España, la única de las grandes Ligas sin ojo de halcón
El gol no concedido a Messi enciende el debate sobre una tecnología que ya funciona en Alemania, Francia, Inglaterra e Italia
Antonio Nieto
El País
Cuando el fútbol español andaba pendiente del VAR (sistema de videoarbitraje en sus siglas en inglés), cuya llegada se producirá la temporada que viene, Mestalla volvió a dejar al descubierto el domingo otra de las carencias tecnológicas de la Liga: el conocido como ojo de halcón, la herramienta que tiene como objetivo acabar con los goles fantasma.
El tanto no concedido a Messi en el eléctrico duelo entre Valencia y Barça ha encendido el debate sobre la aplicación del sistema de detección automática de goles (GLT, goal line technology en sus siglas en inglés). El disparo del argentino botó dentro de la portería de Neto, pero ni el árbitro ni los asistentes validaron el tanto. A partir de la temporada que viene el VAR solucionará los casos en los que el “gol sea tremendamente claro”, como explicó hace unos días Carlos Velasco Carballo, instructor FIFA del VAR, en la Cadena Ser. “La garantía absoluta solo te la da la GLT”.
España, la única de las grandes Ligas sin ojo de halcón
La Liga española es la única gran competición que no cuenta con esta ayuda para el arbitraje, cuyo uso se permite desde 2012. La Premier fue la primera en implementarlo en el curso 2013-2014; la Bundesliga lo tiene desde hace dos temporadas, igual que la Ligue 1 francesa y la Serie A, en Italia.
La tecnología que usan todas estas grandes Ligas se basa en la colocación de 14 cámaras de alta frecuencia en el techo de los estadios. Siete por cada portería, que con tecnología de localización 4D sitúan el balón incluso cuando solo es visible una parte pequeña. La FIFA también homologó un sistema basado en campos magnéticos, pero no se emplea.
Inglaterra, Alemania e Italia cerraron acuerdos con Hawk-Eye, propiedad de Sony, presente desde hace años en el tenis, mientras que Francia utiliza la tecnología de otro de los proveedores autorizados por la FIFA, la empresa alemana Goal Control, que actuó en el Mundial de Brasil 2014 y en el femenino de 2015, entre otros torneos. “El árbitro decide en tiempo real si es gol o no con una precisión de cinco milímetros”, matiza Javier Blasco, jefe de área de Goal Control, quien asegura la compañía alemana ha ofrecido sus servicios a la La Liga en varias ocasiones. “Ahora se dirigen a la tecnología del VAR, pero la GLT no la piensan implementar”.
El debate en España cobró ya fuerza en enero precisamente en otra jugada que afectó al Barcelona, después de que un gol en propia meta del Betis no subiera al marcador. Tebas, presidente de la Liga, admitió entonces que en su día desechó el ojo de halcón por el precio, que situó en torno a los cuatro millones de euros, y porque solo había dos empresas homologadas. Ahora, desde la Liga explican que este tipo de cosas no las pueden hacer por su cuenta y riesgo y que es la federación quien tiene que aprobarlo. “Hay una oferta económica que imagino que estará encima de la mesa”, replica Blasco.
Antonio Nieto
El País
Cuando el fútbol español andaba pendiente del VAR (sistema de videoarbitraje en sus siglas en inglés), cuya llegada se producirá la temporada que viene, Mestalla volvió a dejar al descubierto el domingo otra de las carencias tecnológicas de la Liga: el conocido como ojo de halcón, la herramienta que tiene como objetivo acabar con los goles fantasma.
El tanto no concedido a Messi en el eléctrico duelo entre Valencia y Barça ha encendido el debate sobre la aplicación del sistema de detección automática de goles (GLT, goal line technology en sus siglas en inglés). El disparo del argentino botó dentro de la portería de Neto, pero ni el árbitro ni los asistentes validaron el tanto. A partir de la temporada que viene el VAR solucionará los casos en los que el “gol sea tremendamente claro”, como explicó hace unos días Carlos Velasco Carballo, instructor FIFA del VAR, en la Cadena Ser. “La garantía absoluta solo te la da la GLT”.
España, la única de las grandes Ligas sin ojo de halcón
La Liga española es la única gran competición que no cuenta con esta ayuda para el arbitraje, cuyo uso se permite desde 2012. La Premier fue la primera en implementarlo en el curso 2013-2014; la Bundesliga lo tiene desde hace dos temporadas, igual que la Ligue 1 francesa y la Serie A, en Italia.
La tecnología que usan todas estas grandes Ligas se basa en la colocación de 14 cámaras de alta frecuencia en el techo de los estadios. Siete por cada portería, que con tecnología de localización 4D sitúan el balón incluso cuando solo es visible una parte pequeña. La FIFA también homologó un sistema basado en campos magnéticos, pero no se emplea.
Inglaterra, Alemania e Italia cerraron acuerdos con Hawk-Eye, propiedad de Sony, presente desde hace años en el tenis, mientras que Francia utiliza la tecnología de otro de los proveedores autorizados por la FIFA, la empresa alemana Goal Control, que actuó en el Mundial de Brasil 2014 y en el femenino de 2015, entre otros torneos. “El árbitro decide en tiempo real si es gol o no con una precisión de cinco milímetros”, matiza Javier Blasco, jefe de área de Goal Control, quien asegura la compañía alemana ha ofrecido sus servicios a la La Liga en varias ocasiones. “Ahora se dirigen a la tecnología del VAR, pero la GLT no la piensan implementar”.
El debate en España cobró ya fuerza en enero precisamente en otra jugada que afectó al Barcelona, después de que un gol en propia meta del Betis no subiera al marcador. Tebas, presidente de la Liga, admitió entonces que en su día desechó el ojo de halcón por el precio, que situó en torno a los cuatro millones de euros, y porque solo había dos empresas homologadas. Ahora, desde la Liga explican que este tipo de cosas no las pueden hacer por su cuenta y riesgo y que es la federación quien tiene que aprobarlo. “Hay una oferta económica que imagino que estará encima de la mesa”, replica Blasco.