El Roma hace los deberes y gana el grupo de la muerte
El conjunto italiano sufrió más de lo esperado pero venció con un tanto de Perotti que le permite terminar primero de grupo. Espera rival en octavos.
Mirko Calemme
As
El Roma volverá a disputar un octavo de Champions tras dos años. Fue más sufrido de lo esperado, pero el conjunto italiano hizo los deberes y logró un objetivo que, en agosto, parecía hasta utópico. Nadie, entre los giallorossi, subestimaba a este Qarabag, que ya le jugó una mala broma al Atleti. Los italianos, quizás, respetaron hasta demasiado a los de Gurbanov en una primera mitad que empezaron jugando con un ritmo demasiado bajo. Al acercarse el descanso, los romanisti se despertaron, pero con poca puntería.
Cuando el miedo a un pinchazo absurdo empezaba a apoderarse del Olímpico, apareció Perotti: en el 53', un taconazo de Strootman libró a Dzeko, cuyo chut fue neutralizado por Sehic, pero el ex del Sevilla aprovechó el rechace y empujó el balón entre palos con la cabeza. A partir de entonces, los giallorossi trataron de quedarse en el área rival durante el mayor tiempo posible, pero justo un español, Michel, le dio un buen susto a los italianos con un testarazo tras un centro de Guerrier, pero su conclusión fue central y Alisson pudo atajarla sin problemas. Antes del pitido final, Kolarov y Dzeko tuvieron en sus botas el 2-0, pero fueron los azeríes a protagonizar una última jugada que no creó peligro, pero sí tuvo al Olímpico agobiado y pidiendo la hora.
No hubo sorpresa: Di Francesco y Monchi se llevaron los tres puntos y la satisfacción de ganar un grupo de la muerte, acabando por delante del Chelsea y eliminando al Atlético de Madrid. La nueva etapa de este Roma no podía empezar mejor.
Mirko Calemme
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El Roma volverá a disputar un octavo de Champions tras dos años. Fue más sufrido de lo esperado, pero el conjunto italiano hizo los deberes y logró un objetivo que, en agosto, parecía hasta utópico. Nadie, entre los giallorossi, subestimaba a este Qarabag, que ya le jugó una mala broma al Atleti. Los italianos, quizás, respetaron hasta demasiado a los de Gurbanov en una primera mitad que empezaron jugando con un ritmo demasiado bajo. Al acercarse el descanso, los romanisti se despertaron, pero con poca puntería.
Cuando el miedo a un pinchazo absurdo empezaba a apoderarse del Olímpico, apareció Perotti: en el 53', un taconazo de Strootman libró a Dzeko, cuyo chut fue neutralizado por Sehic, pero el ex del Sevilla aprovechó el rechace y empujó el balón entre palos con la cabeza. A partir de entonces, los giallorossi trataron de quedarse en el área rival durante el mayor tiempo posible, pero justo un español, Michel, le dio un buen susto a los italianos con un testarazo tras un centro de Guerrier, pero su conclusión fue central y Alisson pudo atajarla sin problemas. Antes del pitido final, Kolarov y Dzeko tuvieron en sus botas el 2-0, pero fueron los azeríes a protagonizar una última jugada que no creó peligro, pero sí tuvo al Olímpico agobiado y pidiendo la hora.
No hubo sorpresa: Di Francesco y Monchi se llevaron los tres puntos y la satisfacción de ganar un grupo de la muerte, acabando por delante del Chelsea y eliminando al Atlético de Madrid. La nueva etapa de este Roma no podía empezar mejor.