Manita del Bayern a un Besiktas que jugó con diez desde el 16'
Lewandowski y Müller hicieron doblete y Coman también marcó. Ha vuelto el rodillo alemán de la mano de Jupp Heynckes.
José Carlos Menzel
As
No sufrió el Bayern contra un Besiktas que tuvo que jugar con diez desde el minuto 16 y selló el pase a los cuartos de final antes de viajar al infierno de Estambul en tres semanas. Los de Heynckes dominaron al conjunto dirigido por Senol Günes desde el pitido inicial y le endosaron una manita muy dolorosa al equipo del exmadridista Pepe. La goleada bávara solo la enturbió James, quien tuvo que ser sustituido en el descanso debido a unos problemas en los gemelos. Nada grave, según el departamento de prensa del Bayern.
No pudo empezar el encuentro en la nevera muniquesa (menos siete grados) de peor manera para el campeón turco. Una falta de Vida a Lewandowski le costó la roja directa al evitar que el polaco encarara a Fabri y a partir de ahí el partido se convirtió en un monólogo bávaro. Excepto un disparo de Love que se marchó alto, el conjunto local contaba las oportunidades por minuto y obtuvo la recompensa de las botas de Müller. Sin moverse, el delantero alemán realizó un giro de 180 grados y enganchó el cuero con los tacos, colándoselo a Fabri entre las piernas.
No hubo tregua en la segunda mitad. El cuadro muniqués quería dejar sentenciado el pase y pisó el acelerador nada más salir de los vestuarios, aprovechándose del mal estado físico de los visitantes al llevar más de una media hora jugando con diez y taladrando el marco defendido por el meta español. Lewandowski estrelló un libre directo contra el larguero y el imperial Coman subió el segundo al marcador, aprovechándose del desorden defensivo del cuadro visitante. Tan sólo tuvo que achuchar un centro de Lewy para sentenciar el encuentro.
Pero este Bayern vuelve a ser un rodillo y liquida a sus rivales cuando estos le dan la oportunidad de hacerlo. Después de pasar todo el partido corriendo detrás del balón, el Besiktas tiró la toalla y el Bayern pasó por encima de él. Müller hizo el tercero a centro de Kimmich y Lewandowski cerró la manita con un doblete en los minutos finales que deja al Besiktas sin oportunidad ninguna para el partido de vuelta. El Bayern, en cambio, vuelve a soñar con la Orejona después de comenzar la fase final de la Champions con una nueva noche mágica en el coliseo bávaro. Ha vuelto el rodillo alemán de la mano de Don Jupp.
José Carlos Menzel
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No sufrió el Bayern contra un Besiktas que tuvo que jugar con diez desde el minuto 16 y selló el pase a los cuartos de final antes de viajar al infierno de Estambul en tres semanas. Los de Heynckes dominaron al conjunto dirigido por Senol Günes desde el pitido inicial y le endosaron una manita muy dolorosa al equipo del exmadridista Pepe. La goleada bávara solo la enturbió James, quien tuvo que ser sustituido en el descanso debido a unos problemas en los gemelos. Nada grave, según el departamento de prensa del Bayern.
No pudo empezar el encuentro en la nevera muniquesa (menos siete grados) de peor manera para el campeón turco. Una falta de Vida a Lewandowski le costó la roja directa al evitar que el polaco encarara a Fabri y a partir de ahí el partido se convirtió en un monólogo bávaro. Excepto un disparo de Love que se marchó alto, el conjunto local contaba las oportunidades por minuto y obtuvo la recompensa de las botas de Müller. Sin moverse, el delantero alemán realizó un giro de 180 grados y enganchó el cuero con los tacos, colándoselo a Fabri entre las piernas.
No hubo tregua en la segunda mitad. El cuadro muniqués quería dejar sentenciado el pase y pisó el acelerador nada más salir de los vestuarios, aprovechándose del mal estado físico de los visitantes al llevar más de una media hora jugando con diez y taladrando el marco defendido por el meta español. Lewandowski estrelló un libre directo contra el larguero y el imperial Coman subió el segundo al marcador, aprovechándose del desorden defensivo del cuadro visitante. Tan sólo tuvo que achuchar un centro de Lewy para sentenciar el encuentro.
Pero este Bayern vuelve a ser un rodillo y liquida a sus rivales cuando estos le dan la oportunidad de hacerlo. Después de pasar todo el partido corriendo detrás del balón, el Besiktas tiró la toalla y el Bayern pasó por encima de él. Müller hizo el tercero a centro de Kimmich y Lewandowski cerró la manita con un doblete en los minutos finales que deja al Besiktas sin oportunidad ninguna para el partido de vuelta. El Bayern, en cambio, vuelve a soñar con la Orejona después de comenzar la fase final de la Champions con una nueva noche mágica en el coliseo bávaro. Ha vuelto el rodillo alemán de la mano de Don Jupp.