La noche que Neymar enamoró al PSG y decidió escapar de la sombra de Messi
La histórica remontada del Barcelona ante PSG en Champions de marzo pasado tuvo como figura saliente al brasileño pero entonces el mundo habló de una foto de "La Pulga". Aquello fue demasiado para el ex Santos
Infobae
Que Neymar y Lionel Messi tengan una fantástica relación dentro y fuera de la cancha no significa que ambos estén dispuestos a convivir hasta el resto de sus carreras profesionales en un mismo equipo. De hecho, una de las grandes razones por las que el brasileño optó por alejarse de España es el protagonismo único de la Pulga. Y el clic, lo hizo este año, en un recordado episodio.
El Barça había perdido 4-0 en Francia ante el Paris Saint Germain, por la ida de los cuartos de final de la Champions League. Necesitaba darle forma a una verdadera hazaña para meterse entre los cuatro mejores del continente europeo, pero de la mano de Ney, todo fue posible.
No tuvo todas las luces prendidas en la primera parte, pero exhibió su habitual vértigo y calentó motores para lo que ofrecería en la segunda, donde fue protagonista directo en los cuatro tantos restantes. Fabricó la infracción del 3-0 que anotaría Messi de penal, marcó el cuarto -con un tiro libre magnífico- y el quinto -desde los 12 pasos- y envió el centro para que Sergi Roberto concretara el 6-1.
Antes de hacer un partido de 10 puntos, Neymar declararía que había "1% de posibilidades, 99% de fe", una frase que se hizo publicidad en breve. Pero la gran imagen de la remontada fue una de Messi, con el puño en alto y una muchedumbre alzándolo. Sí, del amo y señor del club catalán.
Allí mismo entendió que más allá de haber sido designado como el gran sucesor de la Pulga, el delantero paulista de 25 años tendría mucho fútbol por dar, pero siempre a la sombra de su compañero. Entonces, comenzó a caber en su cabeza la idea de abandonar al Barça, aunque siguió tirando paredes con su compinche de ataque.
Hoy, la historia dice que Neymar dijo adiós y será la estrella principal del PSG, que en el último tiempo supo competir contra los grandes del Viejo Continente en la Champions League, pero que compite en una liga francesa que no está a la altura de la española, la inglesa y la italiana, las de nivel de excelencia.
¿Le bastará ser la gran figura en un equipo de menor envergadura para destronar a Messi y Cristiano Ronaldo del pedestal?
Que Neymar y Lionel Messi tengan una fantástica relación dentro y fuera de la cancha no significa que ambos estén dispuestos a convivir hasta el resto de sus carreras profesionales en un mismo equipo. De hecho, una de las grandes razones por las que el brasileño optó por alejarse de España es el protagonismo único de la Pulga. Y el clic, lo hizo este año, en un recordado episodio.
El Barça había perdido 4-0 en Francia ante el Paris Saint Germain, por la ida de los cuartos de final de la Champions League. Necesitaba darle forma a una verdadera hazaña para meterse entre los cuatro mejores del continente europeo, pero de la mano de Ney, todo fue posible.
No tuvo todas las luces prendidas en la primera parte, pero exhibió su habitual vértigo y calentó motores para lo que ofrecería en la segunda, donde fue protagonista directo en los cuatro tantos restantes. Fabricó la infracción del 3-0 que anotaría Messi de penal, marcó el cuarto -con un tiro libre magnífico- y el quinto -desde los 12 pasos- y envió el centro para que Sergi Roberto concretara el 6-1.
Antes de hacer un partido de 10 puntos, Neymar declararía que había "1% de posibilidades, 99% de fe", una frase que se hizo publicidad en breve. Pero la gran imagen de la remontada fue una de Messi, con el puño en alto y una muchedumbre alzándolo. Sí, del amo y señor del club catalán.
Allí mismo entendió que más allá de haber sido designado como el gran sucesor de la Pulga, el delantero paulista de 25 años tendría mucho fútbol por dar, pero siempre a la sombra de su compañero. Entonces, comenzó a caber en su cabeza la idea de abandonar al Barça, aunque siguió tirando paredes con su compinche de ataque.
Hoy, la historia dice que Neymar dijo adiós y será la estrella principal del PSG, que en el último tiempo supo competir contra los grandes del Viejo Continente en la Champions League, pero que compite en una liga francesa que no está a la altura de la española, la inglesa y la italiana, las de nivel de excelencia.
¿Le bastará ser la gran figura en un equipo de menor envergadura para destronar a Messi y Cristiano Ronaldo del pedestal?
