1x1 del Barcelona: Naufragio estrepitoso de Messi en Roma
El Barça se hizo el harakiri con un planteamiento timorato de su entrenador y con una flojísima actitud de sus jugadores. Umtiti, otra vez señalado.
Juan Jiménez
As
Valverde no hizo probaturas y repitió el once de la ida en la que iba a ser nueva noche negra del Barça en Europa. Alba, Busquets e Iniesta regresaron al equipo. Sergi Roberto volvió a jugar como interior, en su posición preferida para hacer ‘doble lateral’ con Semedo. El Barça fue un desastre que individualmente se resume así.
Ter Stegen. Sin milagros. Con aquellas viejas dudas de las salidas. En la jugada del 1-0 pensó que llegarían Alba o Umtiti…, él tampoco salió y marcó Dzeko. Adivinó pero no paró el gol de De Rossi
Semedo. Sufrió en la salida de balón ante la presión de Nainggolan y Kolarov. Intentó corregir los errores de los centrales
Piqué. Superadísimo por Dzeko. No sólo en la jugada del penalti sino en todos los duelos. El bosnio le tomó claramente la medida. Jugó sin confianza.
Umtiti. Penoso. Un jugador superado por los acontecimientos. Una de sus peores noches como azulgrana.
Jordi Alba. Despistado en el primer gol, la sociedad con Umtiti flaquea por momentos. Sólo se animó en los últimos minutos.
Sergi Roberto. Remató en los primeros minutos de la primera parte. Intentó competir, lo que no hacía el resto de sus compañeros.
Busquets. No estaba al cien por cien. Superado ante un partido en el que el Barça no tenía el balón, Nainggolan, Strootman y De Rossi se comieron el centro del campo azulgrana.
Iniesta. Su adiós a la Champions pudo ser muy triste. Con una actuación flojísima, lejos de la intensidad de los jugadores de la Roma. Su imagen en los videomarcadores, durísima.
Rakitic. Intentó poner algo de cordura en el descontrol azulgrana pero fue imposible organizar un equipo destrozado.
Messi. Desaparecido. Mal en las faltas y con muy poco liderazgo. Se espera mucho más de él en noches así. Tuvo un par de arreones casi al final pero cuando sales a que pase el tiempo lo normal es que luego no puedas arreglarlo. El argentino no estuvo ayer.
Suárez. Peleó sin acierto y apenas tuvo opciones de gol. Sin embargo, y pese a ser el delantero, no fue el principal culpable.
Los cambios fueron André Gomes, que salió a mil revoluciones menos que el partido, y Alcácer y Dembéle, a los que se agarró Valverde para salvarse de su primera gran caída. No les dio tiempo a hacer nada como es lógico aunque se les vio correr como otros no hicieron durante el partido
As
Valverde no hizo probaturas y repitió el once de la ida en la que iba a ser nueva noche negra del Barça en Europa. Alba, Busquets e Iniesta regresaron al equipo. Sergi Roberto volvió a jugar como interior, en su posición preferida para hacer ‘doble lateral’ con Semedo. El Barça fue un desastre que individualmente se resume así.
Ter Stegen. Sin milagros. Con aquellas viejas dudas de las salidas. En la jugada del 1-0 pensó que llegarían Alba o Umtiti…, él tampoco salió y marcó Dzeko. Adivinó pero no paró el gol de De Rossi
Semedo. Sufrió en la salida de balón ante la presión de Nainggolan y Kolarov. Intentó corregir los errores de los centrales
Piqué. Superadísimo por Dzeko. No sólo en la jugada del penalti sino en todos los duelos. El bosnio le tomó claramente la medida. Jugó sin confianza.
Umtiti. Penoso. Un jugador superado por los acontecimientos. Una de sus peores noches como azulgrana.
Jordi Alba. Despistado en el primer gol, la sociedad con Umtiti flaquea por momentos. Sólo se animó en los últimos minutos.
Sergi Roberto. Remató en los primeros minutos de la primera parte. Intentó competir, lo que no hacía el resto de sus compañeros.
Busquets. No estaba al cien por cien. Superado ante un partido en el que el Barça no tenía el balón, Nainggolan, Strootman y De Rossi se comieron el centro del campo azulgrana.
Iniesta. Su adiós a la Champions pudo ser muy triste. Con una actuación flojísima, lejos de la intensidad de los jugadores de la Roma. Su imagen en los videomarcadores, durísima.
Rakitic. Intentó poner algo de cordura en el descontrol azulgrana pero fue imposible organizar un equipo destrozado.
Messi. Desaparecido. Mal en las faltas y con muy poco liderazgo. Se espera mucho más de él en noches así. Tuvo un par de arreones casi al final pero cuando sales a que pase el tiempo lo normal es que luego no puedas arreglarlo. El argentino no estuvo ayer.
Suárez. Peleó sin acierto y apenas tuvo opciones de gol. Sin embargo, y pese a ser el delantero, no fue el principal culpable.
Los cambios fueron André Gomes, que salió a mil revoluciones menos que el partido, y Alcácer y Dembéle, a los que se agarró Valverde para salvarse de su primera gran caída. No les dio tiempo a hacer nada como es lógico aunque se les vio correr como otros no hicieron durante el partido
