Óscar Pérez, el policía que se rebeló al régimen de Maduro, murió en el enfrentamiento con las fuerzas chavistas
La cadena de noticias CNN confirmó la noticia y cita como fuente a un alto rango del gobierno del PSUV. El uniformado había denunciado en un video que querían asesinarlo, que intentaba entregarse y no lo dejaban
Infobae
El ex policía murió en un enfrentamiento con la Policía Nacional de Venezuela la mañana del lunes, según confirmó a CNN una fuente de alto rango del gobierno venezolano.
Hasta el momento no se conocía la suerte del ex policía. Se sabía que el operativo estaba terminado y que había "abatidos y capturados" pero la información oficial no detallaba en qué grupo se encontraba Pérez.
El policía publicó una serie de vídeos en Instagram en los que señalaba que las autoridades lo tenían cercado a él y al grupo que lo acompañaba. En varios de los audiovisuales Pérez aseguró que se quería entregar a las autoridades, pero afirmaba que no dejaban de disparar pese a su disposición. En su último vídeo, se observa al policía con manchas en la cara, que parecen sangre, y gritando: "Nos vamos a entregar, no sigan disparando". Pérez aseguró en ese último audiovisual que tenían heridos.
En otros vídeos indicó que las fuerzas de seguridad les dijeron que los querían asesinar y que no querían que se entregaran. También se dirigió a sus hijos para señalarles que lo que había hecho era por ellos y por todos los niños de Venezuela.
Óscar Pérez se hizo famoso en julio de 2017 cuando, en medio de las protestas antigubernamentales que dejaron más de 100 muertos en Venezuela, lanzó, según el Gobierno, varias granadas desde un helicóptero de la Policía científica contra dos edificios gubernamentales en Caracas.
Este "ataque terrorista" no dejó ningún herido ni otros daños materiales significativos.
Desde entonces se encontraba huyendo de las autoridades y el Gobierno venezolano tenía emitida un alerta nacional e internacional para su captura.
Infobae
El ex policía murió en un enfrentamiento con la Policía Nacional de Venezuela la mañana del lunes, según confirmó a CNN una fuente de alto rango del gobierno venezolano.
Hasta el momento no se conocía la suerte del ex policía. Se sabía que el operativo estaba terminado y que había "abatidos y capturados" pero la información oficial no detallaba en qué grupo se encontraba Pérez.
El policía publicó una serie de vídeos en Instagram en los que señalaba que las autoridades lo tenían cercado a él y al grupo que lo acompañaba. En varios de los audiovisuales Pérez aseguró que se quería entregar a las autoridades, pero afirmaba que no dejaban de disparar pese a su disposición. En su último vídeo, se observa al policía con manchas en la cara, que parecen sangre, y gritando: "Nos vamos a entregar, no sigan disparando". Pérez aseguró en ese último audiovisual que tenían heridos.
En otros vídeos indicó que las fuerzas de seguridad les dijeron que los querían asesinar y que no querían que se entregaran. También se dirigió a sus hijos para señalarles que lo que había hecho era por ellos y por todos los niños de Venezuela.
Óscar Pérez se hizo famoso en julio de 2017 cuando, en medio de las protestas antigubernamentales que dejaron más de 100 muertos en Venezuela, lanzó, según el Gobierno, varias granadas desde un helicóptero de la Policía científica contra dos edificios gubernamentales en Caracas.
Este "ataque terrorista" no dejó ningún herido ni otros daños materiales significativos.
Desde entonces se encontraba huyendo de las autoridades y el Gobierno venezolano tenía emitida un alerta nacional e internacional para su captura.