Godoy Cruz se hizo fuerte en Mendoza y complicó más a Chacarita
Venció 1 a 0 al conjunto de Sebastián Pena, que sigue último en la tabla de promedios. Matos, en contra, marcó el gol.
Clarín
Las ilusiones se renovaron en el nuevo año pero la sensación es la misma: Chacarita dependerá de un milagro futbolístico para quedarse la próxima temporada en Primera División. Encima las señales en la reanudación de la Superliga no fueron para nada alentadoras para el equipo que ahora dirige Sebastián Pena, que mereció llevarse de Mendoza algo más que esa derrota 1 a 0 que lo sigue hundiendo en la zona roja de los promedios.
Godoy Cruz ganó porque aprovechó su momento en el primer tiempo, cuando era superior, para marcar la diferencia. Luego se dedicó a sostenerla, aprovechando la anemia ofensiva de Chacarita que tiene un verdadero karma con el gol.
Porque el tanto del equipo de Diego Dabove llegó de una manera muy particular. Un tiro de esquina que se demoró porque el ejecutante (Pol Fernández) discutió con policías para que le dieran lugar, un fuerte centro que rebotó en la cabeza de Mauro Matos y la pelota en el fondo del arco ante la sorpresa de todos en el Malvinas Argentinas.
Antes, Godoy Cruz fue mejor. Si bien ambos técnicos hacían su presentación oficial, el conjunto mendocino tiene mejor aprendido su libreto. Entonces la ventaja parecía suficiente como para encarar el resto del partido con mayor tranquilidad.
Sin embargo nada de eso sucedió. Chacarita comenzó a hacerse fuerte en la mitad de la cancha gracias al buen partido de Federico Vismara y comenzó a llegar con peligro al arco rival. Y lo tuvo Imbert de cabeza, pero apareció Leonardo Burián. Estuvo muy cerca de encontrar su revancha Matos y otra vez el arquero uruguayo salvó a Godoy Cruz.
Llegaron los cambios que marcaron la tendencia de los últimos minutos del partido. Mientras Pena recurría a alternativas en ataque, Dabove buscaba fortalecer su defensa. En ese duelo táctico terminó triunfando la estrategia del entrenador local, más por deficiencias ajenas que por virtudes propias.
Así Godoy Cruz se llevó una victoria que le servirá para buscar con mayor tranquilidad un estilo que le permita luchar por la clasificación a alguna copa internacional, el gran objetivo del club mendocino. En cambio Chacarita, si bien mostró algunas señales positivas en el segundo tiempo, se llevó otra derrota que lo aleja de su sueño de permanencia.
Las ilusiones se renovaron en el nuevo año pero la sensación es la misma: Chacarita dependerá de un milagro futbolístico para quedarse la próxima temporada en Primera División. Encima las señales en la reanudación de la Superliga no fueron para nada alentadoras para el equipo que ahora dirige Sebastián Pena, que mereció llevarse de Mendoza algo más que esa derrota 1 a 0 que lo sigue hundiendo en la zona roja de los promedios.
Godoy Cruz ganó porque aprovechó su momento en el primer tiempo, cuando era superior, para marcar la diferencia. Luego se dedicó a sostenerla, aprovechando la anemia ofensiva de Chacarita que tiene un verdadero karma con el gol.
Porque el tanto del equipo de Diego Dabove llegó de una manera muy particular. Un tiro de esquina que se demoró porque el ejecutante (Pol Fernández) discutió con policías para que le dieran lugar, un fuerte centro que rebotó en la cabeza de Mauro Matos y la pelota en el fondo del arco ante la sorpresa de todos en el Malvinas Argentinas.
Antes, Godoy Cruz fue mejor. Si bien ambos técnicos hacían su presentación oficial, el conjunto mendocino tiene mejor aprendido su libreto. Entonces la ventaja parecía suficiente como para encarar el resto del partido con mayor tranquilidad.
Sin embargo nada de eso sucedió. Chacarita comenzó a hacerse fuerte en la mitad de la cancha gracias al buen partido de Federico Vismara y comenzó a llegar con peligro al arco rival. Y lo tuvo Imbert de cabeza, pero apareció Leonardo Burián. Estuvo muy cerca de encontrar su revancha Matos y otra vez el arquero uruguayo salvó a Godoy Cruz.
Llegaron los cambios que marcaron la tendencia de los últimos minutos del partido. Mientras Pena recurría a alternativas en ataque, Dabove buscaba fortalecer su defensa. En ese duelo táctico terminó triunfando la estrategia del entrenador local, más por deficiencias ajenas que por virtudes propias.
Así Godoy Cruz se llevó una victoria que le servirá para buscar con mayor tranquilidad un estilo que le permita luchar por la clasificación a alguna copa internacional, el gran objetivo del club mendocino. En cambio Chacarita, si bien mostró algunas señales positivas en el segundo tiempo, se llevó otra derrota que lo aleja de su sueño de permanencia.
