El Valencia se sitúa segundo tras un partido de locura en Sevilla
Los de Marcelino se llevaron la victoria en un partido loco en el que casi les remontan un 0-4. Los de Setién reaccionaron tarde.
Conrado Valle
As
La razón y la locura se dieron cita en Sevilla. Por la primera ganó el Valencia, porque supo hacer suyo el partido y demostró ser mejor durante 78’. Por la segunda el Betis hasta soñó con puntuar. La esquizofrenia del fútbol apareció en los últimos 12’ por mera cuestión de fe del Betis, que se creyó capacitado para remontar una desventaja de 0-4, aunque a los goles de Campbell, Sanabria y Tello respondieron después Zaza y Pereira, dejando el festival del fútbol con el que se cerró la jornada dominical en un 3-6 que deja al Valencia segundo en Liga.
Porque el Valencia, minutos de locura al margen, no va de broma. Va muy en serio. Los blanquinegros sí se lo creen. Tiene entrenador y buenos peloteros. Pero sobre todo tiene equipo. Lo es y juega como tal. La del Valencia fue una victoria de autoridad. Contudente. Por la forma y el fondo. En el Benito Villamarín se fue adueñando del partido sin el Betis saber cómo. Y no es que los de Setién no quisieran. Ni de primeras ni como se demostró tampoco de últimas. De ahí que su gente le agraciera el esfuerzo pese a encajar 6 en casa.
De salida los Setién impusieron más su estilo. Pero entorno a la media hora Kondogbia se hizo el amo de la ‘zona Javi García’ y por ahí empezó la masacre. El francés y Guedes, golazo el del portugués, hicieron que el Valencia se fuera con 0-2 al descanso. Ellos y Neto, que apareció en dos momentos claves: en una falta que sacó Joaquín con 0-1 y en el penalti que le paró a Sergio León con 0-2, un penalti por manos de Kondogbia bastante menos claro que uno no pitado de Durmisi a Carlos Soler.
Rodrigo hacía el 0-3 de nuevo tras un error defensivo tras un córner y la puntilla parecía ponerla Santi Mina. Pero fue reaparecer Campbell en el césped del Villamarín y el partido desmelenarse. Al Valencia se le cruzaron los cables y dejó que entre el costarricense, Sanabria y Tello le pusieran en tela de juicio su trabajada victoria. Pero primero Zaza y después Andreas Pereira dejaron la remontada en nada.
As
La razón y la locura se dieron cita en Sevilla. Por la primera ganó el Valencia, porque supo hacer suyo el partido y demostró ser mejor durante 78’. Por la segunda el Betis hasta soñó con puntuar. La esquizofrenia del fútbol apareció en los últimos 12’ por mera cuestión de fe del Betis, que se creyó capacitado para remontar una desventaja de 0-4, aunque a los goles de Campbell, Sanabria y Tello respondieron después Zaza y Pereira, dejando el festival del fútbol con el que se cerró la jornada dominical en un 3-6 que deja al Valencia segundo en Liga.
Porque el Valencia, minutos de locura al margen, no va de broma. Va muy en serio. Los blanquinegros sí se lo creen. Tiene entrenador y buenos peloteros. Pero sobre todo tiene equipo. Lo es y juega como tal. La del Valencia fue una victoria de autoridad. Contudente. Por la forma y el fondo. En el Benito Villamarín se fue adueñando del partido sin el Betis saber cómo. Y no es que los de Setién no quisieran. Ni de primeras ni como se demostró tampoco de últimas. De ahí que su gente le agraciera el esfuerzo pese a encajar 6 en casa.
De salida los Setién impusieron más su estilo. Pero entorno a la media hora Kondogbia se hizo el amo de la ‘zona Javi García’ y por ahí empezó la masacre. El francés y Guedes, golazo el del portugués, hicieron que el Valencia se fuera con 0-2 al descanso. Ellos y Neto, que apareció en dos momentos claves: en una falta que sacó Joaquín con 0-1 y en el penalti que le paró a Sergio León con 0-2, un penalti por manos de Kondogbia bastante menos claro que uno no pitado de Durmisi a Carlos Soler.
Rodrigo hacía el 0-3 de nuevo tras un error defensivo tras un córner y la puntilla parecía ponerla Santi Mina. Pero fue reaparecer Campbell en el césped del Villamarín y el partido desmelenarse. Al Valencia se le cruzaron los cables y dejó que entre el costarricense, Sanabria y Tello le pusieran en tela de juicio su trabajada victoria. Pero primero Zaza y después Andreas Pereira dejaron la remontada en nada.
