Contrataron a empresa de Groux para Odesur y éste dice que todo es legal
El senador Oscar Ortiz observa supuestos “negocios vinculados” por la contratación sin licitación ni boletas de garantía a exfuncionarios del Estado.
Erbol
El senador opositor Oscar Ortiz denunció hoy que la empresa “Kronopios” del exministro de Culturas Pablo Groux se adjudicó por contratación directa la organización del acto inaugural y clausura de los XI Juegos Suramericanos Cochabamba 2018 por 11.035.695 bolivianos. Groux en contacto con Erbol aseguró que todo el proceso fue legal y que cuando se presentó a la licitación sabía que en algún momento el tema iba a prestarse a un manejo político.
Ortiz mostró el contrato, mismo que se ampara en el DS 3097 del 15 de febrero de 2017 que autoriza al Comité Organizador a contratar de manera directa en territorio nacional o extranjero, bienes, obras y servicios necesarios para la organización y desarrollo de los juegos. El denunciante observa supuestos “negocios vinculados” por la contratación sin licitación, sin boletas de garantía y otras “irregularidades” a ex funcionarios del Estado.
La empresa de Groux efectuará servicios de organización en la inauguración, clausura en Cercado y la apertura de la Sub Villa deportiva-Villa Tunari en Cochabamba. De acuerdo con el contrato, el precio respecto al montaje y equipamiento deberá ser previsto por la empresa.
A la presentación y entrega de un plan de ejecución e inauguración del evento, la empresa debió recibir el 30% , luego del primer ensayo y puesta en escena, el 20%; después del segundo ensayo otros 20%, y tras la clausura el restante 30%, a condición de retener el 7% de la factura en señal de garantía de correcto cumplimiento.
Groux: Todo fue legal
Groux afirmó que el proceso de adjudicación ha tenido el tratamiento administrativo legal y que a través de “Kronopios” trabajó en una propuesta un año antes, tomando en cuenta los requerimientos y las expectativas que quiere la organización de estos juegos deportivos.
Dijo que antes de su adjudicación se realizaron licitaciones públicas correspondientes, pero que las propuestas no lograron cubrir las expectativas de los organizadres, por lo que, en cumplimiento de la norma, en enero de 2018, Codesur adjudicarlo como empresa de servicios.
Explicó que su propuesta está basada bajo técnicas de concepto y objetivo que requiere la organización, y la decisión de adjudicarlo no necesariamente responde a su trayectoria política como militante del proceso de cambio que “no está en duda ni fue determinante”, acotó.
Indicó que el presupuesto fue definido básicamente por los costos de producción porque se tiene que contar empresas de luces, sonidos, proyección de videos, ensayos y contratación de los artistas, éste último tomando en cuenta la diversidad cultural que tiene el país.
El exministro señaló que cuando se presentaron como empresa, sabían desde el principio que podía existir un manejo y un discurso político, pero dijo estar seguro que ofreció un proyecto según el requerimiento de los organizadores.
El acto inaugural está previsto para el 26 de mayo y la clausura para el 8 de julio en el estadio Félix Capriles de la ciudad de Cochabamba.
El senador opositor Oscar Ortiz denunció hoy que la empresa “Kronopios” del exministro de Culturas Pablo Groux se adjudicó por contratación directa la organización del acto inaugural y clausura de los XI Juegos Suramericanos Cochabamba 2018 por 11.035.695 bolivianos. Groux en contacto con Erbol aseguró que todo el proceso fue legal y que cuando se presentó a la licitación sabía que en algún momento el tema iba a prestarse a un manejo político.
Ortiz mostró el contrato, mismo que se ampara en el DS 3097 del 15 de febrero de 2017 que autoriza al Comité Organizador a contratar de manera directa en territorio nacional o extranjero, bienes, obras y servicios necesarios para la organización y desarrollo de los juegos. El denunciante observa supuestos “negocios vinculados” por la contratación sin licitación, sin boletas de garantía y otras “irregularidades” a ex funcionarios del Estado.
La empresa de Groux efectuará servicios de organización en la inauguración, clausura en Cercado y la apertura de la Sub Villa deportiva-Villa Tunari en Cochabamba. De acuerdo con el contrato, el precio respecto al montaje y equipamiento deberá ser previsto por la empresa.
A la presentación y entrega de un plan de ejecución e inauguración del evento, la empresa debió recibir el 30% , luego del primer ensayo y puesta en escena, el 20%; después del segundo ensayo otros 20%, y tras la clausura el restante 30%, a condición de retener el 7% de la factura en señal de garantía de correcto cumplimiento.
Groux: Todo fue legal
Groux afirmó que el proceso de adjudicación ha tenido el tratamiento administrativo legal y que a través de “Kronopios” trabajó en una propuesta un año antes, tomando en cuenta los requerimientos y las expectativas que quiere la organización de estos juegos deportivos.
Dijo que antes de su adjudicación se realizaron licitaciones públicas correspondientes, pero que las propuestas no lograron cubrir las expectativas de los organizadres, por lo que, en cumplimiento de la norma, en enero de 2018, Codesur adjudicarlo como empresa de servicios.
Explicó que su propuesta está basada bajo técnicas de concepto y objetivo que requiere la organización, y la decisión de adjudicarlo no necesariamente responde a su trayectoria política como militante del proceso de cambio que “no está en duda ni fue determinante”, acotó.
Indicó que el presupuesto fue definido básicamente por los costos de producción porque se tiene que contar empresas de luces, sonidos, proyección de videos, ensayos y contratación de los artistas, éste último tomando en cuenta la diversidad cultural que tiene el país.
El exministro señaló que cuando se presentaron como empresa, sabían desde el principio que podía existir un manejo y un discurso político, pero dijo estar seguro que ofreció un proyecto según el requerimiento de los organizadores.
El acto inaugural está previsto para el 26 de mayo y la clausura para el 8 de julio en el estadio Félix Capriles de la ciudad de Cochabamba.
