El CSKA depende de sí mismo para entrar en octavos de final
Venció al Benfica con goles de Schennikov y Jardel en propia meta. Se jugará el pase ante el United en Old Trafford. Los portugueses suman cinco derrotas y están eliminados.
Quique Rubio
As
El CSKA dio un paso de gigante en su lucha por clasificarse para los octavos de final de la Champions. Los rusos vencieron a un Benfica (2-0) que sumó su quinta derrota en cinco partidos en la máxima competición europea y se queda sin opciones de entrar ni en la Europa League. Así, los de Goncharenko se colocan segundos y dependen de sí mismos para clasificarse de cara a la próxima ronda, aunque tendrá que visitar Old Trafford en la última jornada.
El partido fue dominado por el conjunto local prácticamente de principio a fin. O, al menos, el CSKA supo meter una marcha más y se mostró más efectivo en momentos importantes del choque. Como el primer tanto, que consiguió en fuera de juego Schennikov tras pase de Natcho. El israelí vio el desmarque del extremo y este, adelantado a la defensa, batió al meta Varela con tranquilidad. Apenas habían pasado 12 minutos y los rusos hacían sus deberes. Goncharenko volvió a apostar como en los últimos partidos con Wernbloom, habitualmente pivote defensivo, como delantero centro. Y no le salió nada mal pues, además de ser el primer defensor, el sueco ganó la mayoría de balones aéreos para la velocidad de Vitinho y la clase de Dzagoev. Este último tuvo el 2-0 en la medianía de la primera parte, pero Varela sacó espectaculamente una falta directa que iba a la escuadra. Ahí prácticamente murió la primera parte. Al Benfica le costaba entrar en el partido y la más clara que tuvo fue poco antes del descanso, cuando Akinfeev atrapó un intencionado pero flojito chut de Eliseu.
Tras el paso por vestuarios, nada cambió. El héroe de la primera mitad, Schennikov, que estuvo prácticamente los primeros 45 minutos cojeando, tuvo que ser sustituido. Y diez minutos después, otra vez en un tramo decisivo del encuentro, llegó la puntilla del CSKA. Espectacular contra conducida por la derecha, la pelota le llegó al Vitinho quien ganó línea de fondo dentro del área, buscó la asistencia y vio cómo su compatriota Jardel se marcaba en propia meta. Mala suerte para el central en Moscú pues hace unos años se marcó otro tanto en propia meta, aunque en aquella ocasión enfrentándose al Spartak. Tras el tanto, el Benfica intentó apretar con más orgullo que fútbol. Su Champions ha sido para el olvido: ha perdido los cinco partidos que ha disputado y solamente ha marcado un tanto. Malos tiempos para el conjunto portugués, que ni tan siquiera disputará la Europa League. Mientras, el CSKA hizo sus deberes y ahora seguirá con atención lo que haga el Basilea ante el United. Su final será en Old Trafford contra el equipo de Mourinho y dependerá de sí mismo para estar entre los 16 mejores equipos de Europa...
Quique Rubio
As
El CSKA dio un paso de gigante en su lucha por clasificarse para los octavos de final de la Champions. Los rusos vencieron a un Benfica (2-0) que sumó su quinta derrota en cinco partidos en la máxima competición europea y se queda sin opciones de entrar ni en la Europa League. Así, los de Goncharenko se colocan segundos y dependen de sí mismos para clasificarse de cara a la próxima ronda, aunque tendrá que visitar Old Trafford en la última jornada.
El partido fue dominado por el conjunto local prácticamente de principio a fin. O, al menos, el CSKA supo meter una marcha más y se mostró más efectivo en momentos importantes del choque. Como el primer tanto, que consiguió en fuera de juego Schennikov tras pase de Natcho. El israelí vio el desmarque del extremo y este, adelantado a la defensa, batió al meta Varela con tranquilidad. Apenas habían pasado 12 minutos y los rusos hacían sus deberes. Goncharenko volvió a apostar como en los últimos partidos con Wernbloom, habitualmente pivote defensivo, como delantero centro. Y no le salió nada mal pues, además de ser el primer defensor, el sueco ganó la mayoría de balones aéreos para la velocidad de Vitinho y la clase de Dzagoev. Este último tuvo el 2-0 en la medianía de la primera parte, pero Varela sacó espectaculamente una falta directa que iba a la escuadra. Ahí prácticamente murió la primera parte. Al Benfica le costaba entrar en el partido y la más clara que tuvo fue poco antes del descanso, cuando Akinfeev atrapó un intencionado pero flojito chut de Eliseu.
Tras el paso por vestuarios, nada cambió. El héroe de la primera mitad, Schennikov, que estuvo prácticamente los primeros 45 minutos cojeando, tuvo que ser sustituido. Y diez minutos después, otra vez en un tramo decisivo del encuentro, llegó la puntilla del CSKA. Espectacular contra conducida por la derecha, la pelota le llegó al Vitinho quien ganó línea de fondo dentro del área, buscó la asistencia y vio cómo su compatriota Jardel se marcaba en propia meta. Mala suerte para el central en Moscú pues hace unos años se marcó otro tanto en propia meta, aunque en aquella ocasión enfrentándose al Spartak. Tras el tanto, el Benfica intentó apretar con más orgullo que fútbol. Su Champions ha sido para el olvido: ha perdido los cinco partidos que ha disputado y solamente ha marcado un tanto. Malos tiempos para el conjunto portugués, que ni tan siquiera disputará la Europa League. Mientras, el CSKA hizo sus deberes y ahora seguirá con atención lo que haga el Basilea ante el United. Su final será en Old Trafford contra el equipo de Mourinho y dependerá de sí mismo para estar entre los 16 mejores equipos de Europa...