Israel derriba un dron de fabricación iraní en el Golán
El avión no tripulado manejado por Hezbolá fue interceptado por un misil Patriot
Juan Carlos Sanz
Jerusalén, El País
Pocas horas antes de la intervención del primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, este martes ante la Asamblea General de la ONU, el Ejército derribó un dron de fabricación iraní que se había infiltrado en los Altos del Golán, una región siria ocupado por Israel desde hace 50 años. Según informó un portavoz de las Fuerzas Armadas israelíes, el aparato no tripulado había despegado de una base militar en Damasco en una misión de reconocimiento para Hezbolá, y se internó en la zona desmilitarizada situada entre la meseta del Golán y el territorio bajo control de Siria.
Varios cazas despegaron de inmediato ante la amenaza, pero no llegaron a disparar contra el dron, a pesar de que se había aproximado a una distancia inusualmente cercana de posiciones israelíes. Fue finalmente interceptado por un misil Patriot del sistema de defensa antiaérea del Estado hebreo, y sus restos cayeron en una zona próxima a la ciudad siria de Quneitra.
Netanyahu ya anticipó el lunes al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, su preocupación por el creciente despliegue iraní en Siria, junto con milicias chiíes que también luchan como aliados en las filas del Ejército leal al régimen del presidente Bachar el Asad. El jefe del Ejecutivo israelí centró buena parte de su intervención ante el máximo foro de la ONU en la amenaza que Israel percibe, en la etapa final de la guerra siria, por el incremento de la presencia de fuerzas enemigas en sus fronteras.
El pasado mes de abril ya fue derribado por un misil tierra-aire un avión no tripulado en la misma zona, donde Israel responde sistemáticamente con represalias contra el Ejército sirio ante cualquier caída accidental de proyectiles procedentes de los combates en los más de seis años de guerra en el país árabe. Hace apenas dos semanas, cazabombarderos israelíes destruyeron una fábrica de armas químicas en el noroeste de Siria, en un ataque en el que murieron dos personas.
El jefe saliente de las Fuerzas Aéreas, el general Amir Eshel, confirmó recientemente que Israel ha intervenido en un centenar de ocasiones contra arsenales y convoyes de transporte de armamento de Hezbolá a lo largo del conflicto en Siria. El pasado mes de marzo, tras una de esas incursiones, el Ejército sirio disparó misiles contra los aviones de combate israelíes, en el considerado incidente más grave entre ambos países en seis años. El escudo antimisiles Arrow interceptó uno de los cohetes cuando iba a impactar en un área situada al norte de Jerusalén.
Israel sigue técnicamente en estado de guerra con Siria desde que en 1949 selló un armisticio con los países árabes que intentaron impedir la creación del Estado judío, y después de los conflictos armados de 1967, cuando se apoderó de los Altos del Golán, y de 1973, en el que Damasco trató de recuperar si éxito el territorio montañoso, que sería posteriormente anexionado por el Gobierno israelí sin aprobación internacional.
Juan Carlos Sanz
Jerusalén, El País
Pocas horas antes de la intervención del primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, este martes ante la Asamblea General de la ONU, el Ejército derribó un dron de fabricación iraní que se había infiltrado en los Altos del Golán, una región siria ocupado por Israel desde hace 50 años. Según informó un portavoz de las Fuerzas Armadas israelíes, el aparato no tripulado había despegado de una base militar en Damasco en una misión de reconocimiento para Hezbolá, y se internó en la zona desmilitarizada situada entre la meseta del Golán y el territorio bajo control de Siria.
Varios cazas despegaron de inmediato ante la amenaza, pero no llegaron a disparar contra el dron, a pesar de que se había aproximado a una distancia inusualmente cercana de posiciones israelíes. Fue finalmente interceptado por un misil Patriot del sistema de defensa antiaérea del Estado hebreo, y sus restos cayeron en una zona próxima a la ciudad siria de Quneitra.
Netanyahu ya anticipó el lunes al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, su preocupación por el creciente despliegue iraní en Siria, junto con milicias chiíes que también luchan como aliados en las filas del Ejército leal al régimen del presidente Bachar el Asad. El jefe del Ejecutivo israelí centró buena parte de su intervención ante el máximo foro de la ONU en la amenaza que Israel percibe, en la etapa final de la guerra siria, por el incremento de la presencia de fuerzas enemigas en sus fronteras.
El pasado mes de abril ya fue derribado por un misil tierra-aire un avión no tripulado en la misma zona, donde Israel responde sistemáticamente con represalias contra el Ejército sirio ante cualquier caída accidental de proyectiles procedentes de los combates en los más de seis años de guerra en el país árabe. Hace apenas dos semanas, cazabombarderos israelíes destruyeron una fábrica de armas químicas en el noroeste de Siria, en un ataque en el que murieron dos personas.
El jefe saliente de las Fuerzas Aéreas, el general Amir Eshel, confirmó recientemente que Israel ha intervenido en un centenar de ocasiones contra arsenales y convoyes de transporte de armamento de Hezbolá a lo largo del conflicto en Siria. El pasado mes de marzo, tras una de esas incursiones, el Ejército sirio disparó misiles contra los aviones de combate israelíes, en el considerado incidente más grave entre ambos países en seis años. El escudo antimisiles Arrow interceptó uno de los cohetes cuando iba a impactar en un área situada al norte de Jerusalén.
Israel sigue técnicamente en estado de guerra con Siria desde que en 1949 selló un armisticio con los países árabes que intentaron impedir la creación del Estado judío, y después de los conflictos armados de 1967, cuando se apoderó de los Altos del Golán, y de 1973, en el que Damasco trató de recuperar si éxito el territorio montañoso, que sería posteriormente anexionado por el Gobierno israelí sin aprobación internacional.