Marruecos gana a Serbia con el meta Munir y Amrabat titulares
El rival de España en el Mundial se adelantó por medio de Ziyech de penalti, Tadic empató en posición dudosa y Boutaib hizo el gol de la victoria. El madridista Achraf fue baja.
Quique Rubio
As
Marruecos, último rival de España en la fase de grupos del Mundial de Rusia, se llevó una trabajada victoria frente a Serbia, otra selección que estará en la cita mundialista (2-1). El equipo dirigido por Renard apostó por el que puede ser su once de lujo, aunque contó con la ausencia del madridista Achraf, lesionado. Su puesto en el lateral derecho lo ocupó el extremo del Fenerbahçe Dirar, que estuvo acompañado de inicio por los jugadores que militan en LaLiga Munir (portero del Numancia) y Amrabat (Leganés). Fajr (Getafe) estuvo en el banquillo pero finalmente no disputó ningún minuto.
El encuentro, disputado en Turín, tuvo mucho ritmo desde el principio, con Marruecos con un poco más de intención que Serbia. Así, las primeras llegadas fueron marroquíes, pero Dmitrovic, portero del Eibar que debutaba como titular con la absoluta de Serbia, fue atajando las llegadas rivales. Hasta que no pudo hacer nada en el minuto 29. Amrabat cayó en el área y el colegiado pitó penalti. Quizá demasiado riguroso, pero la pena máxima no la desaprovechó el centrocampista del Ajax Ziyech para hacer el primero de los suyos. Sin embargo, la alegría les duró poco a los hombres de Renard pues Tasic, en posible fuera de juego tras una brutal asistencia de Kolarov, hizo el tanto del empate. Poco pudo hacer Munir en el tanto. Incluso Mitrovic, un minuto después, pudo cambiar el devenir del encuentro, pero su cabezazo se marchó desviado. Lejos de venirse abajo, Marruecos apretó antes del descanso y logró su premio. Ziyech, con un espectacular pase desde la derecha, encontró la cabeza de Boutaib para que el delantero centro de Marruecos marcase el 2-1 antes de ir camino de vestuarios.
La segunda parte fue algo más floja. Serbia buscó el tanto del empate con más corazón que cabeza, pero Munir fue sacando las acometidas de los pupilos de Krstajic, que no daba con la tecla en los metros finales. Los cambios, habituales en este tipo de amistosos, afearon los minutos finales, en los que el central Da Costa tuvo la más clara de Marruecos, pero su cabezazo lo atrapó Dmitrovic sin problemas. El resultado hacía justicia a lo visto sobre el campo y Marruecos dejaba buenas sensaciones a pocos meses para la cita de Rusia. No obstante, cuenta con jugadores con calidad y experiencia como Benatia, el propio Dirar, Amrabat, Belhanda, Boussoufa o Ziyech, que además tienen ganas de demostrar su calidad en una gran cita. Algo más dececpcionante fue el juego de una Serbia a la que por nombres propios habría que exigir mucho más.
Quique Rubio
As
Marruecos, último rival de España en la fase de grupos del Mundial de Rusia, se llevó una trabajada victoria frente a Serbia, otra selección que estará en la cita mundialista (2-1). El equipo dirigido por Renard apostó por el que puede ser su once de lujo, aunque contó con la ausencia del madridista Achraf, lesionado. Su puesto en el lateral derecho lo ocupó el extremo del Fenerbahçe Dirar, que estuvo acompañado de inicio por los jugadores que militan en LaLiga Munir (portero del Numancia) y Amrabat (Leganés). Fajr (Getafe) estuvo en el banquillo pero finalmente no disputó ningún minuto.
El encuentro, disputado en Turín, tuvo mucho ritmo desde el principio, con Marruecos con un poco más de intención que Serbia. Así, las primeras llegadas fueron marroquíes, pero Dmitrovic, portero del Eibar que debutaba como titular con la absoluta de Serbia, fue atajando las llegadas rivales. Hasta que no pudo hacer nada en el minuto 29. Amrabat cayó en el área y el colegiado pitó penalti. Quizá demasiado riguroso, pero la pena máxima no la desaprovechó el centrocampista del Ajax Ziyech para hacer el primero de los suyos. Sin embargo, la alegría les duró poco a los hombres de Renard pues Tasic, en posible fuera de juego tras una brutal asistencia de Kolarov, hizo el tanto del empate. Poco pudo hacer Munir en el tanto. Incluso Mitrovic, un minuto después, pudo cambiar el devenir del encuentro, pero su cabezazo se marchó desviado. Lejos de venirse abajo, Marruecos apretó antes del descanso y logró su premio. Ziyech, con un espectacular pase desde la derecha, encontró la cabeza de Boutaib para que el delantero centro de Marruecos marcase el 2-1 antes de ir camino de vestuarios.
La segunda parte fue algo más floja. Serbia buscó el tanto del empate con más corazón que cabeza, pero Munir fue sacando las acometidas de los pupilos de Krstajic, que no daba con la tecla en los metros finales. Los cambios, habituales en este tipo de amistosos, afearon los minutos finales, en los que el central Da Costa tuvo la más clara de Marruecos, pero su cabezazo lo atrapó Dmitrovic sin problemas. El resultado hacía justicia a lo visto sobre el campo y Marruecos dejaba buenas sensaciones a pocos meses para la cita de Rusia. No obstante, cuenta con jugadores con calidad y experiencia como Benatia, el propio Dirar, Amrabat, Belhanda, Boussoufa o Ziyech, que además tienen ganas de demostrar su calidad en una gran cita. Algo más dececpcionante fue el juego de una Serbia a la que por nombres propios habría que exigir mucho más.