Lingard con su doblete salva a Mourinho en el Boxing Day
Pinchazo del Manchester United que saca un punto ante el Burnley. Los de Sean Dyche se adelantaron con los goles de Barnes y Defour.
E.F.-Abascal
As
El Manchester United rascó un agridulce empate a dos ante el sorprendente Burnley para completar una semana negra. El equipo de Jose Mourinho fue eliminado de la Copa de La Liga por el Bristol el miércoles, empató ante el Leicester City el sábado tras encajar un gol en el minuto 94 y sólo pudo sacar otro punto ante los Clarets después de irse al descanso con 0-2 en el marcador. Así, deja vía libre a un Manchester City que podría acabar la jornada con 15 puntos de ventaja sobre los Red Devils si mañana logra la victoria en su visita al Newcastle de Rafa Benítez.
Mourinho probó por primera vez un ataque de quilates formado por Lukaku e Ibrahimovic. Rashford completaba el tridente mientras Juan Mata y Pogba ponían la calidad desde tres cuartos del campo. El experimento resultó fallido.
El United se fue con 0-2 al descanso y lo que parecía un ataque temible sobre el papel fue totalmente inofensivo en el césped. Barnes marcó el primer gol a los 2 minutos de juego tras un error de la zaga Red Devil y Defour anotó el segundo a los 35 minutos con un gran lanzamiento de falta.
El técnico portugués corrigió su alineación en el descanso con las entradas de Mkhitaryan y Lingard por Rojo e Ibrahimovic. El doble cambió tuvo un efecto inmediato. Lingard perdonó el 1-2 nada más empezar la segunda mitad pero pudo resarcirse apenas un minuto después en una jugada calcada. Young la puso desde el extremo diestro y el internacional inglés definió a la perfección con un sutil taconazo para acortar distancias.
El United cogió alas con el gol y se lanzó sin frenos a por el empate. El Burnley, sostenido por un genial Nick Pope en la portería, aguantó el tirón hasta el minuto 90 pero acabó por claudicar en el tiempo de descuento. Entonces, otra vez Lingard, tras una falta botada por Mata, aprovechó un balón muerto al borde del área para marcar el 2-2 con otro disparo bien esquinado e imparable para el portero.
E.F.-Abascal
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El Manchester United rascó un agridulce empate a dos ante el sorprendente Burnley para completar una semana negra. El equipo de Jose Mourinho fue eliminado de la Copa de La Liga por el Bristol el miércoles, empató ante el Leicester City el sábado tras encajar un gol en el minuto 94 y sólo pudo sacar otro punto ante los Clarets después de irse al descanso con 0-2 en el marcador. Así, deja vía libre a un Manchester City que podría acabar la jornada con 15 puntos de ventaja sobre los Red Devils si mañana logra la victoria en su visita al Newcastle de Rafa Benítez.
Mourinho probó por primera vez un ataque de quilates formado por Lukaku e Ibrahimovic. Rashford completaba el tridente mientras Juan Mata y Pogba ponían la calidad desde tres cuartos del campo. El experimento resultó fallido.
El United se fue con 0-2 al descanso y lo que parecía un ataque temible sobre el papel fue totalmente inofensivo en el césped. Barnes marcó el primer gol a los 2 minutos de juego tras un error de la zaga Red Devil y Defour anotó el segundo a los 35 minutos con un gran lanzamiento de falta.
El técnico portugués corrigió su alineación en el descanso con las entradas de Mkhitaryan y Lingard por Rojo e Ibrahimovic. El doble cambió tuvo un efecto inmediato. Lingard perdonó el 1-2 nada más empezar la segunda mitad pero pudo resarcirse apenas un minuto después en una jugada calcada. Young la puso desde el extremo diestro y el internacional inglés definió a la perfección con un sutil taconazo para acortar distancias.
El United cogió alas con el gol y se lanzó sin frenos a por el empate. El Burnley, sostenido por un genial Nick Pope en la portería, aguantó el tirón hasta el minuto 90 pero acabó por claudicar en el tiempo de descuento. Entonces, otra vez Lingard, tras una falta botada por Mata, aprovechó un balón muerto al borde del área para marcar el 2-2 con otro disparo bien esquinado e imparable para el portero.