayo de 1950 la muerte de obreros en Pura Pura y con ese motivo asistieron a un acto organizado por Palacio de Gobierno, donde el secretario general de la Confederación de Fabriles de Bolivia Vicente Pacosillo dijo que pasan una situación crítica “a raíz de la invasión de la mercadería china, del contrabando, de ropa usada y cierre de fábricas”.
Agradeció al presidente Evo Morales por la promulgación de la Ley de Empresas Sociales contra aquellos malos empresarios que se aprovechan de la gente humilde, como el caso de la fábrica Incerpaz que hace 65 días los obreros se encuentra en paro de brazos caídos y con amenazas de despido.
En similar situación se encuentra la empresa Dillman y las joyerías que se encuentran en crítica situación por falta de mercados. El dirigente fabril de La Paz Mario Segundo mencionó los casos críticos de la fábrica Punto Blanco, Cerámica Victoria, Illampu y Exbol que incumplieron derechos laborales.
Solicitó se instruya al Ministerio de Trabajo, proceda a intervenir y aplicar las leyes para que cumplan con los derechos laborales. También exigió protección ante el mercado de productos chinos y “la invasión de productos peruanos y ropa usada que afecta a la estabilidad laboral”.
Por su lado el presidente Morales pidió a descartar la llamada independencia sindical, porque los obreros no son lacayos ni chitacos como en la época del neoliberalismo, cuando los dirigentes sindicales eran adenistas, emenerristas y miristas y actuaban por prebendas.
Dijo que cuando condena al capitalismo y al imperialismo no condena a los empresarios, sino porque considera que el capitalismo es el peor enemigo de la humanidad. Les recordó que en otros países no existe reunión de trabajadores con sus gobiernos, sino que la relación se hace a través de las ONGs.
La Confederación de Fabriles entregó al presidente Morales una maqueta del futuro un Instituto Tecnológico para la formación de técnicos medios, y la Escuela Sindical para la formación de nuevos cuadros políticos y sindicales.
El jefe de Estado les dio por garantizada la construcción y al final entregó de obsequio, dos movilidades Toyota para el trabajo de los dirigentes fabriles, y equipos técnicos para las oficinas sindicales.
Erbol
Durante un acto de homenaje al Día del Trabajador Fabril en Palacio de Gobierno, los dirigentes nacionales del sector reclamaron al gobierno por la masiva importación de productos chinos, peruanos y ropa usada que afectan a la industria nacional, pero no escucharon medidas correctivas sino una reflexión del presidente Evo Morales sobre la necesidad de continuar en la lucha contra el imperialismo y al término del acto recibieron dos vagonetas de regalo y equipamiento técnico para las oficinas sindicales.
Los fabriles recuerdan desde el 18 de mayo de 1950 la muerte de obreros en Pura Pura y con ese motivo asistieron a un acto organizado por Palacio de Gobierno, donde el secretario general de la Confederación de Fabriles de Bolivia Vicente Pacosillo dijo que pasan una situación crítica “a raíz de la invasión de la mercadería china, del contrabando, de ropa usada y cierre de fábricas”.
Agradeció al presidente Evo Morales por la promulgación de la Ley de Empresas Sociales contra aquellos malos empresarios que se aprovechan de la gente humilde, como el caso de la fábrica Incerpaz que hace 65 días los obreros se encuentra en paro de brazos caídos y con amenazas de despido.
En similar situación se encuentra la empresa Dillman y las joyerías que se encuentran en crítica situación por falta de mercados. El dirigente fabril de La Paz Mario Segundo mencionó los casos críticos de la fábrica Punto Blanco, Cerámica Victoria, Illampu y Exbol que incumplieron derechos laborales.
Solicitó se instruya al Ministerio de Trabajo, proceda a intervenir y aplicar las leyes para que cumplan con los derechos laborales. También exigió protección ante el mercado de productos chinos y “la invasión de productos peruanos y ropa usada que afecta a la estabilidad laboral”.
Por su lado el presidente Morales pidió a descartar la llamada independencia sindical, porque los obreros no son lacayos ni chitacos como en la época del neoliberalismo, cuando los dirigentes sindicales eran adenistas, emenerristas y miristas y actuaban por prebendas.
Dijo que cuando condena al capitalismo y al imperialismo no condena a los empresarios, sino porque considera que el capitalismo es el peor enemigo de la humanidad. Les recordó que en otros países no existe reunión de trabajadores con sus gobiernos, sino que la relación se hace a través de las ONGs.
La Confederación de Fabriles entregó al presidente Morales una maqueta del futuro un Instituto Tecnológico para la formación de técnicos medios, y la Escuela Sindical para la formación de nuevos cuadros políticos y sindicales.
El jefe de Estado les dio por garantizada la construcción y al final entregó de obsequio, dos movilidades Toyota para el trabajo de los dirigentes fabriles, y equipos técnicos para las oficinas sindicales.