Buffon cumple 40 años y no piensa en retirarse...
Tras construir su leyenda durante 23 temporadas, aún es una figura insustituible en la Juventus. El mito alcanza este 28 de enero a las cuatro décadas.
Mirko Calemme
As
Gigi Buffon cumple este domingo 40 años en el que no se puede definir el mejor momento de su carrera. En noviembre le vimos llorar tras el desastre que le quitó su sexto mundial y lleva desde el 1 de diciembre sin jugar por una lesión muscular que le negó superar en este curso el récord de presencias en la Serie A del que presume Paolo Maldini (647, el bianconero lleva 629).
Sin embargo Gigi, que el sábado volvió en el banquillo en la victoria de la Vecchia Signora ante el Chievo (0-2 con goles de Khedira e Higuaín y una doble expulsión para los de Maran), ha utilizado estas semanas para reflexionar y llegar a la conclusión de siempre: no rendirse. Su idea es no colgar las botas, y lo ha dejado claro en una entrevista a La Repubblica: "Siempre me consideraron un firme puntal del equipo, y si eso no cambia puedo seguir". Confesó sentir un "deseo de competir anómalo para su edad", a pesar de haberlo ganado casi todo y de ser el futbolista con más presencias en una selección europea por delante de Casillas. Sólo la Champions se le resistió, y la llegó a rozar en tres finales. Si este año llegase, su continuidad estaría asegurada: la Juve nunca le negaría jugarse el Mundial de Clubes. En caso contrario, habría que negociar.
"Soy futbolista y hasta junio solo pensaré en eso. Luego, tengo una gran amistad con el presidente, nos veremos y decidiremos". Y es verdad: tras un comienzo atormentado, la relación entre Agnelli y Buffon mejoró tanto que el portero es el padrino de la última hija del presidente, Livia Selin. Allegri, que encontró en Szczesny un heredero perfecto, le lanzó alguna señal ("Es parte de la vida, hay que aceptarlo y entender que luego llegan 40 años más para vivir"), pero Gigi sigue con las mismas ganas y el mismo orgullo: "Este año fallé con España y con el Atalanta: tuve partidos fenomenales, otros buenos y otro regulares, pero la FIFA me ha premiado como mejor portero del 2017. Me siento igual que hace seis, siete años. Esta es la verdad".
En un futuro se imagina entrenador de una selección, nunca de un club ("Quisiera concederme el lujo del aburrimiento. Además, un seleccionador une, no divide"), pero el deseo de seguir saltando al campo, ahora, sigue siendo demasiado grande. En el fondo, Zoff se retiró con 41 años, Shilton jugó en la Premier con 45: para un portero, los 40, nunca fueron una frontera infranqueable. Y si la Vecchia Signora le niega esa oportunidad, ahí se acabará todo. Imposible imaginarle con otra camiseta: "O sigo con la Juve, o nada", dijo. Con la franqueza de siempre.
Mirko Calemme
As
Gigi Buffon cumple este domingo 40 años en el que no se puede definir el mejor momento de su carrera. En noviembre le vimos llorar tras el desastre que le quitó su sexto mundial y lleva desde el 1 de diciembre sin jugar por una lesión muscular que le negó superar en este curso el récord de presencias en la Serie A del que presume Paolo Maldini (647, el bianconero lleva 629).
Sin embargo Gigi, que el sábado volvió en el banquillo en la victoria de la Vecchia Signora ante el Chievo (0-2 con goles de Khedira e Higuaín y una doble expulsión para los de Maran), ha utilizado estas semanas para reflexionar y llegar a la conclusión de siempre: no rendirse. Su idea es no colgar las botas, y lo ha dejado claro en una entrevista a La Repubblica: "Siempre me consideraron un firme puntal del equipo, y si eso no cambia puedo seguir". Confesó sentir un "deseo de competir anómalo para su edad", a pesar de haberlo ganado casi todo y de ser el futbolista con más presencias en una selección europea por delante de Casillas. Sólo la Champions se le resistió, y la llegó a rozar en tres finales. Si este año llegase, su continuidad estaría asegurada: la Juve nunca le negaría jugarse el Mundial de Clubes. En caso contrario, habría que negociar.
"Soy futbolista y hasta junio solo pensaré en eso. Luego, tengo una gran amistad con el presidente, nos veremos y decidiremos". Y es verdad: tras un comienzo atormentado, la relación entre Agnelli y Buffon mejoró tanto que el portero es el padrino de la última hija del presidente, Livia Selin. Allegri, que encontró en Szczesny un heredero perfecto, le lanzó alguna señal ("Es parte de la vida, hay que aceptarlo y entender que luego llegan 40 años más para vivir"), pero Gigi sigue con las mismas ganas y el mismo orgullo: "Este año fallé con España y con el Atalanta: tuve partidos fenomenales, otros buenos y otro regulares, pero la FIFA me ha premiado como mejor portero del 2017. Me siento igual que hace seis, siete años. Esta es la verdad".
En un futuro se imagina entrenador de una selección, nunca de un club ("Quisiera concederme el lujo del aburrimiento. Además, un seleccionador une, no divide"), pero el deseo de seguir saltando al campo, ahora, sigue siendo demasiado grande. En el fondo, Zoff se retiró con 41 años, Shilton jugó en la Premier con 45: para un portero, los 40, nunca fueron una frontera infranqueable. Y si la Vecchia Signora le niega esa oportunidad, ahí se acabará todo. Imposible imaginarle con otra camiseta: "O sigo con la Juve, o nada", dijo. Con la franqueza de siempre.