Dolor y pesadillas, los recuerdos a un año del accidente de LaMia
El 28 de noviembre de 2016, en el avión accidentado de LaMia viajaban 77 personas, de ellas 71 fallecieron y seis sobrevivieron.
ANF
Erwin Tumiri, el mecánico boliviano de aviación que sobrevivió a la tragedia aérea del club Chapecoense, pidió este martes mayor responsabilidad en la ejecución del trabajo aeronáutico.
“Justicia no puedo pedir, papá Dios sabe cómo y hasta cuándo vamos a estar aquí, yo lo único que pido a la familia aeronáutica de Bolivia es que seamos más responsables, hagamos las cosas como tiene que ser y ya dejémonos de hacer (otras) cosas, la política y todo eso, hay que seguir tal como dicen los manuales y todo eso”, afirmó Tumiri en Unitel.
Tumiri hizo esa declaración al momento de recordar el primer año del accidente aéreo que sufrió en Colombia un avión de la empresa LaMia en el momento en que transportaba al equipo fútbol brasileño, Chapecoense.
Tumiri dijo que es muy doloroso volver a recordar el día de la tragedia o volver a ver los videos de ese accidente.
“Duele recordar, para mí es muy doloroso (…) desde ese día mi vida cambió mucho, yo siento como una segunda oportunidad (de vida) que me dio Dios, estoy muy agradecido con él”, señaló.
Ximena Suárez, la azafata boliviana que sobrevivió al accidente aéreo del club Chapecoense, reveló que tiene mucho miedo a la oscuridad desde el día de la tragedia.
“Tengo pesadillas, le tengo miedo a la oscuridad, desde esa noche no puedo dormir con la luz apagada, no puedo estar en un lugar que está oscuro”, dijo Suárez, en una entrevista concedida al programa “Que No Me Pierda”.
Agregó que tenía pesadillas frecuentes, principalmente en los primeros meses después del accidente, que sufrió un avión de la empresa LaMia.
“Luego gracias a Dios han bajado las pesadillas, pero también estoy tomando pastillas para dormir y calmantes porque a veces tengo recaídas, aunque trato de ser fuerte, por mis hijos tengo que seguir adelante”, remarcó.
Señaló que el tratar de aprender a vivir con los recuerdos del accidente fue lo más difícil de superar en este primer año de la tragedia aérea.
“Hay que aceptar lo que pasó, pero no aceptaba (al principio), me levantaba en las mañanas y a veces no creía lo que estaba pasando o lo que había pasado, luego veía mis heridas y decía es cierto para después ponerme a llorar”, relató.
Tumiri continúa con su trabajo de mecánico de aviación y también sigue con sus estudios de piloto comercial y Suárez retomó sus estudios universitarios y trata de ayudar a otras personas a partir de la experiencia que vivió.
El 28 de noviembre de 2016, en el avión accidentado de LaMia viajaban 77 personas, de ellas 71 fallecieron y seis sobrevivieron.
Erwin Tumiri, el mecánico boliviano de aviación que sobrevivió a la tragedia aérea del club Chapecoense, pidió este martes mayor responsabilidad en la ejecución del trabajo aeronáutico.
“Justicia no puedo pedir, papá Dios sabe cómo y hasta cuándo vamos a estar aquí, yo lo único que pido a la familia aeronáutica de Bolivia es que seamos más responsables, hagamos las cosas como tiene que ser y ya dejémonos de hacer (otras) cosas, la política y todo eso, hay que seguir tal como dicen los manuales y todo eso”, afirmó Tumiri en Unitel.
Tumiri hizo esa declaración al momento de recordar el primer año del accidente aéreo que sufrió en Colombia un avión de la empresa LaMia en el momento en que transportaba al equipo fútbol brasileño, Chapecoense.
Tumiri dijo que es muy doloroso volver a recordar el día de la tragedia o volver a ver los videos de ese accidente.
“Duele recordar, para mí es muy doloroso (…) desde ese día mi vida cambió mucho, yo siento como una segunda oportunidad (de vida) que me dio Dios, estoy muy agradecido con él”, señaló.
Ximena Suárez, la azafata boliviana que sobrevivió al accidente aéreo del club Chapecoense, reveló que tiene mucho miedo a la oscuridad desde el día de la tragedia.
“Tengo pesadillas, le tengo miedo a la oscuridad, desde esa noche no puedo dormir con la luz apagada, no puedo estar en un lugar que está oscuro”, dijo Suárez, en una entrevista concedida al programa “Que No Me Pierda”.
Agregó que tenía pesadillas frecuentes, principalmente en los primeros meses después del accidente, que sufrió un avión de la empresa LaMia.
“Luego gracias a Dios han bajado las pesadillas, pero también estoy tomando pastillas para dormir y calmantes porque a veces tengo recaídas, aunque trato de ser fuerte, por mis hijos tengo que seguir adelante”, remarcó.
Señaló que el tratar de aprender a vivir con los recuerdos del accidente fue lo más difícil de superar en este primer año de la tragedia aérea.
“Hay que aceptar lo que pasó, pero no aceptaba (al principio), me levantaba en las mañanas y a veces no creía lo que estaba pasando o lo que había pasado, luego veía mis heridas y decía es cierto para después ponerme a llorar”, relató.
Tumiri continúa con su trabajo de mecánico de aviación y también sigue con sus estudios de piloto comercial y Suárez retomó sus estudios universitarios y trata de ayudar a otras personas a partir de la experiencia que vivió.
El 28 de noviembre de 2016, en el avión accidentado de LaMia viajaban 77 personas, de ellas 71 fallecieron y seis sobrevivieron.
