El Nápoles cierra su gran 2017 como campeón de invierno
Un solitario tanto de Hamsik, a los 17 minutos de juego, dio los tres puntos a los napolitanos que de esta forma cerrarán el año en el primer puesto.
Mirko Calemme
As
El Nápoles cerró un 2017 casi perfecto coronándose campeón de invierno de la Serie A gracias a una victoria por la mínima (y algo sufrida) en el campo del Crotone. Los de Sarri dominaron la primera mitad, pero lograron marcar solo un gol, que fue el decisivo. Lo firmó Marek Hamsik, que desde que alcanzó (y superó) el récord de Maradona está imparable. El eslovaco llevaba una diana en las primeras 16 jornadas, y ha firmado en el Scida la tercera en las últimas tres con un zurdazo cruzado. Ahora suma 117 con la camiseta azzurra, dos más que el Pelusa.
Insigne estuvo a un paso del 2-0 antes del descanso, con un derechazo que Cordaz desvió fuera, y en el principio de la reanudación, con una rosca a lo Del Piero que se estampó en el larguero. El conjunto de Zenga, por su parte, se despertó en la segunda mitad, obligando a Reina, con Trotta y Crociata, a ejecutar dos paradas decisivas para salvar a los suyos.
En la otra portería, Cordaz también fue protagonista negándole el 0-2 a Diawara y Callejón. Su falta de puntería dejó a los calabreses (que en el último minuto pidieron un penalti por falta de Maggio sobre Ceccherini, negado por un 'silent check' del VAR) con vida hasta el final, pero el Nápoles al final se llevó los tres puntos acabando un año en el que, en la liga, estuvo impecable: logró 99 puntos (48 en este campeonato) y terminó, único equipo de las cinco mejores ligas de Europa, imbatido fuera de casa, con 18 victorias y 2 empates. Sumando estos datos al hecho que, en los últimos diez años, sólo una vez el campeón de invierno no se llevó el Scudetto (en 2015, y fueron los mismos partenopei), bajo el Vesuvio se hace imposible no soñar con un triunfo que se espera desde 1990.
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El Nápoles cerró un 2017 casi perfecto coronándose campeón de invierno de la Serie A gracias a una victoria por la mínima (y algo sufrida) en el campo del Crotone. Los de Sarri dominaron la primera mitad, pero lograron marcar solo un gol, que fue el decisivo. Lo firmó Marek Hamsik, que desde que alcanzó (y superó) el récord de Maradona está imparable. El eslovaco llevaba una diana en las primeras 16 jornadas, y ha firmado en el Scida la tercera en las últimas tres con un zurdazo cruzado. Ahora suma 117 con la camiseta azzurra, dos más que el Pelusa.
Insigne estuvo a un paso del 2-0 antes del descanso, con un derechazo que Cordaz desvió fuera, y en el principio de la reanudación, con una rosca a lo Del Piero que se estampó en el larguero. El conjunto de Zenga, por su parte, se despertó en la segunda mitad, obligando a Reina, con Trotta y Crociata, a ejecutar dos paradas decisivas para salvar a los suyos.
En la otra portería, Cordaz también fue protagonista negándole el 0-2 a Diawara y Callejón. Su falta de puntería dejó a los calabreses (que en el último minuto pidieron un penalti por falta de Maggio sobre Ceccherini, negado por un 'silent check' del VAR) con vida hasta el final, pero el Nápoles al final se llevó los tres puntos acabando un año en el que, en la liga, estuvo impecable: logró 99 puntos (48 en este campeonato) y terminó, único equipo de las cinco mejores ligas de Europa, imbatido fuera de casa, con 18 victorias y 2 empates. Sumando estos datos al hecho que, en los últimos diez años, sólo una vez el campeón de invierno no se llevó el Scudetto (en 2015, y fueron los mismos partenopei), bajo el Vesuvio se hace imposible no soñar con un triunfo que se espera desde 1990.
