Debutó Luca, un portero bajo la sombra del apellido Zidane
El meta (Marsella, 13-5-1998) intentó encauzar su carrera usando el apellido de su madre, Fernández, en vez del de su padre. Se estrenó ante el Villarreal.
Mario Cortegana
As
Mientras el madridismo se asomaba al partido ante el Villarreal con mirada escrutadora, pendiente de si podría sacar alguna conclusión para imaginarse el once de Kiev, Zidane sorprendió con una alineación con mayoría de titulares y un tapado, Luca Zidane (Marsella, 13-5-1998), su segundo hijo, que adelantaba así a Kiko Casilla en la que podría ser la última oportunidad del portero catalán de jugar con el Madrid.
De Luca, a excepción de los habituales de Valdebebas, se conoce poco, muy poco: el apellido y poco más. Precisamente esa es la etiqueta de la que se ha querido desprender desde sus primeras paradas, para lo que eligió como nombre artístico Luca Fernández, tal y como figura en su perfil en la web oficial del Real Madrid, en lugar de Luca Zidane. Ese desconocimiento general obedece a sus esporádicas apariciones, 20 en las dos últimas temporadas, insuficientes para calibrar el potencial de un portero modelado en La Fábrica. Allí, con Casillas como ídolo, llegó en 2004, año en el que inició una escalada de más de una década hacia la élite. Desde temprano sorprendió, además de por sus palomitas, por su juego de pies, cualidad heredada de su padre y sus hermanos, Enzo, Theo y Elyaz, todos ellos con pasado o presente en las categorías inferiores del club blanco.
El ascenso ha tenido su broche en esta 2017-2018, temporada en la que ha contado con ficha del primer equipo, con el que debutó el pasado verano en el amistoso contra las estrellas de la MLS: encajó el empate en los 18 minutos que tuvo y fue decisivo al detener el primer penalti de la tanda posterior. Sin embargo, hasta su estreno este sábado en La Cerámica, con el dorsal 30 y recibiendo dos goles (en el primero debió hacer algo más), su papel durante el curso se ha limitado a completar alguna convocatoria y a bajar con el Castilla (13 goles encajados en 13 jornadas). Internacional en las inferiores de Francia (fue campeón de la Euro Sub-17 en 2015, siendo el portero menos batido), descartando ir con España o Argelia, ha protagonizado varios fallos sonados con su equipo. Dado lo caros que están los minutos en la primera plantilla, podría salir el próximo verano para sumar horas de vuelo, un marco ideal para medirle.
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Mientras el madridismo se asomaba al partido ante el Villarreal con mirada escrutadora, pendiente de si podría sacar alguna conclusión para imaginarse el once de Kiev, Zidane sorprendió con una alineación con mayoría de titulares y un tapado, Luca Zidane (Marsella, 13-5-1998), su segundo hijo, que adelantaba así a Kiko Casilla en la que podría ser la última oportunidad del portero catalán de jugar con el Madrid.
De Luca, a excepción de los habituales de Valdebebas, se conoce poco, muy poco: el apellido y poco más. Precisamente esa es la etiqueta de la que se ha querido desprender desde sus primeras paradas, para lo que eligió como nombre artístico Luca Fernández, tal y como figura en su perfil en la web oficial del Real Madrid, en lugar de Luca Zidane. Ese desconocimiento general obedece a sus esporádicas apariciones, 20 en las dos últimas temporadas, insuficientes para calibrar el potencial de un portero modelado en La Fábrica. Allí, con Casillas como ídolo, llegó en 2004, año en el que inició una escalada de más de una década hacia la élite. Desde temprano sorprendió, además de por sus palomitas, por su juego de pies, cualidad heredada de su padre y sus hermanos, Enzo, Theo y Elyaz, todos ellos con pasado o presente en las categorías inferiores del club blanco.
El ascenso ha tenido su broche en esta 2017-2018, temporada en la que ha contado con ficha del primer equipo, con el que debutó el pasado verano en el amistoso contra las estrellas de la MLS: encajó el empate en los 18 minutos que tuvo y fue decisivo al detener el primer penalti de la tanda posterior. Sin embargo, hasta su estreno este sábado en La Cerámica, con el dorsal 30 y recibiendo dos goles (en el primero debió hacer algo más), su papel durante el curso se ha limitado a completar alguna convocatoria y a bajar con el Castilla (13 goles encajados en 13 jornadas). Internacional en las inferiores de Francia (fue campeón de la Euro Sub-17 en 2015, siendo el portero menos batido), descartando ir con España o Argelia, ha protagonizado varios fallos sonados con su equipo. Dado lo caros que están los minutos en la primera plantilla, podría salir el próximo verano para sumar horas de vuelo, un marco ideal para medirle.
