Independiente vuelve a reinar en Sudamérica
Brasil, AS
Maracaná fue el lugar donde se consagró el proyecto de Ariel Holan en Independiente. El empate ante Flamengo (1-1) en el templo del fútbol brasileño hizo que el Rojo regresara a la gloria del balompié sudamericano después de varios años de ausencia en una élite que le hizo grande en los años 60 y 70.
El partido empezó con un Flamengo eléctrico, tratando de ser profundo a través de envíos al espacio a Everton y a un Paquetá que, pese al resultado, se lleva el haber dado una exhibición en una final de la Copa Sudamericana. También Felipe Vizeu amenazó durante unos minutos en el que los brasileños borraron del mapa al conjunto de Avellaneda.
Había amenazado tibiamente Independiente con algún contragolpe, pero el puñetazo sobre la mesa lo dio el equipo rubronegro. Paquetá, después de una jugada a balón a parado, consigue rematar una pelota en el segundo palo que se quedaba muerta para adelantar a su equipo. Maracaná enloquecía con el gol que empataba la eliminatoria.
El escenario del encuentro cambiaba para el Rojo. Además del tanto encajado se añadía la lesión de Martín Benítez a la lista de problemas para un equipo que parecía tocado después del gol. Pero precisamente en un contragolpe dejaría sentenciada la final. Un balón filtrado de Ezequiel Barco lo controlaría dentro del área Maxi Meza que sería derribado dentro del área. La decisión parecía dudosa, pero el VAR confirmó la decisión. Ezequiel Barco, a sus 18 años y con un pie y medio fuera de la institución, asumió el lanzamiento y lo convirtió silenciando Maracaná. El conjunto de Ariel Holan ponía la directa para conseguir el título.
En el segundo tiempo mejoró Flamengo con la entrada en el terreno de juego de Vinicius Junior. El jugador propiedad del Real Madrid revolucionó a los suyos partiendo desde la banda izquierda, pero teniendo mucha influencia en el juego ofensivo de un Mengao que peleaba más con el corazón que con la cabeza.
Un gran Martín Campaña provocó que los de Reinaldo Rueda no terminaran de encontrar el gol que les llevara a la prórroga. Gigliotti y Maxi Meza entendieron a la perfección cómo tenían que gestionar sus ataques e hicieron una segunda mitad de lo más completa, amenazando a los centrales y estirando al rival con sus desmarques. De hecho, tuvieron ocasiones para ampliar la ventaja.
Independiente consigue su primer título internacional en siete años y empieza a consolidar un proyecto que arrancó con críticas, polémica y poca credibilidad pero que se ha asentado a base de resultados, triunfos y campeonatos.
Maracaná fue el lugar donde se consagró el proyecto de Ariel Holan en Independiente. El empate ante Flamengo (1-1) en el templo del fútbol brasileño hizo que el Rojo regresara a la gloria del balompié sudamericano después de varios años de ausencia en una élite que le hizo grande en los años 60 y 70.
El partido empezó con un Flamengo eléctrico, tratando de ser profundo a través de envíos al espacio a Everton y a un Paquetá que, pese al resultado, se lleva el haber dado una exhibición en una final de la Copa Sudamericana. También Felipe Vizeu amenazó durante unos minutos en el que los brasileños borraron del mapa al conjunto de Avellaneda.
Había amenazado tibiamente Independiente con algún contragolpe, pero el puñetazo sobre la mesa lo dio el equipo rubronegro. Paquetá, después de una jugada a balón a parado, consigue rematar una pelota en el segundo palo que se quedaba muerta para adelantar a su equipo. Maracaná enloquecía con el gol que empataba la eliminatoria.
El escenario del encuentro cambiaba para el Rojo. Además del tanto encajado se añadía la lesión de Martín Benítez a la lista de problemas para un equipo que parecía tocado después del gol. Pero precisamente en un contragolpe dejaría sentenciada la final. Un balón filtrado de Ezequiel Barco lo controlaría dentro del área Maxi Meza que sería derribado dentro del área. La decisión parecía dudosa, pero el VAR confirmó la decisión. Ezequiel Barco, a sus 18 años y con un pie y medio fuera de la institución, asumió el lanzamiento y lo convirtió silenciando Maracaná. El conjunto de Ariel Holan ponía la directa para conseguir el título.
En el segundo tiempo mejoró Flamengo con la entrada en el terreno de juego de Vinicius Junior. El jugador propiedad del Real Madrid revolucionó a los suyos partiendo desde la banda izquierda, pero teniendo mucha influencia en el juego ofensivo de un Mengao que peleaba más con el corazón que con la cabeza.
Un gran Martín Campaña provocó que los de Reinaldo Rueda no terminaran de encontrar el gol que les llevara a la prórroga. Gigliotti y Maxi Meza entendieron a la perfección cómo tenían que gestionar sus ataques e hicieron una segunda mitad de lo más completa, amenazando a los centrales y estirando al rival con sus desmarques. De hecho, tuvieron ocasiones para ampliar la ventaja.
Independiente consigue su primer título internacional en siete años y empieza a consolidar un proyecto que arrancó con críticas, polémica y poca credibilidad pero que se ha asentado a base de resultados, triunfos y campeonatos.