UEFA estudia mañana si multar al PSG o cerrar parte de su estadio
París, AS
Una fuerte multa o una sanción más severa, como el cierre parcial de su campo o la exclusión de la competición, son parte de los castigos que la Comisión de Disciplina de la UEFA sopesará imponer al PSG en su reunión de mañana, en la que también tratará los graves incidentes ocurridos recientemente en Bilbao.
Una comisión plural, integrada por diez miembros entre los que hay juristas, secretarios federativos y exjugadores, estudiará los expedientes tras los sucesos del Parque de los Príncipes de París en el PSG-Real Madrid, el pasado día 6, y los de San Mamés el día 15 en el Athletic-Marsella, tres semanas después de la muerte de un ertzaina cerca del campo antes de jugar con el Spartak de Moscú.
En el primer caso la UEFA responsabiliza al PSG de encendido de bengalas, hecho que llevó al árbitro a detener el choque en dos ocasiones (m.48 y m.66) y utilización de un puntero láser desde la grada, además de insuficiente organización y bloqueo de escaleras. Todo ello contraviene el artículo 16 del Reglamento Disciplinario de la UEFA, más el 33 y el 38 de su normativa de seguridad, por parte del PSG, que es reincidente y ya fue multado con 40.000 euros por bengalas en la fase de grupos de la Liga de Campeones contra el Bayern de Múnich.
La reincidencia es una circunstancia agravante según el código disciplinario de la UEFA, una normativa que "no es cerrada, ni estándar" y que permite a su órgano de disciplina aplicarlo para resolver cada caso, según los hechos y los informes, indicaron a EFE fuentes jurídicas. Dada la cantidad de bengalas, la humareda y el hecho de que el árbitro alemán Felix Brych parara dos veces el juego, es probable que la comisión no aplique la multa de 500 euros por bengala que establece el anexo A del reglamento, sino que adopte una decisión genérica sobre el hecho.
El artículo 16 (2) del reglamento disciplinario de UEFA dicta que los clubes son responsables del comportamiento de sus aficionados y pueden ser objeto de sanción incluso aunque prueben falta de negligencia en la organización en situaciones como encendido de bengalas, uso de punteros láser y lanzamiento de objetos. Días después del PSG-Real Madrid la policía francesa prohibió la entrada a recintos deportivos a siete ultras galos por la introducción y encendido bengalas, que cifró en cerca de 150.
Otro de los expedientes que el órgano de disciplina prevé resolver mañana es el incoado hace días por los sucesos en el Athletic-Marsella de la Liga Europa, en el que dos agentes de la Ertzaintza resultaron heridos dentro de San Mamés, uno de ellos por un objeto punzante en el cuello.. La primera agresión de los seguidores franceses se produjo a la entrada del campo, al cuarto de hora de iniciarse el partido, después de que el vigilante llamara la atención a unos aficionados franceses y tras esto se produjo el ataque al otro.
Antes del comienzo del encuentro los seguidores del Marsella encendieron bengalas y una de ellas cayó al anillo inferior. Después se produjo una pequeña carga de la Ertzainzta en la zona donde había unos 800 aficionados franceses.
Éstos accedieron escoltados y sin incidentes al estadio de San Mamés, en cuyas inmediaciones falleció tres semanas antes un agente de la policía autónoma durante los enfrentamiento entre seguidores radicales del Athletic y el Spartak de Moscú, en la jornada previa de la Liga Europa. La UEFA abrió una investigación sobre este caso, para recabar información adicional, ya que los hechos ocurrieron fuera del estadio y no es competente sobre lo que pasa en esa zona.
Una fuerte multa o una sanción más severa, como el cierre parcial de su campo o la exclusión de la competición, son parte de los castigos que la Comisión de Disciplina de la UEFA sopesará imponer al PSG en su reunión de mañana, en la que también tratará los graves incidentes ocurridos recientemente en Bilbao.
Una comisión plural, integrada por diez miembros entre los que hay juristas, secretarios federativos y exjugadores, estudiará los expedientes tras los sucesos del Parque de los Príncipes de París en el PSG-Real Madrid, el pasado día 6, y los de San Mamés el día 15 en el Athletic-Marsella, tres semanas después de la muerte de un ertzaina cerca del campo antes de jugar con el Spartak de Moscú.
En el primer caso la UEFA responsabiliza al PSG de encendido de bengalas, hecho que llevó al árbitro a detener el choque en dos ocasiones (m.48 y m.66) y utilización de un puntero láser desde la grada, además de insuficiente organización y bloqueo de escaleras. Todo ello contraviene el artículo 16 del Reglamento Disciplinario de la UEFA, más el 33 y el 38 de su normativa de seguridad, por parte del PSG, que es reincidente y ya fue multado con 40.000 euros por bengalas en la fase de grupos de la Liga de Campeones contra el Bayern de Múnich.
La reincidencia es una circunstancia agravante según el código disciplinario de la UEFA, una normativa que "no es cerrada, ni estándar" y que permite a su órgano de disciplina aplicarlo para resolver cada caso, según los hechos y los informes, indicaron a EFE fuentes jurídicas. Dada la cantidad de bengalas, la humareda y el hecho de que el árbitro alemán Felix Brych parara dos veces el juego, es probable que la comisión no aplique la multa de 500 euros por bengala que establece el anexo A del reglamento, sino que adopte una decisión genérica sobre el hecho.
El artículo 16 (2) del reglamento disciplinario de UEFA dicta que los clubes son responsables del comportamiento de sus aficionados y pueden ser objeto de sanción incluso aunque prueben falta de negligencia en la organización en situaciones como encendido de bengalas, uso de punteros láser y lanzamiento de objetos. Días después del PSG-Real Madrid la policía francesa prohibió la entrada a recintos deportivos a siete ultras galos por la introducción y encendido bengalas, que cifró en cerca de 150.
Otro de los expedientes que el órgano de disciplina prevé resolver mañana es el incoado hace días por los sucesos en el Athletic-Marsella de la Liga Europa, en el que dos agentes de la Ertzaintza resultaron heridos dentro de San Mamés, uno de ellos por un objeto punzante en el cuello.. La primera agresión de los seguidores franceses se produjo a la entrada del campo, al cuarto de hora de iniciarse el partido, después de que el vigilante llamara la atención a unos aficionados franceses y tras esto se produjo el ataque al otro.
Antes del comienzo del encuentro los seguidores del Marsella encendieron bengalas y una de ellas cayó al anillo inferior. Después se produjo una pequeña carga de la Ertzainzta en la zona donde había unos 800 aficionados franceses.
Éstos accedieron escoltados y sin incidentes al estadio de San Mamés, en cuyas inmediaciones falleció tres semanas antes un agente de la policía autónoma durante los enfrentamiento entre seguidores radicales del Athletic y el Spartak de Moscú, en la jornada previa de la Liga Europa. La UEFA abrió una investigación sobre este caso, para recabar información adicional, ya que los hechos ocurrieron fuera del estadio y no es competente sobre lo que pasa en esa zona.