Zidane hará una 'pretemporada' para llegar a tope al PSG
El técnico quiere aprovechar que el equipo no juega partido entre semana para hacer una minipretemporada, engrasar a la bbC, recuperar lesionados...
Sergio Gómez
As
El Real Madrid vuelve este lunes a los entrenamientos tras recuperar sonrisa y sensaciones en Mestalla y lo hace con el PSG en la mente. Faltan 16 días para que los blancos afronten la eliminatoria contra los de Emery, la carta con la que los blancos, a 19 puntos del Barça en Liga y eliminados de la Copa, se juegan la temporada y Zidane comenzará a trabajar esta semana con el objetivo de llegar a tope, física y mentalmente, a ese encuentro del 14 de febrero.
Un ‘plan PSG’ que tiene como elemento básico mejorar en lo físico. Y para ello volverá a recurrir a esa ‘mini pretemporada’ en enero que ya es sello de Zidane y que tiene a Antonio Pintus, preparador físico, como brazo ejecutor. El entrenador francés, aprovechando que el Real Madrid no tiene partido entre semana al haber sido apeado de la Copa por el Leganés, intensificará la carga de trabajo para llegar a ese encuentro contra el PSG con el depósito lleno. Al inicio de este mes, el técnico lamentó no poder trabajar más este aspecto de la preparación por tener tres partidos a la semana: “No podemos hacer mini pretemporada como el año pasado”. En 2017, los madridistas empezaron el año de forma irregular, con tres triunfos, dos empates y dos derrotas y, como este año, con una eliminación en cuartos de Copa ante el Celta de Vigo incluida. Ese traspié copero llevó al técnico y a su staff a iniciar un plan físico (que ya implantaron cuando aterrizaron en el banquillo, en enero de 2016) que sirvió para que el equipo alcanzara su mejor nivel en el tramo decisivo de una temporada que acabó con la Liga y la Champions en las vitrinas del Bernabéu.
En la próxima semana y media, el objetivo trazado por Pintus y por sus subalternos Bernardo Requena (uno de los coordinadores el Real Madrid Lab) y Hamidou Msaidie (fisioterapeuta y osteópata), es llevar a cabo un programa aeróbico enfocado a mejorar la resistencia, y la velocidad y potencia en los primeros metros. Para ello, incidirán en las carreras continuas, esprints, y ejercicios de gimnasio. Zidane insiste en que el derrumbe que ha protagonizado el Madrid en Liga y Copa no ha sido provocado por un bajón físico, pero es consciente de que la exigencia del calendario no les ha permitido fortalecer este apartado. Algo que puede explicar las desconexiones habituales del Madrid en las segundas partes…
Estos 16 días que faltan para recibir al PSG le servirá al técnico para engrasar a una bbC que volvió a jugar junta de inicio ante el Valencia por primera vez después de 280 días. Por lesiones o sanciones, el técnico no ha podido conjuntarla. Regresó en Mestalla y regresaron las dudas. Cristiano, el motor del trío, y Benzema participaron en los dos penaltis, pero el equipo sólo pudo despejar las embestidas del Valencia cuando Zidane metió en el campo a Lucas Vázquez y Asensio por Benzema y Bale, que ni brillaron en ataque ni se afanaron en defensa. El francés se marchó visiblemente enfadado por el cambio y al llegar al banquillo, lanzó la chaqueta contra el suelo. Zidane no quiso darle importancia al mal gesto del jugador al que más ha protegido y contra el Levante y la Real, los dos próximos encuentros ligueros, volverá a jugar junto a Cristiano y Bale (si no hay contratiempos en forma de lesión) para seguir lubricando sus automatismos de asociación y remate de la bbC con vistas a una eliminatoria de Champions de máxima exigencia, tanto en ataque como, sobre todo, en tareas defensivas.
Este periodo será clave para recuperar a Ramos, que recayó de su lesión en el sóleo y llegará justo al encuentro de ida de Champions (el capitán sabe de lo vital de la cita y trabaja con ese encuentro entre ceja y ceja), a Isco, con problemas en la cadera, y a Varane, cuyo estado preocupa al cuerpo técnico después de marcharse de Mestalla con dolores en una rodilla. Que ambos se recuperen totalmente es básico para Zidane ya que en el choque del 14 de febrero no podrá contar con Carvajal, sancionado por la UEFA (Nacho será el lateral derecho).
Por último, en las próximas dos semanas el técnico y su equipo trabajarán el aspecto psicológico del equipo. Después del triunfo en Mestalla, donde el Madrid ganó, mostró brotes verdes pero también atravesó momentos grises, Zidane manifestó: "Estamos bien físicamente. Muchas veces es la cabeza... Y eso más jodido”. Y en ese punto hará hincapié el entrenador blanco. Aunque es cierto que partidos de envergadura como el del PSG motivan por sí solos al jugador, Zizou fortalecer la confianza de los suyos. Aislarse del envoltorio de la eliminatoria y centrarse en la sustancia.
Faltan 16 días para el Real Madrid-PSG, pero todos en el club y en el equipo miran a esa eliminatoria contra Neymar, Mbappé y compañía, conocedores de que esos dos encuentros marcarán el futuro de muchos…
As
El Real Madrid vuelve este lunes a los entrenamientos tras recuperar sonrisa y sensaciones en Mestalla y lo hace con el PSG en la mente. Faltan 16 días para que los blancos afronten la eliminatoria contra los de Emery, la carta con la que los blancos, a 19 puntos del Barça en Liga y eliminados de la Copa, se juegan la temporada y Zidane comenzará a trabajar esta semana con el objetivo de llegar a tope, física y mentalmente, a ese encuentro del 14 de febrero.
Un ‘plan PSG’ que tiene como elemento básico mejorar en lo físico. Y para ello volverá a recurrir a esa ‘mini pretemporada’ en enero que ya es sello de Zidane y que tiene a Antonio Pintus, preparador físico, como brazo ejecutor. El entrenador francés, aprovechando que el Real Madrid no tiene partido entre semana al haber sido apeado de la Copa por el Leganés, intensificará la carga de trabajo para llegar a ese encuentro contra el PSG con el depósito lleno. Al inicio de este mes, el técnico lamentó no poder trabajar más este aspecto de la preparación por tener tres partidos a la semana: “No podemos hacer mini pretemporada como el año pasado”. En 2017, los madridistas empezaron el año de forma irregular, con tres triunfos, dos empates y dos derrotas y, como este año, con una eliminación en cuartos de Copa ante el Celta de Vigo incluida. Ese traspié copero llevó al técnico y a su staff a iniciar un plan físico (que ya implantaron cuando aterrizaron en el banquillo, en enero de 2016) que sirvió para que el equipo alcanzara su mejor nivel en el tramo decisivo de una temporada que acabó con la Liga y la Champions en las vitrinas del Bernabéu.
En la próxima semana y media, el objetivo trazado por Pintus y por sus subalternos Bernardo Requena (uno de los coordinadores el Real Madrid Lab) y Hamidou Msaidie (fisioterapeuta y osteópata), es llevar a cabo un programa aeróbico enfocado a mejorar la resistencia, y la velocidad y potencia en los primeros metros. Para ello, incidirán en las carreras continuas, esprints, y ejercicios de gimnasio. Zidane insiste en que el derrumbe que ha protagonizado el Madrid en Liga y Copa no ha sido provocado por un bajón físico, pero es consciente de que la exigencia del calendario no les ha permitido fortalecer este apartado. Algo que puede explicar las desconexiones habituales del Madrid en las segundas partes…
Estos 16 días que faltan para recibir al PSG le servirá al técnico para engrasar a una bbC que volvió a jugar junta de inicio ante el Valencia por primera vez después de 280 días. Por lesiones o sanciones, el técnico no ha podido conjuntarla. Regresó en Mestalla y regresaron las dudas. Cristiano, el motor del trío, y Benzema participaron en los dos penaltis, pero el equipo sólo pudo despejar las embestidas del Valencia cuando Zidane metió en el campo a Lucas Vázquez y Asensio por Benzema y Bale, que ni brillaron en ataque ni se afanaron en defensa. El francés se marchó visiblemente enfadado por el cambio y al llegar al banquillo, lanzó la chaqueta contra el suelo. Zidane no quiso darle importancia al mal gesto del jugador al que más ha protegido y contra el Levante y la Real, los dos próximos encuentros ligueros, volverá a jugar junto a Cristiano y Bale (si no hay contratiempos en forma de lesión) para seguir lubricando sus automatismos de asociación y remate de la bbC con vistas a una eliminatoria de Champions de máxima exigencia, tanto en ataque como, sobre todo, en tareas defensivas.
Este periodo será clave para recuperar a Ramos, que recayó de su lesión en el sóleo y llegará justo al encuentro de ida de Champions (el capitán sabe de lo vital de la cita y trabaja con ese encuentro entre ceja y ceja), a Isco, con problemas en la cadera, y a Varane, cuyo estado preocupa al cuerpo técnico después de marcharse de Mestalla con dolores en una rodilla. Que ambos se recuperen totalmente es básico para Zidane ya que en el choque del 14 de febrero no podrá contar con Carvajal, sancionado por la UEFA (Nacho será el lateral derecho).
Por último, en las próximas dos semanas el técnico y su equipo trabajarán el aspecto psicológico del equipo. Después del triunfo en Mestalla, donde el Madrid ganó, mostró brotes verdes pero también atravesó momentos grises, Zidane manifestó: "Estamos bien físicamente. Muchas veces es la cabeza... Y eso más jodido”. Y en ese punto hará hincapié el entrenador blanco. Aunque es cierto que partidos de envergadura como el del PSG motivan por sí solos al jugador, Zizou fortalecer la confianza de los suyos. Aislarse del envoltorio de la eliminatoria y centrarse en la sustancia.
Faltan 16 días para el Real Madrid-PSG, pero todos en el club y en el equipo miran a esa eliminatoria contra Neymar, Mbappé y compañía, conocedores de que esos dos encuentros marcarán el futuro de muchos…
