Gobierno denuncia que movilizados de Achacachi reciben financiamiento y planean atentados

El ministro Carlos Romero dijo que existen planes para realizar atentados que afecten la distribución de agua en algunas poblaciones de La Paz. Aseguró que además hay gente pagada para alentar la violencia.

La Razón Digital / Baldwin Montero / La Paz
El Gobierno denunció este jueves que la movilización de pobladores de Achacachi que exige desde hace tres semanas la destitución del alcalde Édgar Ramos tiene planes para cometer atentados contra puntos de provisión de servicios básicos y que, además, incluye en sus filas a personas que reciben financiamiento para generar actos de violencia.


La denuncia la hizo el ministro de Gobierno, Carlos Romero, en una conferencia de prensa en la que además acusó el dirigente que encabeza esta protesta, Felipe Quispe, conocido como el Mallku, de haber impuesto una especie de estado de sitio en esa población por sus afanes de protagonismo político.

Recordó que Quispe fue quien puso en marcha la estrategia de tres planes de lucha, a los que denominó Gabriela Zapata, Álvaro García Linera y Evo Morales. Dijo que el segundo consiste justamente en actos de violencia como los atentados contra puntos estratégicos de provisión de servicios básicos.

“Es una estrategia que consiste básicamente en provocar atentados para interrumpir la provisión de agua en algunas zonas del departamento de La Paz, atacando las torres de Zongo”, denunció y respaldó esta afirmación en informes de inteligencia que dijo haber recibido en su despacho.

Ante ello, anunció que “ya se han tomado las medidas precautorias correspondientes” y advirtió con acciones legales inmediatas contra quienes eventualmente participen en estos hechos.

“En caso de pretender consumarse esta estrategia actuaremos con todo el rigor de la ley, porque estamos hablando del interés común, de los servicios básicos y derechos fundamentales de la población paceña”, insistió.

Romero denunció además que en las protestas de los pobladores de Achacachi participan encapuchados que reciben financiamiento de hasta 10.000 bolivianos para provocar actos de violencia.

Consultado sobre el origen de este financiamiento, dijo que el caso aún se encuentra en investigación sobre la base de testimonios recibidos por efectivos de Inteligencia.

Durante la mañana, la planta la Empresa Pública de Lácteos de Bolivia (Lácteosbol) que se encuentra en Achacachi sufrió un atentado dinamitero, tras lo cual el Servicio de Desarrollo de las Empresas Públicas Productivas (Sedem) resolvió suspender temporalmente sus actividades, según anunció su directora ejecutiva Patricia Ballivián.

“Hoy nos hemos visto afectados por dinamitazos en la planta, lo cual nos obliga a tomar la decisión de suspender el funcionamiento en resguardo de los trabajadores y la planta como bien público”, anunció, tras recordar que con ello se encuentran afectados más de 1.000 productores de leche de la zona.

Romero lamentó el uso político que hizo de este conflicto el exdirigente campesino Felipe Quispe, a quien acusó de mentir permanentemente a los habitantes de Achacachi con la promesa de una protesta con respaldo nacional de los sectores críticos al Gobierno.

“El señor Felipe Quispe ha mentido y engañado a sus bases, porque su movilización ni siquiera llega a ser provincial”, aseveró.

En el caso del denominado plan Gabriela Zapata, dijo que era lamentable que Quispe haya movilizado a mujeres y niños hasta la ciudad de La Paz para cumplir una vigilia en condiciones de riesgo para su integridad física.

Respecto al plan Evo Morales, dijo que consiste en desacreditar al Gobierno, algo que en su criterio tampoco ha tenido resultados.

Entradas populares