"Antes de morir, mi madre me pidió que no pateara más penales": la confesión del autor de uno de los peores fallos de la historia de los Mundiales
A ocho años de aquel partido, Asamoah Gyan confesó que "fue uno de los momentos más difíciles que viví"
Infobae
A menos de dos meses para el inicio de un nuevo mundial de fútbol, Asamoah Gyan reabrió una vieja herida en una entrevista con el programa español "El Enganche", en la que recordó su penal errado frente a Uruguay en los cuartos de final de la cita mundialista de Sudáfrica 2010.
Ghana iba a ser el primer equipo africano en jugar las semifinales de un Mundial, el pueblo ya lo saboreaba, ya que a falta de un minuto para que termine el segundo tiempo extra, el delantero tenía la chance de convertir el tanto que iba a sentenciar la victoria por 2-1.
Se paró frente al balón, Fernando Muslera le proponía un reto de miradas del otro lado, hasta que el árbitro dio la orden. "Yo no suelo patear alto, pero cuando lo erré quedé en shock y no sabía qué hacer", explicó el ex jugador del Sunderland.
Play
El partido quedaba igualado y la serie de penales fue para los uruguayos, quienes pasaron a las semifinales. En aquella tanda, Gyan se desquitó al anotar, pero ya era tarde: "Si hubiera errado ese, mi carrera habría terminado en ese momento porque el penal anterior estaba en mi cabeza y mi corazón".
"En el primer partido ante Serbia marqué de penal y en el segundo, ante Australia, también. Por eso no dudé contra Uruguay, tenía mucha experiencia en los penales", reconoció.
"Recuerdo que ese partido lo jugamos bien. Éramos los únicos africanos que estábamos ahí y al fallar ese penal pensé que les fallé a todos los africanos. En la calle, incluso la gente que no sabe de fútbol me señala como 'el que falló el penal'", se lamentó el que supo ser capitán de su selección.
Un momento que marcó un antes y un después en su vida tanto en lo deportivo como en lo personal. "Antes de morir, mi madre me pidió que no pateara más penales con Ghana. Después de aquel en el Mundial pateé uno más y también lo fallé por la Copa África. Ahí le prometí que no iba a patear más y por eso tengo que cumplir mi promesa para que descanse en paz".
"El video del penal lo vi mil veces y es uno de los momentos más difíciles que viví", aseguró el ghanés, quien sin embargo reconoció que, "el penal fallado me hizo muy famoso, de una manera diferente, pero lo conseguí. Gracias a ese penal conocí a Mandela que incluso sabía mi nombre".
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A menos de dos meses para el inicio de un nuevo mundial de fútbol, Asamoah Gyan reabrió una vieja herida en una entrevista con el programa español "El Enganche", en la que recordó su penal errado frente a Uruguay en los cuartos de final de la cita mundialista de Sudáfrica 2010.
Ghana iba a ser el primer equipo africano en jugar las semifinales de un Mundial, el pueblo ya lo saboreaba, ya que a falta de un minuto para que termine el segundo tiempo extra, el delantero tenía la chance de convertir el tanto que iba a sentenciar la victoria por 2-1.
Se paró frente al balón, Fernando Muslera le proponía un reto de miradas del otro lado, hasta que el árbitro dio la orden. "Yo no suelo patear alto, pero cuando lo erré quedé en shock y no sabía qué hacer", explicó el ex jugador del Sunderland.
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El partido quedaba igualado y la serie de penales fue para los uruguayos, quienes pasaron a las semifinales. En aquella tanda, Gyan se desquitó al anotar, pero ya era tarde: "Si hubiera errado ese, mi carrera habría terminado en ese momento porque el penal anterior estaba en mi cabeza y mi corazón".
"En el primer partido ante Serbia marqué de penal y en el segundo, ante Australia, también. Por eso no dudé contra Uruguay, tenía mucha experiencia en los penales", reconoció.
"Recuerdo que ese partido lo jugamos bien. Éramos los únicos africanos que estábamos ahí y al fallar ese penal pensé que les fallé a todos los africanos. En la calle, incluso la gente que no sabe de fútbol me señala como 'el que falló el penal'", se lamentó el que supo ser capitán de su selección.
Un momento que marcó un antes y un después en su vida tanto en lo deportivo como en lo personal. "Antes de morir, mi madre me pidió que no pateara más penales con Ghana. Después de aquel en el Mundial pateé uno más y también lo fallé por la Copa África. Ahí le prometí que no iba a patear más y por eso tengo que cumplir mi promesa para que descanse en paz".
"El video del penal lo vi mil veces y es uno de los momentos más difíciles que viví", aseguró el ghanés, quien sin embargo reconoció que, "el penal fallado me hizo muy famoso, de una manera diferente, pero lo conseguí. Gracias a ese penal conocí a Mandela que incluso sabía mi nombre".