Cristiano Ronaldo: “El aplauso fue un momento increíble. Gracias”
El madridista, agradecido por el reconocimiento de la afición rival. “Ha sido uno de los goles más bonitos de la historia”, coinciden madridistas y juventinos
Eleonora Giovio
Turín, El País
Hay aventuras de verano, ligues que florecen con la primavera y hay amores que resisten a todo, a la edad, a las arrugas, al calor, al frío, a la lluvia. Hay amores que nunca se oxidan, como el de Cristiano Ronaldo con la Champions y con el gol. Anoche en Turín encontró, encima, lo que llevaba años persiguiendo. Un gol para enmarcar, un gol de chilena. Lo marcó en el minuto 64. Zidane se llevó una mano a la calva y otra a la boca, incrédulo, maravillado. Le faltó decir, y seguro que lo pensó: madre mía lo que ha hecho. “Soy entrenador del Madrid pero también un aficionado al fútbol y en ese momento pensé lo que todos... ha sido un gran gesto”, dijo el técnico francés. Los 40.849 del Juventus Stadium se pusieron en pie para aplaudir al portugués. Fue un aplauso de un minuto.
“El aplauso fue un momento increíble, grazie [lo dijo en italiano] a todos los aficionados de la Juve. Nunca me había pasado esto ni de lejos en mi carrera. No esperaba marcar un gol así, ha sido increíble”, declaró CR a ESPN. El que le rindió la hinchada juventina fue un tributo reservado a un rematador que nunca pierde el hambre y que siempre quiere más. Un rematador que se desquicia cuando falla porque vive del gol. Un delantero todoterreno que cada vez se aleja más de la banda para acercarse al área. Un delantero total que se ha reinventado al darse cuenta de que su velocidad no es la misma que la de hace cinco o seis años. Incluso Buffon parecía decir: qué iba a hacer yo…. El gol de Cristiano llegó, además, cuando la Juve apretaba, incansable, buscando el empate. Así de cruel es el fútbol y así de castigador es el portugués. “Lo vi desde una posición muy buena, es un golazo y que el público te lo reconozca es un premio”, dijo Sergio Ramos al final del partido.
Buffon, que se quedó a felicitar a Cristiano Ronaldo cuando el árbitro pitó el final, equiparó luego al portugués y a Leo Messi a Pelé y Maradona. “Ronaldo es un jugador de nivel internacional, junto a Messi está logrando las victorias más importantes de su equipo, y el valor de ambos debe equipararse al de Maradona o Pelé por lo que representan para los triunfos de sus respectivos equipos. Hemos jugado contra campeones de un nivel increíble. Hablamos de alguien que hace 500 goles en su carrera, un motivó habrá”, aseguró el portero y capitán de la Juve. “Cuando juegas contra uno de los mejores del mundo como Cristiano necesitas la perfección. Si le dejas espacio te castiga. Y después se ha inventado un gol que quedará en la historia”, apuntó Barzagli.
De Turín se marchó Cristiano con un doblete. El primer tanto lo había marcado a los tres minutos. El silencio en el estadio fue tan irreal que parecía que el gol había sido anulado y que el portugués estaba corriendo no para celebrarlo sino para quejarse de algo con el linier. Pero no: fue gol. Un gol que rompió con la parafernalia que se había montado en el estadio hasta ese momento. La coreografía, la música a toda pastilla durante el calentamiento bajo una lluvia insistente, el vozarrón del speaker que indicaba cómo y cuándo cantar y levantar las banderitas, el juego de luces durante la alineación. No se vio ni una sola imagen por los videomarcadores de la final de Cardiff, ni siquiera la del gol de Mandzukic. Todo borrado; de la vista, pero no de los recuerdos.
El que anoche rompió los tímpanos de la hinchada bianconera fue Cristiano Ronaldo que nunca falla en sus citas con Europa. Con la puntera empujó un pase de Isco, que había recibido el balón de Marcelo. Fue el gol número 13 del portugués en Champions en lo que va de temporada, el 118 en la máxima competición. El de chilena, el 14 que sube el botín a 119.
Allegri: "Carvajal le mete un pase letal”
Ya lo había advertido Luka Modric en la víspera: “Cristiano tiene mucha confianza en sí mismo y es muy importante tenerle así de enchufado. Con un Cristiano así tenemos muchas posibilidades de pasar esta eliminatoria”. El portugués, que se pasó dormitando la primera parte de la temporada, salió del letargo a mediados de enero. En 2018 ha marcado 23 goles y en Champions dejó su huella en los octavos contra el PSG.
Le sobra confianza en los gestos y en el remate. Mientras bajaba de la rampa del Juventus Stadium guiñaba el ojo a las cámaras. Se lo volvió a guiñar al balón en cuanto empezó el partido y lo atrajo al pie cual imán para rematar de chilena un pase de Carvajal. Ese tanto abrió la caja de los truenos, Marcelo firmó el 0-3 a pase de Cristiano.
“No sé si es el gol más bonito de la historia, pero ha sido un gol extraordinario… Desde hace un tiempo, para mí Cristiano es el mejor delantero centro que hay, sin quitar méritos a los demás. Se ha transformado en un nueve, su lucidez y habilidad en el finalizar las jugadas es algo extraordinario”, le piropeó Allegri que no se olvidó de Carvajal. “El balón que le mete es letal”, dijo el técnico italiano. “El pase es bueno, pero lo que hace Cristiano es increíble, quedará para la historia”, respondió el lateral derecho.
A Zidane le preguntaron varias veces si el gol de chilena de Cristiano se podía comparar con el suyo en Glasgow. “Se puede comparar, sí, pero el mío es más bonito... pero el de Cristiano este es el último y es el que vale”, bromeó ZZ. No paraba de reírse el técnico francés. “Cristiano hace cosas que sólo puede hacer él. Podemos podemos decir que es uno de los goles más bonitos de la historia del fútbol, sí, aunque puede que no más bonito que el mío en Glasgow, que lo dije antes en castellano y ahora os lo repito en italiano”, comentó.El Madrid no ganaba en Turín desde 1962, con un gol de Di Stéfano. Otro homenaje para Cristiano al que el presidente Florentino Pérez siempre ha definido como al Di Stéfano moderno.
Anoche los blancos expugnaron el Juventus Stadium gracias a su depredador que rompió el partido con un golazo de chilena. La Juve había aguantando hasta entonces. “Lotta col cuore, sia l'Europa del nostro colore" [Lucha con el corazón, haz que Europa lleve nuestros colores] fue la pancarta con la que el fondo de la Juve recibió a los suyos. Corazón puso, desde luego, el equipo de Allegri. Pero no hay coraza que valga cuando Cristiano se empeña en prolongar su amor con Europa y con la Champions.
Eleonora Giovio
Turín, El País
Hay aventuras de verano, ligues que florecen con la primavera y hay amores que resisten a todo, a la edad, a las arrugas, al calor, al frío, a la lluvia. Hay amores que nunca se oxidan, como el de Cristiano Ronaldo con la Champions y con el gol. Anoche en Turín encontró, encima, lo que llevaba años persiguiendo. Un gol para enmarcar, un gol de chilena. Lo marcó en el minuto 64. Zidane se llevó una mano a la calva y otra a la boca, incrédulo, maravillado. Le faltó decir, y seguro que lo pensó: madre mía lo que ha hecho. “Soy entrenador del Madrid pero también un aficionado al fútbol y en ese momento pensé lo que todos... ha sido un gran gesto”, dijo el técnico francés. Los 40.849 del Juventus Stadium se pusieron en pie para aplaudir al portugués. Fue un aplauso de un minuto.
“El aplauso fue un momento increíble, grazie [lo dijo en italiano] a todos los aficionados de la Juve. Nunca me había pasado esto ni de lejos en mi carrera. No esperaba marcar un gol así, ha sido increíble”, declaró CR a ESPN. El que le rindió la hinchada juventina fue un tributo reservado a un rematador que nunca pierde el hambre y que siempre quiere más. Un rematador que se desquicia cuando falla porque vive del gol. Un delantero todoterreno que cada vez se aleja más de la banda para acercarse al área. Un delantero total que se ha reinventado al darse cuenta de que su velocidad no es la misma que la de hace cinco o seis años. Incluso Buffon parecía decir: qué iba a hacer yo…. El gol de Cristiano llegó, además, cuando la Juve apretaba, incansable, buscando el empate. Así de cruel es el fútbol y así de castigador es el portugués. “Lo vi desde una posición muy buena, es un golazo y que el público te lo reconozca es un premio”, dijo Sergio Ramos al final del partido.
Buffon, que se quedó a felicitar a Cristiano Ronaldo cuando el árbitro pitó el final, equiparó luego al portugués y a Leo Messi a Pelé y Maradona. “Ronaldo es un jugador de nivel internacional, junto a Messi está logrando las victorias más importantes de su equipo, y el valor de ambos debe equipararse al de Maradona o Pelé por lo que representan para los triunfos de sus respectivos equipos. Hemos jugado contra campeones de un nivel increíble. Hablamos de alguien que hace 500 goles en su carrera, un motivó habrá”, aseguró el portero y capitán de la Juve. “Cuando juegas contra uno de los mejores del mundo como Cristiano necesitas la perfección. Si le dejas espacio te castiga. Y después se ha inventado un gol que quedará en la historia”, apuntó Barzagli.
De Turín se marchó Cristiano con un doblete. El primer tanto lo había marcado a los tres minutos. El silencio en el estadio fue tan irreal que parecía que el gol había sido anulado y que el portugués estaba corriendo no para celebrarlo sino para quejarse de algo con el linier. Pero no: fue gol. Un gol que rompió con la parafernalia que se había montado en el estadio hasta ese momento. La coreografía, la música a toda pastilla durante el calentamiento bajo una lluvia insistente, el vozarrón del speaker que indicaba cómo y cuándo cantar y levantar las banderitas, el juego de luces durante la alineación. No se vio ni una sola imagen por los videomarcadores de la final de Cardiff, ni siquiera la del gol de Mandzukic. Todo borrado; de la vista, pero no de los recuerdos.
El que anoche rompió los tímpanos de la hinchada bianconera fue Cristiano Ronaldo que nunca falla en sus citas con Europa. Con la puntera empujó un pase de Isco, que había recibido el balón de Marcelo. Fue el gol número 13 del portugués en Champions en lo que va de temporada, el 118 en la máxima competición. El de chilena, el 14 que sube el botín a 119.
Allegri: "Carvajal le mete un pase letal”
Ya lo había advertido Luka Modric en la víspera: “Cristiano tiene mucha confianza en sí mismo y es muy importante tenerle así de enchufado. Con un Cristiano así tenemos muchas posibilidades de pasar esta eliminatoria”. El portugués, que se pasó dormitando la primera parte de la temporada, salió del letargo a mediados de enero. En 2018 ha marcado 23 goles y en Champions dejó su huella en los octavos contra el PSG.
Le sobra confianza en los gestos y en el remate. Mientras bajaba de la rampa del Juventus Stadium guiñaba el ojo a las cámaras. Se lo volvió a guiñar al balón en cuanto empezó el partido y lo atrajo al pie cual imán para rematar de chilena un pase de Carvajal. Ese tanto abrió la caja de los truenos, Marcelo firmó el 0-3 a pase de Cristiano.
“No sé si es el gol más bonito de la historia, pero ha sido un gol extraordinario… Desde hace un tiempo, para mí Cristiano es el mejor delantero centro que hay, sin quitar méritos a los demás. Se ha transformado en un nueve, su lucidez y habilidad en el finalizar las jugadas es algo extraordinario”, le piropeó Allegri que no se olvidó de Carvajal. “El balón que le mete es letal”, dijo el técnico italiano. “El pase es bueno, pero lo que hace Cristiano es increíble, quedará para la historia”, respondió el lateral derecho.
A Zidane le preguntaron varias veces si el gol de chilena de Cristiano se podía comparar con el suyo en Glasgow. “Se puede comparar, sí, pero el mío es más bonito... pero el de Cristiano este es el último y es el que vale”, bromeó ZZ. No paraba de reírse el técnico francés. “Cristiano hace cosas que sólo puede hacer él. Podemos podemos decir que es uno de los goles más bonitos de la historia del fútbol, sí, aunque puede que no más bonito que el mío en Glasgow, que lo dije antes en castellano y ahora os lo repito en italiano”, comentó.
Anoche los blancos expugnaron el Juventus Stadium gracias a su depredador que rompió el partido con un golazo de chilena. La Juve había aguantando hasta entonces. “Lotta col cuore, sia l'Europa del nostro colore" [Lucha con el corazón, haz que Europa lleve nuestros colores] fue la pancarta con la que el fondo de la Juve recibió a los suyos. Corazón puso, desde luego, el equipo de Allegri. Pero no hay coraza que valga cuando Cristiano se empeña en prolongar su amor con Europa y con la Champions.