Dos muertos y una treintena de heridos en un atropello masivo en Alemania
La policía ha confirmado que el conductor se ha suicidado. La prensa informa que tenía problemas psicológicos
Ana Carbajosa
Agencias
Berlín
La embestida de una furgoneta en el centro de Münster ha causado al menos dos víctimas mortales y ha resucitado los temores en Alemania de que se tratara de un nuevo ataque terrorista. Las autoridades regionales han descartado sin embargo seis horas después del atropello una motivación terrorista. Medios alemanes informan de que el presunto autor del atropello masivo podría ser un alemán con problemas psicológicos. La policía ha evacuado el centro histórico de la ciudad del noroeste del país y ha pedido desde un primer momento prudencia a la hora de especular sobre las posibles causas del incidente.
El ministro del Interior de Renania del Norte-Westfalia, Herbert Raul, ha acudido al lugar del siniestro y en una rueda de prensa improvisada ha indicado que “nada indica” que hubiera una motivación terrorista detrás del atropello. Ha asegurado también que el autor es un hombre de nacionalidad alemana. Las víctimas mortales ascienden a tres, según el balance oficial que ha ofrecido el ministro regional y que incluye al conductor que se quitó la vida. El atropello ha causado además una treintena de heridos, seis de ellos graves.
Dos muertos y una treintena de heridos en un atropello masivo en Alemania
Sobre las tres y media de la tarde, llegaban las primeras alertas que informaban de que un vehículo había arrollado a una multitud en una soleada terraza de un bar en Münster, una ciudad del Land de Renania del norte-Westfalia, en el oeste del país. La policía local pidió a través de las redes sociales a los ciudadanos que se fueran a sus casas y evacuaran el centro urbano. En las redes sociales, la policía de Münster pidió reiteradamente que se evitara la propagación de rumores.
Bomberos, ambulancias y Policía tomaron el centro de la ciudad, que quedó acordonado. Helicópteros de la policía sobrevolaron la zona y sobre el terreno, los agentes buscaron explosivos, según informó la prensa local.
En seguida, fuentes policiales informaron a los medios alemanes de que el presunto autor del atropello se habría quitado la vida y de que su cuerpo sin vida permanecía dentro del vehículo. Más tarde, la edición digital del diario muniqués Süddeutsche Zeitung y las cadenas públicas NDR y WDR aseguraban que el autor del atropello es un alemán con problemas psicológicos y de 48 años.
La policía ha registrado su domicilio en busca de explosivos, según la misma fuente. Michael Stempfle, experto en terrorismo de la cadena de televisión pública ARD mostró también su escepticismo acerca de que pudiera tratarse de un ataque terrorista. “El hecho de que el culpable se disparara a sí mismo es inusual”, estimó Stempfle.
Münster es una ciudad de 300.000 habitantes y el atropello se produjo en la terraza de un conocido restaurante, el Kiepenkerl, frecuentado por la población local y por turistas y que recibe el nombre de la famosa estatua situada en el centro histórico de la ciudad. En esa zona, la gente pasea y se reúne cuando llega el buen tiempo. Es además una importante ciudad universitaria, que cuenta con unos 50.000 estudiantes.
Los mensajes de solidaridad con las víctimas y sus familiares no tardaron en llegar. La canciller alemana, Angela Merkel, ha expresado sus condolencias en un comunicado en el que asegura que “haremos todo lo posible para esclarecer lo ocurrido y para atender a las víctimas y a sus familiares”. Merkel felicitó y agradeció además a la policía por su labor. Representantes políticos de numerosos países del mundo, también de España, expresaron también muestras de apoyo.
El atropello ha coincidido en el día y la hora con la convocatoria de una manifestación por los derechos del pueblo kurdo, por lo que numerosos agentes estaban desplegados en la zona en ese momento.
El incidente se produce además un año después de que un camión arrollara a una multitud en Estocolmo y matara a cinco personas, lo que desató los temores de que el atropello de Münster tratara de replicar aquel episodio. Ha resucitado también los recuerdos de diciembre de 2016, cuando un camión conducido por un terrorista islamista se empotró en Berlín contra un mercadillo navideño y mató a 11 personas.
Ana Carbajosa
Agencias
Berlín
La embestida de una furgoneta en el centro de Münster ha causado al menos dos víctimas mortales y ha resucitado los temores en Alemania de que se tratara de un nuevo ataque terrorista. Las autoridades regionales han descartado sin embargo seis horas después del atropello una motivación terrorista. Medios alemanes informan de que el presunto autor del atropello masivo podría ser un alemán con problemas psicológicos. La policía ha evacuado el centro histórico de la ciudad del noroeste del país y ha pedido desde un primer momento prudencia a la hora de especular sobre las posibles causas del incidente.
El ministro del Interior de Renania del Norte-Westfalia, Herbert Raul, ha acudido al lugar del siniestro y en una rueda de prensa improvisada ha indicado que “nada indica” que hubiera una motivación terrorista detrás del atropello. Ha asegurado también que el autor es un hombre de nacionalidad alemana. Las víctimas mortales ascienden a tres, según el balance oficial que ha ofrecido el ministro regional y que incluye al conductor que se quitó la vida. El atropello ha causado además una treintena de heridos, seis de ellos graves.
Dos muertos y una treintena de heridos en un atropello masivo en Alemania
Sobre las tres y media de la tarde, llegaban las primeras alertas que informaban de que un vehículo había arrollado a una multitud en una soleada terraza de un bar en Münster, una ciudad del Land de Renania del norte-Westfalia, en el oeste del país. La policía local pidió a través de las redes sociales a los ciudadanos que se fueran a sus casas y evacuaran el centro urbano. En las redes sociales, la policía de Münster pidió reiteradamente que se evitara la propagación de rumores.
Bomberos, ambulancias y Policía tomaron el centro de la ciudad, que quedó acordonado. Helicópteros de la policía sobrevolaron la zona y sobre el terreno, los agentes buscaron explosivos, según informó la prensa local.
En seguida, fuentes policiales informaron a los medios alemanes de que el presunto autor del atropello se habría quitado la vida y de que su cuerpo sin vida permanecía dentro del vehículo. Más tarde, la edición digital del diario muniqués Süddeutsche Zeitung y las cadenas públicas NDR y WDR aseguraban que el autor del atropello es un alemán con problemas psicológicos y de 48 años.
La policía ha registrado su domicilio en busca de explosivos, según la misma fuente. Michael Stempfle, experto en terrorismo de la cadena de televisión pública ARD mostró también su escepticismo acerca de que pudiera tratarse de un ataque terrorista. “El hecho de que el culpable se disparara a sí mismo es inusual”, estimó Stempfle.
Münster es una ciudad de 300.000 habitantes y el atropello se produjo en la terraza de un conocido restaurante, el Kiepenkerl, frecuentado por la población local y por turistas y que recibe el nombre de la famosa estatua situada en el centro histórico de la ciudad. En esa zona, la gente pasea y se reúne cuando llega el buen tiempo. Es además una importante ciudad universitaria, que cuenta con unos 50.000 estudiantes.
Los mensajes de solidaridad con las víctimas y sus familiares no tardaron en llegar. La canciller alemana, Angela Merkel, ha expresado sus condolencias en un comunicado en el que asegura que “haremos todo lo posible para esclarecer lo ocurrido y para atender a las víctimas y a sus familiares”. Merkel felicitó y agradeció además a la policía por su labor. Representantes políticos de numerosos países del mundo, también de España, expresaron también muestras de apoyo.
El atropello ha coincidido en el día y la hora con la convocatoria de una manifestación por los derechos del pueblo kurdo, por lo que numerosos agentes estaban desplegados en la zona en ese momento.
El incidente se produce además un año después de que un camión arrollara a una multitud en Estocolmo y matara a cinco personas, lo que desató los temores de que el atropello de Münster tratara de replicar aquel episodio. Ha resucitado también los recuerdos de diciembre de 2016, cuando un camión conducido por un terrorista islamista se empotró en Berlín contra un mercadillo navideño y mató a 11 personas.