Suman 16 opositores en huelga en rechazo al Código Penal
La Paz, Erbol
Al menos unos 16 opositores cumplen un ayuno voluntario este miércoles en uno de los pasillos de la Asamblea Legislativa, exigiendo al oficialismo derogar la Ley 1005 del Código del Sistema Penal. La medida de presión se inició el martes con la senadora Carmen Eva Gonzales de Unidad Demócrata y horas después se sumaron otros opositores de la misma bancada.
Las asambleístas Rufina Caldera, María Calcina, Lorena Gareca, Lenny Peña, Tatiana Añez, Griselda Muñoz y Cira Castro, instalaron una fila de colchones en los pasillos aledaños al hall principal de la Asamblea, al igual que sus colegas Agustín Condori, Rodrigo Valdivia, Gróver Huanca, Wilson Santamaría, Amilkar Barral, Tomas Monasterios y Rodrigo Guzmán.
Esta mañana, el presidente del Senado José Alberto Gonzales se acercó a saludarlos y preguntarles cómo amanecieron. “Obviamente no hay como nuestra cama verdad? les preguntó Gonzales y la diputada Calcina les respondió “seguimos de pie”.
“Pero sabemos que esto es político y es contra de la reelección… eso es lo que se buscan de fondo”, replicó Gonzales que alcanzó a dar un saludo a sus colegas asambleístas.
El diputado Barral informó que es probable que este miércoles puedan acoplarse otros de la oposición, como lo hicieron dos diputados de la misma alianza en la ciudad de Cochabamba.
Lamentó la actitud del oficialismo de haber llevado sesiones vergonzosas tanto en la Cámara de Diputados como en la de Senadores, donde la derogatoria de los artíuclos 137 y 205 no se aprobó en sesión normal, sino irregular, en ambientes estrechos y sin dar opción a las observaciones de la oposición.
“Ante este atropello lo único que nos queda es actuar como lo que nos enseñó el Presidente: hacer bloqueos, huelgas y haber si con eso nos pueden tomar en cuenta, pero lamentablemente la soberbia puede más”, declaró Barral.
Rechazó la afirmación del presidente del Senado en sentido de que la huelga sea una acción política contra la reelección y aseguró que continuarán hasta cuando el cuerpo les permita para defender el derecho democrático a debatir.
Al menos unos 16 opositores cumplen un ayuno voluntario este miércoles en uno de los pasillos de la Asamblea Legislativa, exigiendo al oficialismo derogar la Ley 1005 del Código del Sistema Penal. La medida de presión se inició el martes con la senadora Carmen Eva Gonzales de Unidad Demócrata y horas después se sumaron otros opositores de la misma bancada.
Las asambleístas Rufina Caldera, María Calcina, Lorena Gareca, Lenny Peña, Tatiana Añez, Griselda Muñoz y Cira Castro, instalaron una fila de colchones en los pasillos aledaños al hall principal de la Asamblea, al igual que sus colegas Agustín Condori, Rodrigo Valdivia, Gróver Huanca, Wilson Santamaría, Amilkar Barral, Tomas Monasterios y Rodrigo Guzmán.
Esta mañana, el presidente del Senado José Alberto Gonzales se acercó a saludarlos y preguntarles cómo amanecieron. “Obviamente no hay como nuestra cama verdad? les preguntó Gonzales y la diputada Calcina les respondió “seguimos de pie”.
“Pero sabemos que esto es político y es contra de la reelección… eso es lo que se buscan de fondo”, replicó Gonzales que alcanzó a dar un saludo a sus colegas asambleístas.
El diputado Barral informó que es probable que este miércoles puedan acoplarse otros de la oposición, como lo hicieron dos diputados de la misma alianza en la ciudad de Cochabamba.
Lamentó la actitud del oficialismo de haber llevado sesiones vergonzosas tanto en la Cámara de Diputados como en la de Senadores, donde la derogatoria de los artíuclos 137 y 205 no se aprobó en sesión normal, sino irregular, en ambientes estrechos y sin dar opción a las observaciones de la oposición.
“Ante este atropello lo único que nos queda es actuar como lo que nos enseñó el Presidente: hacer bloqueos, huelgas y haber si con eso nos pueden tomar en cuenta, pero lamentablemente la soberbia puede más”, declaró Barral.
Rechazó la afirmación del presidente del Senado en sentido de que la huelga sea una acción política contra la reelección y aseguró que continuarán hasta cuando el cuerpo les permita para defender el derecho democrático a debatir.