Zaza deja a Michel a tiro de tuit
Festival del Valencia, con hat-trick de Zaza, que se reconcilió con Marcelino y Mestalla tras su enfado del derbi. Santi Mina abrió el marcador y Rodrigo lo cerró.
Conrado Valle
As
Suena Míchel, y no para bien. El partido de Mestalla tenía dos protagonistas: Zaza y el técnico. Uno, el italiano, se marchó por la puerta grande; otro, el madrileño, ya veremos cómo sale de ésta. Se queda a un paso del abismo. A un tuit del jeque. Cero ‘points’ tras cinco jornadas. Poca defensa tiene ello. Para más inri su Málaga cayó por paliza, la que le propinó el Valencia de Marcelino y en particular Zaza, que firmó su primer hat-trick como profesional y puso paz tras ‘enrerar’ sin necesidad por verse suplente contra el Levante.
Marcelino piropeó el lunes a Rodrigo como pocas veces a un futbolista, si bien, el hispano-brasileño fue uno de los cuatro jugadores que entraron en las rotaciones del asturiano. Él, Garay, Gayà y Pereira. Su apuesta por darle continuidad a Santi Mina obtuvo premio: el primer gol. El gallego remató de cabeza un preciso centro de Carlos Soler, un chico que está en todas y cuya influencia en el juego colectivo ché va a más
Por Rodrigo jugó Zaza, a la postre el protagonista de la velada. Al italiano, en la primera mitad, le hicieron un penalti tan claro (Iturralde González afirmó que no existió jugada punible en la acción con el meta Roberto) como lo fue la ocasión que falló en esa acción. Pero ya en la segunda, Zaza se desmelenó, y eso que va rapado. Se reconcilió consigo mismo y con Mestalla, que prefiere gladiadores cabreados que futbolistas políticamente correctos.
El Málaga, llegados al vendaval Zaza, se lamentaba de sus ocasiones malogradas. Las que tuvieron Rolán, Jony y Mula antes del descanso. Ellos y Cifu eran los más incisivos. Pero a los tres les faltó acierto para superar a Neto, ese que no ha tenido el Málaga en cinco jornadas y de ahí que solo lleven un gol a favor. El equipo de Míchel careció de constancia en sus acciones y solo aguantó el tipo 54’. Hasta que apareció Zaza e hizo añicos cualquier excusa. Porque esta vez el Málaga no perdió por la mínima. Le cayeron 5. Y pudieron ser más. El último de Rodrigo, por cierto.
Conrado Valle
As
Suena Míchel, y no para bien. El partido de Mestalla tenía dos protagonistas: Zaza y el técnico. Uno, el italiano, se marchó por la puerta grande; otro, el madrileño, ya veremos cómo sale de ésta. Se queda a un paso del abismo. A un tuit del jeque. Cero ‘points’ tras cinco jornadas. Poca defensa tiene ello. Para más inri su Málaga cayó por paliza, la que le propinó el Valencia de Marcelino y en particular Zaza, que firmó su primer hat-trick como profesional y puso paz tras ‘enrerar’ sin necesidad por verse suplente contra el Levante.
Marcelino piropeó el lunes a Rodrigo como pocas veces a un futbolista, si bien, el hispano-brasileño fue uno de los cuatro jugadores que entraron en las rotaciones del asturiano. Él, Garay, Gayà y Pereira. Su apuesta por darle continuidad a Santi Mina obtuvo premio: el primer gol. El gallego remató de cabeza un preciso centro de Carlos Soler, un chico que está en todas y cuya influencia en el juego colectivo ché va a más
Por Rodrigo jugó Zaza, a la postre el protagonista de la velada. Al italiano, en la primera mitad, le hicieron un penalti tan claro (Iturralde González afirmó que no existió jugada punible en la acción con el meta Roberto) como lo fue la ocasión que falló en esa acción. Pero ya en la segunda, Zaza se desmelenó, y eso que va rapado. Se reconcilió consigo mismo y con Mestalla, que prefiere gladiadores cabreados que futbolistas políticamente correctos.
El Málaga, llegados al vendaval Zaza, se lamentaba de sus ocasiones malogradas. Las que tuvieron Rolán, Jony y Mula antes del descanso. Ellos y Cifu eran los más incisivos. Pero a los tres les faltó acierto para superar a Neto, ese que no ha tenido el Málaga en cinco jornadas y de ahí que solo lleven un gol a favor. El equipo de Míchel careció de constancia en sus acciones y solo aguantó el tipo 54’. Hasta que apareció Zaza e hizo añicos cualquier excusa. Porque esta vez el Málaga no perdió por la mínima. Le cayeron 5. Y pudieron ser más. El último de Rodrigo, por cierto.