Empresarios: “Bolivia está perdiendo la lucha contra el contrabando en todos los frentes”
El empresariado privado enfatizó que Bolivia 'no será digna ni soberana ni productiva si continúa sometida a los poderosos intereses de quienes ingresan y trasladan productos de contrabando'.
Página Siete Digital / La Paz
El presidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), Ronald Nostas, sostuvo hoy que el país “está perdiendo la lucha contra el contrabando en todos los frentes”, esto luego de evidenciarse que el tamaño de este flagelo llegó, incluso, a enfrentar “alevosamente” a las Fuerzas Armadas del país.
“Los asesinatos del pasado domingo confirman que ni siquiera el ingreso de las Fuerzas Armadas para el control de las fronteras ha sido suficiente, y tampoco lo serán las leyes ni la indignación nacional, frente al poder y el tamaño de este flagelo”, indicó Nostas.
El empresario, que será parte de la delegación boliviana que presenciará los alegatos orales ante la Corte de La Haya por la demanda marítima, indicó que si no se entiende la gravedad del problema y no se la atiende de manera integral, Bolivia no será ni digna ni soberana.
“Bolivia no será digna ni soberana ni productiva si continúa sometida a los poderosos intereses de quienes ingresan y trasladan productos de contrabando; a la indiferencia de las autoridades que lo permiten, y a la inconsciencia de quienes compran y consumen productos ilegales, aun conociendo su origen”, expresó.
A través de un comunicado, el titular de la CEPB recordó que en 2015 presentó al Gobierno un estudio sobre las cifras económicas que mueve el contrabando de manera anual, que llegan a los 1.680 millones de dólares y que, si se considera al contrabando hormiga, ésta llega a 2.230 millones.
“Es una actividad que genera un movimiento económico mucho mayor que la mayoría de nuestros rubros industriales, y si se controlara, implicaría un crecimiento adicional entre el 1 y el 1,5% del PIB”, precisó.
Para Nostas, el contrabando debe ser asumido con un problema de la misma proporción que el narcotráfico, es decir que sea un asunto de seguridad nacional. “Probablemente debamos crear una entidad específica que no dependa de la Aduana ni de las Fuerzas Armadas o la Policía, pero que pueda disponer de sus recursos y personal; una entidad especializada y dedicada de manera integral al control de ingreso de mercadería, la investigación y prevención, pero también del control de venta de productos de contrabando en los mercados”, explicó.
El presidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), Ronald Nostas, sostuvo hoy que el país “está perdiendo la lucha contra el contrabando en todos los frentes”, esto luego de evidenciarse que el tamaño de este flagelo llegó, incluso, a enfrentar “alevosamente” a las Fuerzas Armadas del país.
“Los asesinatos del pasado domingo confirman que ni siquiera el ingreso de las Fuerzas Armadas para el control de las fronteras ha sido suficiente, y tampoco lo serán las leyes ni la indignación nacional, frente al poder y el tamaño de este flagelo”, indicó Nostas.
El empresario, que será parte de la delegación boliviana que presenciará los alegatos orales ante la Corte de La Haya por la demanda marítima, indicó que si no se entiende la gravedad del problema y no se la atiende de manera integral, Bolivia no será ni digna ni soberana.
“Bolivia no será digna ni soberana ni productiva si continúa sometida a los poderosos intereses de quienes ingresan y trasladan productos de contrabando; a la indiferencia de las autoridades que lo permiten, y a la inconsciencia de quienes compran y consumen productos ilegales, aun conociendo su origen”, expresó.
A través de un comunicado, el titular de la CEPB recordó que en 2015 presentó al Gobierno un estudio sobre las cifras económicas que mueve el contrabando de manera anual, que llegan a los 1.680 millones de dólares y que, si se considera al contrabando hormiga, ésta llega a 2.230 millones.
“Es una actividad que genera un movimiento económico mucho mayor que la mayoría de nuestros rubros industriales, y si se controlara, implicaría un crecimiento adicional entre el 1 y el 1,5% del PIB”, precisó.
Para Nostas, el contrabando debe ser asumido con un problema de la misma proporción que el narcotráfico, es decir que sea un asunto de seguridad nacional. “Probablemente debamos crear una entidad específica que no dependa de la Aduana ni de las Fuerzas Armadas o la Policía, pero que pueda disponer de sus recursos y personal; una entidad especializada y dedicada de manera integral al control de ingreso de mercadería, la investigación y prevención, pero también del control de venta de productos de contrabando en los mercados”, explicó.
